Not this time. Maratón 2/2.
― ¿Entonces dices que hoy no abra fiesta?―pregunta Justin mirándome.
― No después de que los tres mosqueteros tuvieron una fiesta anoche―dice Louis debatido, de nosotros tres a él era quien más se le notaba la resaca.
― ¿Tres mosqueteros?―preguntó divertida Annie.
― Larga historia―dije frunciendo el ceño.
― Oh, lo siento, el profesor cascarrabias de Le Blanc no nos dejaba salir, ya saben, el profesor de Francés―dijo Sophia haciendo una mueca.
― Entonces, si no habrá fiesta, ¿qué harás?―pregunta curiosa Rachel.
― Él y yo iremos por ahí―dice Lucy tomando una de mis chips y comiéndosela.
― ¿Qué acabas de hacer?―pregunte de manera detenida lo más serio posible, tenía unas inmensas ganas de reír a más no poder al ver su cara empalidecer, era imposible enojarme con ella.
― Yo solo―dice ella balbuceando, yo solo me limito a reír un poco y abrazarla mientras le doy un beso en la cabeza.
― No importa, solo es una papa―digo relajado―, pero que conste solo las comparto contigo―digo señalando con mi dedo índice a los demás, todos reímos un poco.
― Parecen una pareja―dijo naturalmente Louis, la chica aun en mis brazos se remueve incomoda.
― Apenas acabo de terminar con Matt y no quisiera empezar una relación ahora―dijo nerviosa. ¿Qué? ¿Había terminado con él?
― ¡Sí!―solté sin darme cuenta, todos voltearon hacia mí, solo me aclare la garganta apenado y fingí comportarme bien.
El tiempo restante paso demasiado lento, deseando saber que me regalaría, por qué tenía que esperar. Cada cinco minutos, o incluso menos, veía la hora que marcaba mi reloj. Agradecí a todos los Dioses y santos cuando la campana sonó. Salí corriendo al salón donde Lucy me había indicado anteriormente que estaría y pasara por ella para irnos. Cuando llegue después de haber corrido hasta ahí ella seguía en clase, solo tardo un minuto para que ella saliera por esa puerta. Al verme sonrió y se puso a mi lado, por instinto la tome de la mano, me alegre cuando ella no se negó o aparto su mano.
― Vamos, tengo un auto esperando por nosotros en el estacionamiento―dice apretando un poco mi mano.
― ¿Es tuyo?―pregunto curioso refiriéndome al auto.
― No―ríe un poco―, es de Annie, me lo presto para poder ir a donde tenemos que ir―dijo mirándome con aquella sonrisa que últimamente comenzaba a cuestionarme si la amaba.
― Me gustaría conducir, sé que suena machista pero en verdad el hombre debe conducir y no la chica―digo mirándola de la misma manera en que ella me mira.
― Claro, solo te diré a donde tenemos que ir―dice aceptando mi propuesta.
El resto del camino hacia el estacionamiento fue silencioso, pero no incómodo. Llegamos a la salida y pude distinguir a Zayn y a Perrie.
― Diviértanse―grita Zayn.
― Disfruta tu cumpleaños―grita esta vez Perrie.
― Gracias, nos vemos luego―grito agradecido.
Llegamos al vehículo, un Buick descapotable algo viejo pero conservado. Lucy me aventó las llaves sorpresivamente, tuve que hacer una maniobra algo rara para poder atraparlas. Ambos subimos al auto y la chica a mi lado puso música de su celular. Little Bird comenzó a sonar.
― Amo esta canción―dijo ella sonriéndome.
― Darlin how i miss you―dije cantando a la par de Ed Sheeran, indirecta para Lucy.
― Ahora gira a la derecha―dice ella cortante, refiriéndose hacia donde tengo que manejar.
Ella era mi pequeño pajarito, un pajarito que ya una vez voló de mi lado, esta vez no la dejare volar tan fácilmente.
