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Era sábado, si exactamente el día de la fiesta, lamentablemente no encontré un regalo para que Andy dejara de ser, ya saben, una pequeña zorrita, así que le compre un labial.

Tome una ducha y me arregle para la fiesta, no tenia nada que ponerme pero recordé que mi madre me había regalado un mono muy lindo con estampado de flores

Y me puse un par de zapatillas color negro, planche mi cabello y maquille un poco mi rostro para que luciera natural.

Eran las 5:30 pm cuando salí de mi casa, la casa de Andy estaba a cuatro cuadras de la mía, así que iría caminando, camine por la acera cuando escuche que alguien me llamaba, voltee y vi a Min acercándose a mi.

-Hola, oye ¿te diriges a la fiesta?- dijo mientras se ponía una chaqueta de cuero, se veía increíble, su cabello lucia mejor en los rayos del sol, y su piel parecía de porcelana que podía dar la sensación de que si la tocabas podría romperse.

-Si ¿por?- respondí distraída pues no podía dejar de pensar en lo bien que lucia.

-¿puedo ir contigo? no se donde está su casa y no quiero llegar solo-

-Claro, no hay ningún problema-

Comenzamos a caminar, el sol estaba bajando poco a poco entre el bosque y el clima era perfecto.

-Nunca te había visto con vestido-

-No es un vestido, es un mono-

-¿un mono?, ¿que es eso?-

-lo que estoy usando ahora- dije encogiéndome de hombros

-Que graciosa eres, pero realmente luces muy bien, y no había notado que tienes unos ojos preciosos-

Ay no, si seguía dándome cumplidos me iba a sonrojar bastante hasta parecer un tomate muy feo y colorado.

-Pues... gracias, tú también luces bien- dije un poco avergonzada

-¿y tu regalo?- le pregunte pues observe que no traía ningún obsequio consigo

-¿tenía que comprar regalo?- me preguntó preocupado

-supuestamente pero no te preocupes no creo que se moleste- dije mientras pensaba en que aceptaba otros tipos de regalos, espero no se le ocurra andar de resbalosa con el, pero se veía tan bien que era casi imposible pensar que no lo haría

-Bien es esa casa de ahí- señalé una casa azul que estaba en la esquina de la calle, ya había muchas personas en la fiesta

-Pues vamos- dijo dirigiéndose a la entrada

-¡Hola Yoongi!- dijo ella mientras lo hacía pasar y de paso pasaba su mirada arriba y abajo para verlo mejor

-Oh y Hola ______, sabes que para entrar necesitas traer regalo- A él ni siquiera le pidió regalo que maldita era

-Bien aquí tienes, por cierto feliz cumpleaños-

-Puedes entrar-

Entre pero Min se había ido con los que creo eran sus amigos, afortunadamente encontré a Michelle sentada en el sofá de la sala y me acerqué hacia ella

Borderline | Yoongi & Tu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora