Demonio

41.- ¿Te importo?

Maratón 1/?

Jaxon's POV

Después de una serie de preguntas de los doctores logramos entrar de nuevo a la habitación en donde Eleanor estaba con mas máquinas alrededor. Según lo que escuchamos, lo que sucedió fue algo crítico. no puede un paciente despertar, levantarse y luego en el mismo instante recaer de nuevo en coma... y temen que sea peor.

Zoey esta muy asustada con todo lo que esta pasando, la saqué del hospital para que se calmara un poco. Ahora estamos en una cafetería atrás del hospital que nos recomendaron las enfermeras.

Apenas y había tocado el vaso sus labios, los mantenía en sus manos como punto de confort. Intentaba animarla, decirle algo que la haga sentir mejor pero se mantenía distante.

- ¿No vas a olvidarlo verdad? - le pregunte esperando alguna contestación positiva de su parte pero recibí una negación junto con un largo suspiro.

No podía ayudarla si no quería ser ayudada. Me levanté para pagar los cafés que tomamos, me giré para avisarle que me iría pero ya no estaba.

Un gracias no le costaba nada.

Caminé al hospital y entré por la puerta trasera, donde una enfermera me miraba sorprendida por el descaro de entrar como si fuera mi casa, pero no me detuvo en ningún momento. Cogí el ascensor con otras personas y presione el botón del piso al que iba. Bajé y una señora caminaba detrás de mi, como si tuviéramos el mismo destino.

Llevaba un ramo de flores y una carta en su otra mano, no quise reparar en que su rostro se notaba sombrío ¿Y quién no? Es un hospital, se reciben malas noticias todo el tiempo.

Entré a la habitación de Eleanor con una mueca, sigo sin creer que Zoey se fue sin decir nada, y peor aún sin admitir su error.

Con un pequeño puchero me senté en la cama de la chica que estaba ahora con más máquinas alrededor, no podía pensar con claridad aún. Nos había atacado y lo peor es que había sido su oscuridad.

- ¿Qué está pasando abajo? - pregunté acomodando los cabellos que tenía en la cara.

No me podía seguir gustando después de acostarme con Zoey ¿no?

- Disculpa. - escuché y giré a ver quién era. - ¿Eleanor Sterling? - preguntaron y me encogi de hombros.

¿Quién rayos es Sterling?

- Sólo Eleanor.. - contesté al verla pasar, sus ojos se cristalizaron y tiró las flores para hacerme a un lado y tocar el rostro de la chica. - Eh... - no sabía que decir, estaba en shock al verla llorar a mares.

Decía su nombre una y otra vez.

- E-ella está..? - dijo entre sollozos. ¿Muerta? ¿Sería muy fuerte decir que sí..?

- Estará bien. - la reconforte un poco incómodo, me miraba fijamente y aparte de no saber quien era..

Volvió a fijar su atención en sus manos con las de Eleanor, me mantuve en silencio un rato hasta que comenzó a hablar.

- ... regresa a casa, hija... - logré escuchar con claridad, me sorprendí tanto que llegué a moverme bruscamente. - Disculpe ¿Quién es usted?

Frunci los labios antes de mirarla a ella y Eleanor. A decir verdad eran muy parecidas, su cabello castaño, sus facciones... y su curiosidad.

- Soy un amigo. - sonreí y ella asintió no muy convencida. - La conocí por Kaled ¿Lo conoce? - le dije y ella entrecerro los ojos. - De éste alto con ojos azules y pelinegro. - le mostraba mientras ella me escudriñaba con la mirada.