Entro en casa y dejo la mochila en mi cuarto. Ruedo las cortinas de la ventana para que entre luz natural y me dirijo a la cocina. Mis padres y mi hermana están preparando la mesa para comer.
—Hola —les saludo, y me uno a ellos.
—¿Qué tal?
—Bien —le respondo a mi madre y comienzo a colocar los cuatro tenedores y cuchillos.
Estoy bien, o todo lo bien que se puede estar después de haber decidido subirme en el autobús. No fui detrás de él, no "seguí mi intuición" como decía en el posit de mi madre... simplemente reprimí las ganas de aceptar su propuesta, como una cobarde. Esa fue mi decisión. ¿Me arrepiento? Posiblemente.
Mi padre sirve espaguetis en los platos, y entonces me doy cuenta de que preparé cuchillos para nada. Nos sentamos en silencio, hasta que mi hermana empieza a contar que tuvieron una charla de educación sexual en el instituto. No le avergüenza demasiado admitir que les hicieron practicar para aprender a colocar un preservativo. Me atrevo a decir que son mis padres los que están más incómodos con la conversación que la propia Karlie. Yo también tuve esa charla y también hicimos lo del preservativo, la diferencia es que no se le conté a mi familia mientras comíamos espaguetis.
—¿Y tú, Stella? —me pregunta mi madre.
Pues la verdad es que yo no he puesto ningún preservativo últimamente. Gracias por preguntar.
—¿Qué te dice la gente sobre tu nuevo look? —añade, ante mi silencio.
Me gusta su pregunta porque me recuerda al comentario de Louis. Básicamente me dijo que estaba guapa. La palabra que utilizó fue "espectacular" y eso es incluso mejor.
—De momento cosas buenas.
Me pregunto qué habría pasado si hubiera ido detrás de él. Me lo imagino de mil formas posibles, mil escenas distintas... que no ocurrirán.
—Tal vez deberías comunicarnos decisiones importantes antes de que nos pillen por sorpresa.
Como supuse, no ha superado mi paso por la peluquería.
—Solo es el pelo, mamá. —Trato de no poner los ojos en blanco.
—Ya, pero... ¿Tu color natural? —Enrolla los espaguetis en el tenedor y me mira—. Ni siquiera nos pediste consejo.
No le voy a pedir consejo a mi familia sobre cómo ponerme el pelo, pero eso es algo que prefiero guardar para mí.
—Fue espontáneo —declaro, y no miento.
Ella suspira y se come los espaguetis.
—Y ¿cómo te va en las clases? ¿Te gusta la carrera?
—Está bien —respondo, mientras mastico. No se puede hablar con la boca llena pero ella no para de sacarme conversación.
—¿Bien? ¿Eso es todo?
Mi hermana suelta una risita por lo bajo.
—Estoy estudiando lo que me gusta, así que de momento estoy contenta.
Hoy, especialmente hoy, no me apetece hablar demasiado. Ahora mismo podría estar en el piso del ex novio de Naomi West, pero como soy tonta estoy en mi casa comiendo espaguetis.
—¿Y tus compañeros?
Acabo sonriendo yo. Quizá me nota un poco decaída y por eso está haciendo tantas preguntas.
—Tengo amigos —le aclaro, para que no piense que estoy mal por sentirme sola o algo así.
—Lo sé. —Asiente con la cabeza—. Supongo que ellos son con los que sales.
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Las novelas de Stella
FanfictionHabiendo salido muy pocas veces de su zona de confort, Stella se enfrenta a su primer año en la universidad. Llegan nuevas experiencias, nuevos compañeros y nuevas amistades, y pronto su vida se vuelve más parecida a todas las historias que ella inv...