― You make me scream, then i make you cry, when i left that little bird when his broken leg to die―canta ella, puedo sentir la indirecta.
― Lucy―hora de enfrentar las cosas―, sé que te hice daño, pero quiero recompensarlo, te quiero mucho, tu amistad para mí es muy importante―digo tratando de verla mientras aun sigo conduciendo.
― Niall, las cosas que me han pasado no se arreglan de la noche a la mañana―dice ella algo cortante, por su voz sé que tiene ganas de llorar.
― Tratare de arreglarlo todo, ya lo veras―digo lo más reconfortante que puedo.
Nos mantuvimos en silencio el resto del viaje, la música y la voz de Lucy cantando algunas partes por lo bajo se pudieron apreciar únicamente. Yo seguía manejando hacia donde ella me indicaba.
― Aquí es―dice sonriendo mientras se desabrocha su cinturón de seguridad.
No había nada, era un campo o algo parecido. Ella fue a la cajuela y saco una canasta junto a unos lentes de sol de gota. Caballerosamente me ofrecí para llevar la canasta yo, ella no se opuso y dejo que yo la llevara. Caminamos solo un poco, desde aquí se podía ver parte de la ciudad. Lucy me indico que dejara la canasta y saco de ella una manta, esta la extendió en el pasto verde y se sentó en ella.
― Ven, siéntate―dijo divertida―, no muerdo―termino de decir sonriendo.
― Bueno, espero que no sea así―dije siguiéndole el juego, ella soltó una carcajada.
― Espero que te siga gustando mi lasaña, es lo único que traje de comer―dice sonriendo mientras saca un recipiente y dos platos.
― ¿Bromeas? Sabes que yo amo como preparas lasaña―digo sonriendo.
― También traje vino, es de manzana, mi favorito, espero que te guste―dice mientras saca la botella de Bones y dos copas.
― ¿Comeremos con los dedos acaso?―pregunto bromeando al ver que no hay cubiertos, recibo un golpe amistoso en el hombro de parte de ella.
― No idiota, sí traje tenedores―dice ella mostrándomelos.
― ¿Y cuchillos?―pregunto alzando una ceja y aguantarme las ganas de reír a carcajadas.
― Ay, lo siento señor perfeccionista pero si desea un cuchillo tendrá que ir a un restaurante―dice ella tratando de sonar enfadada, mal intento.
― No, gracias, pero tendré en cuenta tu oferta―digo y ambos reímos.
― Extrañaba pasar tiempo así contigo―dice ella sirviendo un poco de vino en su copa―, las cosas no eran las mismas sin tus locuras.
― Yo te extrañaba a ti―dije viéndola, ella tomo un poco de su copa tratando de ocultar su sonrojamiento.
Después de seguir charlando, tomar varias copas de espumoso vino y terminar la deliciosa lasaña, Lucy me jalo del brazo haciendo levantarme, la seguí mientras ella caminaba sonriendo, se veía radiante, esta es la Lucy que yo conocí.
― Grita―dijo ella alegre observándome.
― ¿Qué dices?―pregunto mirándola extrañado.
― Grita, sólo grita y libérate―dice ella
Sin pensarlo dos veces la tomo de la mano y grito junto a ella. Puedo sentir algo de adrenalina en mi, con ella a mi lado sentía la adrenalina correr por mi cuerpo. Ahí fue cuando me di cuenta, viéndola sonreír, viéndola llorar, viéndola ser ella, de que seguía profundamente enamorado de ella y no me rendiría tan fácil por ella, no esta vez.
holú, creo que era justo y necesario hacerles maratón, no había podido actualizar bc me fui de viaje y no podía editar los caps, ahora ¿cómo están mis preciosuras preciosas? ah, MUCHÍSIMAS GRACIAS POR TODOS LOS VOTOS, en verdad, muchas gracias, me encanta ver los votos que dejan y todo eso, significa muchísimo para mi<3. voten y comenten, nos leemos pronto, las amo, bai<33.
+4 votos y la sigo.
