1| Un mesero malhumorado

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Solo me gustaría dejar en claro que esta historia se desarrolla dos años después de "¿Se nos acabo la suerte?" ( sin contar el epílogo).

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Morgan no puedo evitar que su corazón diera un vuelco cuando vio a uno de sus mejores amigos en aquella situación. Era una imagen tan bonita, que se encontró deseando tener papel y lápiz para hacer un dibujo. Claro que podía tomar una fotografía, pero no sería lo mismo.

--¿A qué es hermosa?-- Messer se volvió en su dirección sonriendo ampliamente. En sus brazos tenía a una pequeña y hermosa niña de cabello castaño y ojos azules. -- Vamos Payton, saluda al tío Mo.

--Ti...Mo-- dijo la niña soltando una risita catarina y extendiendo sus brazos en dirección del chico inglés. -- Ti Mo...

-- No voy a cargarte Pay-- dijo Morgan con una sonrisa de disculpa. -- Sabes que eso no va conmigo.

-- En serio tengo la esperanza de que algún día dejes tu aversión a los bebés. -- se quejó el pelirrojo. -- Es que ni siquiera se como es que te resistes a cargar a esta pequeña princesa hermosa.

Mess besó las mejillas de Payton y de nuevo, Morgan sintió que su pecho era invadido por una agradable calidez. Era un poco jodido sentirse de aquella manera a causa de su pelirrojo amigo. A esas alturas ya no debería de pensar en Messer como un chico...debía de pensar en él como su hermano del alma, porque eso era. Pero había algo sobre Messer viéndose todo sexy y tierno mientras cargaba a la bebé, que Morgan tenía problemas para mantener su atención en la carretera.

-- Por si no lo has notado, petirrojo, estoy conduciendo por lo tanto no puedo cargar a la chica hermosa. -- Morgan sonrio inocente. -- Además no tengo nada en contra de los bebés, no se de donde sacas eso.

-- Duh, nunca quieres cargar a Payton y cada vez que ves un bebé te pones un poco pálido...

-- Claro y oye, ya que a ti te encantan los bebés y te vuelves loco con ellos...¿por qué aun no tienes uno? ¿Acaso a tu hombre perfecto no le gustan? ¿o esta demasiado viejo para eso?

-- Ja ja, muy gracioso y solo para que lo sepas, Joseph no esta viejo y a él también le gustan los niños sin embargo estamos bien por el momento. Tal vez más adelante pensemos en eso de ser padres.

-- Joseph esta esperando a tener niños cuando lo llamen abuelo en lugar de papá...

-- Eso fue un golpe bajo, eres cruel Mo.

-- Soy realista.

-- Y a veces un idiota.

--Cállate, no digas groserías frente a la niña o Mike va a golpearnos.

Mess bufó y se dedicó a hacerle carantoñas a la pequeña. En realidad Morgan agradecía de cierta manera el hecho de que Messer aun no tuviera hijos propios, vamos que se veía super tierno con niños ajenos, no digamos con uno que fuera suyo. Era una locura y Morgan estaba hartándose de no poder deshacerse de sus sentimientos por el pelirrojo. Ya lo había perdido ¿ Qué sentido tenía seguir torturándose por ello?

Morgan estacionó el auto frente a ese restaurante que había abierto hace pocas semanas. Nunca había estado ahí pero Sam y Messer juraban que vendían la mejor carne a la parrilla de todos los tiempos y no le quedaba más que confiar en en ellos. El restaurante llevaba por nombre Brotherhood, al parecer era un negocio fundado por una pareja de hermanos...el asunto era que dicho lugar había causado un revuelo increible a lo largo de toda la ciudad.

El efecto Ángel (Suerte #5)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora