El efecto Ángel (Suerte #5)

13| Un día casí perfecto...

Hola addictoners!!!

Saben, estuve leyendo sus comentarios en el capítulo anterior y me emocione un montón.  Interesantes sus teorias sobre Parker y Morgan 😀.  A medida que esta historia avance sabremos si tenían razón o no.

Mientras tanto, gracias por los votos, comentarios y todo el apoyo que siempre me brindan. 😘

Disfruten de la lectura.

Cap ( 1/4)

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Parker estaba muy feliz, de hecho se estaba divirtiendo como nunca y las únicas veces que se sentía feliz y dichoso como aquel día era cuando Ángel estaba con él, lo que no sucedía tan a menudo como quisiera pues su padre debía trabajar. Pero como el buen niño que era, no se quejaba porque reconocía y entendía el esfuerzo que su padre hacía para darle una buena vida.

Pero volviendo a la dicha que estaba experimentando. En su mayoría se debía a lo mucho que le gustaba estar cerca de Morgan, lo seguro que lo hacía sentir, lo querido y apreciado...de nuevo, eso era algo que solo Ángel podía proporcionarle: la certeza de que no sería rechazado.

Una pequeña mano tiró de su brazo y Parker sonrio a la prqueña Payton. Haber llevado sus bloques de cosntrucción fue una gran idea, porque Pay estaba muy emocionada uniéndolos y creando diseños que no tenían forma pero que igual eran bonitos.

Por lo general, Parker no solía llevarse bien con niños más pequeños, le aburrían y quería salir corriendo. Era esa una de las razones por las cuales lo habían adelantado dos años en la escuela, porque solía socializar mejor con niños mayores...er, siempre y cuando esos niños no se metieran con su papí, como el pequeño idiota de Rony había hecho.

—Contluye, una tole— pidió Payton tendiéndole los bloques.

—Esta bien ¿la quieres pequeñita o muy, muy alta?— preguntó empezando a agrupar los bloques.

—Alta, mucho alta.

—Esta bien, pero se dice muy alta ¿de acuerdo?

—Si, muy alta— se corrigió la niña y eso lo hizo sonreir.

Le gustaba corregir a Payton cuando pronunciaba mal las palabras, sobre todo porque ella inmediatamente intentaba pronunciar bien. Y Parker no lo sabía, pero Sam estaba muy agradecida con él, por estar entreteniendo a su niña y además enseñándole a hablar correctamente.