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Nothing it's what you think.

Esto era una gran broma ¿cierto? Todo debía de ser un gran malentendido, aunque sabía perfectamente lo que ocurría no quería abrir los ojos. Tomé la foto y la observe detenidamente, analizando todo. Inevitablemente comencé a llorar, aunque no eran lágrimas de enojo, ni de angustia, eran lágrimas de felicidad. Sería papá.

― Niall, ¿qué haces? ―preguntó la castaña somnolienta. No me había percatado de su presencia, estaba tan absorto viendo esa imagen, que simplemente no me había dado cuenta de que ella ya había despertado.
― ¿Lo que mis ojos ven en esta foto es real? ―dije mostrando la foto y volteando a verla, se quedó en shock cuando le mostré la imagen.
― Dime que no te hiciste ninguna ilusión ―susurró ella, para después tragar en seco ―. Niall, soy estéril, no puedo tener hijos.

Entonces caí en cuenta de que por más sorprendido que me haya tomado la supuesta noticia, ya había pensado en un futuro. Ya me había imaginado a Lucy y a mi comprando pequeños artículos de bebés, esperando la llegada de un pequeño ser. Era muy pronto tal vez, pero la esperanza y la ilusión fueron mucho más fuertes.

- Eso realmente le pertenece a Perrie, dejo a Zayn por eso ―dijo con algo de inseguridad en sus ojos ―. Se supone que no te tendría que decir, que a nadie le tenía que decir, por lo que no le digas a nadie. Ella piensa seguir con su vida, tal vez criarla sola, no lo sé.

Entonces la culpa cayó sobre mis hombros. Había juzgado a Perrie porque ella se fue con la intención de no ser juzgada. Muchos sentimientos en poco tiempo y tan solo por una simple fotografía. Rayos, le debía una disculpa a Perrie, pero de eso me encargaría más tarde.

Decidí hacer la cena para mi y para Lucy mejor, para tratar de aliviar el ambiente tenso que se podía persivir aún. Se me vino a la mente hacer algo fácil y sencillo, waffles. Los saqué de la nevera y comencé a calentarlos en un sarten. Mientras tanto sacaba la crema chantilli y unas fresas del refrigerador para decorarlos. Cuando todo estuvo listo, fui a decirle a Lucy que la cena ya estaba lista. Para mi sorpresa se encontraba durmiendo nuevamente. Me senté delicadamente en la cama y sonreí por inercia. Un bebé hubiera sido fantástico, pero tal vez aún no es el momento. Todo sucede por algo, son pequeñas bofetadas que te da la vida y tú tienes que responderle diciendo que pega como una chica. Acaricie su cabello y ella poco a poco se comenzó a despertar, regalandome una sonrida débil

― Hey, hice la cena. Vamos, ya está todo listo.

Juntos nos dirigimos al comedor. Lucy me robó un beso al ver lo que había preparado. Con eso nos bastó para poder sentarnos a comer tranquilamente.

― Cariño, mañana saldré con los chicos, espero que no te importe y no te preocupes estaremos bien, llegaré temprano y trataré de no tan borracho ―ella soltó una carcajada.
― No soy tu dueña Niall, puedea llegar a la hora que quieras y tan borracho como se te antoje. Aunque agradezco el gesto de decirme sinceramente.
― ¿Es en serio? ¿No estás bromeando o algo así?
― ¡No! ―dice divertida ― Hablas como si fuera el peor de los pecados y no es así, tan solo te divertiras con amigos. No le veo el problema a eso, a menos de que quieras hacer algo más.
― No, no, no. Solo que a veces la lógica femenina ea tan extraña que ya no sé qué creer.
- Confía en mi.
- Confío en ti.

Nos sonreímos mutuamente y continuamos comiendo, con algo de tensión esta vez. Al terminar de comer ambos nos quedamos observando hasta que ya no pude ni un segundo más.

Me levanté de mi asiento rápidamente para capturar sus labios con necesidad. Diablos, la necesitaba, era una droga para mi, una droga que cada vez era mucho más necesaria. Su boca sabía a lo apenas comido, un sabor exquisito para mi. Mi le gua pidió permiso para entrar a su cavisad bucal y no pasó mucho tiempo esperando éste. La besé como si mi vida dependiera de ello y sin darme cuenta la cargue para llevarla directo a la habitación. Mientras esto pasaba baje mi boca hacia su cuello, comenzando a besarlo varias veces. Lucy echó su cabeza para atrás dándome mejor acceso al área.

new york city; nh.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora