Ojalá algún día...

587 38 65
                                    

Esta historia está dedicada a 

Por haber sugerido la canción de Cristina; espero te guste, la hice con mucho cariño. 

Es algo larga y por eso la partiré en dos, espero la disfruten.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------

El famoso cantante Cuauhtémoc López ha llegado a la Ciudad de México para una serie de conciertos que estará dando en las siguientes semanas. Sus fans lo recibieron el el aeropuerto Benito Juárez, a las 6am. Él las recibió con sonrisas, abrazos, autógrafos y fotos. Sin duda alguna, un gran ser humano entregado a sus personas.

Temo se encontraba en su habitación de hotel viendo las noticias cuando salió el reportaje de su llegada a la ciudad. Tenía años de no pisar su país. Temo, un joven originario de Toluca, entregado completamente a su carrera musical, uno de los más famosos a sus cortos 23 años, se sentía algo abrumado por el alcance de su fama en su propio país pero sin duda también se sentía feliz y emocionado.

En eso, su celular comenzó a vibrar. Una llamada entrante de su mejor amigo, Diego, se podía observar en la pantalla.

-¿Bueno? ¿Diego?

-¡Amigo! Acabo de ver las noticias ¿hasta cuándo pensabas decirme?

- Yo... si planeaba hacerlo.- contestó riendo - llegué hoy, como ya sabes; estaré unos meses, y quería verte, hace mucho que no salimos ¿qué dices? Podemos vernos hoy, para qué esperar.

-¡Claro! Muero por verte, tengo mucho que contarte. ¿Por qué no vienes al bar?, hoy nos presentaremos a las 10pm. Nos escuchas, te echas unos drinks mientras y terminando nosotros, platicamos y nos ponemos al corriente ¿qué dices?

-No lo sé, Diego, es que es un lugar muy público, no quiero que me aborde la gente. Es tu noche y además, estoy algo abrumado como para estar entre tantas personas.

-Vamos, Temo, será divertido. Quiero presentarte a mi banda. Son buena onda y el ambiente del bar también está bueno. ¡Anímate!

Temo lo piensa, realmente no tiene nada más que hacer en esos momentos y le vendría bien un momento de diversión con su amigo de la infancia al cual no ha visto en mucho tiempo, así que acepta.

A la hora que Diego le dijo, llegó al bar. No hay muchas personas y eso lo hace sentirse más aliviado. Aún así, encuentra una mesa algo discreta y pide una cerveza.

Su amigo era vocalista de una banda un tanto reconocida cuyo representante aprovechaba cada oportunidad que se les presentaba, incluso el de cantar para audiencias "pequeñas" en bares, como esa noche.

Temo disfrutaba de la presentación, cuando notó en el escenario un par de ojos que no dejaban de ver hacia su dirección. El baterista no apartaba la mirada de él.

Cuando terminaron, Diego bajó directo del escenario y se dirigió hacia él. Lo abrazó con entusiasmo pues hacía años que no se veían. De pronto, atrás de Diego, el par de ojos hermosos apareció.

-Ari, te presento a Temo, mi mejor amigo.

-Mucho gusto... ¿Te llamas Temístocles?

Diego y Temo se vieron y se echaron a reír.

-No, no, me llamo Cuauhtémoc, pero me puedes decir Temo, así me dicen mis amigos.- estiró su mano al tiempo que guiño un ojo. Ari se sonrojó un poco y estrechó su mano.

-Yo me llamo Aristóteles, pero tú puedes decirme Ari.

-Ari...

Diego estaba a lado de ellos, viendo impactado la gran química que estos se cargaban; increíble porque los acaba de presentar.

Playlist AristemoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora