Alexandra Petrova

20. Pelea

Entonces Damon desapareció entre la oscuridad. Cuando Elena estuvo curada y calmada, Stefan me pidió que lo ayudara con unas cajas que contenían los diarios de Jonathan Gilbert.

- No puedo explicar cuanto odio a este imbécil. - le dije a Stefan con una amarga sonrisa en el rostro. - Por su culpa, me pasó lo que me pasó.

Stefan se limitó a darme una sonrisa de aliento.

Cuando bajamos con las cajas, ya Damon había metido el cuerpo sin vida de Elijah en la maleta del coche y Elena tenía las maletas en la puerta.

- Estamos listos. - dijo Stefan, después de que colocáramos las cajas en la maleta de un pequeño auto rojo, que era el suyo.

- Vamos. - dijo Damon, haciéndome señas para que subiera a su auto.

Me subí. Esperamos unos minutos hasta que Stefan le dijo a Damon:

- Mejor adelántense. Nosotros los alcanzamos.

- Como quieras. - dijo Damon y arrancó.

El camino de regreso a la casa, lo transcurrimos en silencio, sin decir ni una palabra. Esperamos en el porche a que llegaran Stefan y Elena. Unos cuantos minutos más tarde, llegaron. Stefan y Damon sacaron a Elijah de la maleta del auto y lo llevaron de nuevo a la celda. Elena y yo bajamos con ellos. Cuando llegamos abajo Damon estaba registrando a Elijah.

- ¿Qué tenemos aquí? - dijo mientras palpaba un bolsillo de la chaqueta. - Una pequeña piedra lunar de jabón. - dijo sonriendo y enseñando una pequeña piedra del color de la luna. - Me quedaré con esto. - y se la guardó en el bolsillo.

- Así que eso es todo. Quiero decir, que mientras la daga este allí... permanecerá muerto. - dijo Elena.

- Así es. - contestó Damon.

- Bueno, entonces... buenas noches. - dijo Elena y comenzó a caminar, pero se detuvo y dio media vuelta. - Saben... ustedes quieren que peleé... pelearé. Pero si vamos a hacer esto, no pueden seguir ocultándome nada. Desde ahora en adelante, será a mi manera.

Stefan y Damon intercambiaron miradas y luego Stefan dijo:

- Me parece justo.

- Bien. - añadió Damon.

- Bien. - dijo Elena y se fue.

- Parece que cambio de actitud. ¿Cómo lo conseguiste? - le preguntó Damon a Stefan.

- Le conté una pequeña historia - dijo Stefan colocándose frente a Damon. - sobre cuando yo tome decisiones equivocadas, y alguien me enseñó que había una mejor forma.

- ¿Lexi? - dijo Damon, poniendo los ojos en blanco.

- Si, ¿La recuerdas? - dijo Stefan.

Entonces Damon se quedó en silencio unos segundos como si recordara algo. Luego se desperezó y dijo:

- Buenas noches chicos. - sonrió y se fue.

Cuando estuvimos solos, Stefan se volvió hacia mí y me dijo:

- Gracias por todo lo de hoy. Y lamento mucho... lo de... uhm... haber insinuado que tu... bueno... mataras a Elijah. - dijo y me miró.

- No te preocupes. Sé cómo es cuando quieres a alguien de verdad. Solo quieres salvar a la persona en ese momento y ya. - sonreí.

Stefan me abrazó.

- ¿Cómo fueron estos días? - me preguntó, separándose un poco de mí para verme a la cara.

- Sobreviví. Soy una sobreviviente. - dije riéndome.

- ¿Él te trato bien? - dijo Stefan apuntando hacia el lugar por el que había desaparecido Damon.