54. Problemas

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- ¿Por qué? - preguntó Stefan, intentando calmarme, pero él estaba igual o más nervioso que yo.

- No lo sé, no lo sé. Salvamos a Caroline y a Tyler. ¡Ahora no tiene nada! ¡Va a matarlo!

- ¡Oh Dios! - exclamó. Entonces sacó su teléfono.

- No pierdas el tiempo. Yo no pude detenerlo; y dudo mucho que puedas tú. - le dije, aún temblando. - ¿Qué vamos a hacer?

- No lo sé. Estaba saliendo a reunirme con Elijah, y Bonnie... - Stefan hizo una pausa. - Necesito que te quedes aquí, y trates de comunicarte con Damon, si lo consigues, avísame; yo iré con ellos.

- No. - negué con la cabeza. - No voy a quedarme aquí. No puedo. Moriré de la desesperación. No me quedaré, iré contigo. - finalicé, decidida.

- Ok, entonces vamos. ¡Alaric, vámonos!

En medio de la conmoción no me había percatado de que Alaric estaba en la casa. Apresurados, salimos y nos montamos en el auto de Stefan. Yo fui en el asiento trasero. Stefan arrancó el auto, y no fui consciente de cuánto tiempo paso, cuando se detuvo... frente a un pequeño bosque.

- Caminamos desde aquí. - dijo Stefan y a paso presuroso se introdujo en la maleza, Ric lo siguió, y yo avancé por última.

Caminamos y caminamos, y mientras lo hacíamos, llamaba al celular de Damon, pero no respondía. Al cabo de unos minutos nos encontramos frente a una casa, increíblemente antigua. Estaba tan sucia y vieja, que era casi imposible decir que las paredes eran blancas. Cuando estuvimos un poco más cerca, visualicé a Elijah, de pie a las afueras de la casa, con las manos en los bolsillos.

- Hey, ya estamos aquí. - dijo, Stefan aunque Elijah ya lo sabía. - ¿Dónde están Bonnie y Jeremy?

- Adentro. - contestó él, tanto sereno como siempre.

- ¿Cómo vamos a hacer para matar a Klaus? - le pregunté, saltándome todo el protocolo.

- El sacrificio se completa en fases, como la luna llena. - comenzó a explicar Elijah, mientras nos acercábamos más a la casa. - Primero es asesinado el hombre lobo, luego el vampiro - hizo una pausa. -, y finalmente la doppelganger. Una vez Elena muera, la maldición se romperá... y Klaus será un híbrido.

- ¿Y cuando atacamos? - preguntó Ric, casi al mismo tiempo, que yo preguntaba:

- ¿Y luego qué? - pregunté, aún intentando comunicarme con Damon, pues comenzaba a preocuparme.

- La muerte de Elena, activará su lado de hombre lobo. Estará vulnerable, débil, durante la transformación. Ahí es cuando Bonnie entra. - contestó, con suma tranquilidad.

- ¿Estás seguro que Bonnie sobrevivirá a esto? - le preguntó Stefan, mientras miraba la entrada a la casa, como si esperara a ver a Bonnie.

- Si puede colocarlo al borde de la muerte - dijo sin inmutarse en lo más mínimo. -, yo mismo terminaré el trabajo.

En ese momento Damon respondió mi llamada, y cuando escuché su voz... sentí un alivio tremendo en mi interior.

- Aló.

- Damon, gracias a Dios. ¿Estás bien? - le pregunté, tratando de controlar las manos, que me temblaban sin cesar.

- Si, yo - hizo énfasis en la palabra. - estoy bien.

- ¿Y quién no, Damon?

- Pásame a Stefan, por favor. - me pidió con calma.

- Claro. - para el momento en el que le iba a dar el teléfono a Stefan, éste ya tenía la mano extendida en mi dirección, coloqué el aparato en la palma de su mano; y lo seguí, cuando se alejó un poco de Alaric y Elijah.

Alexandra PetrovaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora