El efecto Ángel (Suerte #5)

34| El clan Smith

Estaba preocupado y un poco desconcertado. No podía a apartar la mirada de su teléfono, esperando un llamada o en su defecto un mensaje que le trajera un poco de paz. Pero nada, seguía sin recibir nada. Estaba empezando a pensar que la actitud que ellos habían adoptado era por demás exagerada. Entendía que estuvieran enojados, pero ¿en serio era necesario hacerle la ley del hielo? Joder, era simplemente ridículo.

Un pequeño pellizco en el labio inferior llamó su atención, solo entonces recordó que estaba sentado frente a la mesa del comedor, eperando a que sus chicos estuvieran listos para salir de casa. Ángel lo observaba con un poco de precupación.

—¿Todo bien?— preguntó con algo de duda— es que desde ayer te noto algo ausente.

—Ah...si— le sonrió tratando de parecer depreocupado, pero supo que no funciono cuando Ángel adoptó una expresión más seria. Suspiró y se recostó contra el respaldo de la silla. —Es que sucedió algo que me tiene inquieto.

—¿Y puedo saber qué es?

Esta vez sonrió con sinseridad y se dio palmaditas en los muslos esperando que Ángel entendiera y por supuesto que no lo defraudo. El chico se sentó sobre sus piernas esperando por una respuesta.

—Claro que puedes saberlo —le besó la mejilla mientras rodeaba la cintura del chico— ¿recuerdas hace un par de días cuando fuiste al estudio y Sam nos tomo unas fotos en donde estabas sentado en mis piernas con Pay en tus brazos?

—Claro, Sam subió esas fotos al instagram, también subió otra donde Parker  aparecía  con nosotros ¿pero, qué sucede con eso?

Morgan volvió a suspirar afinzando más su agarre en la cintura de Ángel y dándole una mirada de sosalayo a su teléfono, esperando que este se iluminara magicamente con la llamada que había estado esperando desde hace aproximadamente dos días.

—Sucede que...Sam tiene muchos seguidores en instagran y entre esos seguidores estan mis padres y mis hermanos— sintió al chico tensarse entre sus brazos y se preguntó si acaso debió escoger otra manera de decirlo— el asunto es que hace dos días mamá me llamó preguntando sobre las fotos...y pues básicamente le dije: "Mamá, se que esto sonara sorpresivo, pero tengo un hijo y voy a casarme".

Se quedó en silencio rememorando la llamada. Tal vez se quedó demasido ensimismado porque no fue consciente de su silencio hasta que Ángel se removió alzando la vista. Sus ojos oscuros parecían un poco...¿cautelosos?

—¿Y qué dijo ella?

—Nada— respondió y se rió un poco al ver que Ángel no parecía creerle— En serio, no dijo nada.

—Esta bien sino quieres decírmelo, lo entiendo...

—Hey— dijo tomándolo por la barbilla y besándolo suavemente en los labios— No estoy ocultando nada, en serio mi madre no dijo nada...en realidad me cortó la llamada y no he tenido noticias desde entonces. Intente llamar un montón de veces, pero no responde y tampoco mi padre o mis hermanos.

—¿Eso significa que estan enojados? — Morgan asintió en respuesta y se arrepintió cuando vio los ojos de Ángel llenarse de tristez. —Lo siento, supongo que no estan demasiado felices por saber que te casas o que tienes un hijo ¿cierto?

«Oh, mierda» pensó el rubio con preocupación. De haber sabido que un par de fotografias en intagram provocarian esa confusión, le hubiera pedido a Sam que no las subiera, aunque en realidad no entendía porque su familia estaba actuando de esa manera.

—No estan enojados por eso— se apresuro a explicar sabiendo que si dejaba a Ángel con la idea incorrecta, eso provocaría un retroceso enorme en el avance que el chico estaba teniendo con eso de restablecer su autoestima. —En realidad es mi culpa, debí decirles sobre esto desde antes.