Nace una estrella (4)

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I don't want to be anything
Other than what I've been trying to be lately
All I have to do is think of me and I have peace of mind
I'm tired of looking around rooms wondering what I gotta do
Or who I'm supposed to be
I don't want to be anything other than me
I'm surrounded by liars everywhere I turn
I'm surrounded by imposters everywhere I turn
I'm surrounded by identity crisis everywhere I turn
Am I the only one to notice?
I can't be the only one who's learned
Can I have everyone's attention please
If you're not like this and that
You're gonna have to leave
I came from the mountain, the crust of creation
My whole situation made from clay to stone
And now I'm telling everybody
I don't want to be anything
Other than what I've been trying to be lately
All I have to do is think of me and I have peace of mind
I'm tired of looking around rooms wondering what I gotta do
Or who I'm supposed to be
I don't want to be anything other than me

Temo llegó a su casa, que más bien era una mansión. Sus discos de platino y oro colgaban de las paredes. Había toda una repisa llena de trofeos y premios. Un gran cuadro con su cara adornaba su sala.
Había una alberca en el jardín, tres habitaciones para huéspedes y gente a su servicio.

Todo eso era de él y aún así, ese lugar no se sentía como casa.

-¡Cuauhtémoc! ¿Dónde estabas? Te he buscado y no te hallé... bueno, no importa.- dijo Marco, se acercó y robó un beso de sus labios. Temo se sintió raro, nunca nadie podría hacerlo sentir lo que Aristóteles podía.- Alístate, hoy en la tarde tienes una presentación, posiblemente eso nos de pase directo a los Billboard. Mañana tienes una entrevista en la tele, otra en radio y una más para una revista. Pasado mañana hay una fiesta, no es muy importante que vayamos pero decidí que necesitan verte socializando. Y tal vez, el próximo fin de semana, nosotros demos una fiesta aquí, ¿qué tal una Pool party? Esa alberca está muy desaprovechada...

Temo estaba sentado en un sillón. Su mirada se perdió en la nada. En algún punto había dejado de escuchar a Marco. Realmente se le hacía absurda todo esa agenda de eventos que ni le importaban con esa gente tan acartonada y en esas entrevistas que sólo lo ponían nervioso de los aprietos en los que lo metían. Estaba harto. Realmente harto.

-No lo haré...- soltó de pronto, casi en un susurro. Marco no lo escuchó y siguió describiendo sus planes. -No lo haré.- volvió a decir Temo en un tono más fuerte. Pero igual, no fue escuchado.-¡Marco! ¡NO LO HARÉ!- Su voz fue fuerte y alta. Marco se paró en seco, ni siquiera sabía a lo que se refería con eso.

-¿Perdón? ¿Qué...?

-Lo que oíste, no lo haré. Si quieres, haré esas entrevistas pero no más. No fiestas, ni aquí ni allá. No presentaciones. Nada.

-No entiendo, no sé lo qué quieres.

-¿Lo qué quiero? Ooh, es muy simple. Quiero componer mis canciones. De nuevo. Quiero ser yo. El verdadero yo. Quiero cantar lo que yo quiera. Dar un mensaje. No lo que estoy haciendo... no me interesan los premios ni el dinero. Quiero hacer algo importante con mi música. Quiero ser feliz.

Marco se le quedó viendo con demasiada extrañeza. De pronto se echó a reír.-¡Qué buena broma, López! Que buena broma.

-No es ninguna broma, Marco. Hablo en serio. Nunca había hablado más en serio que en este momento. Quiero mi libertad. Ahora.

-Creo que ir a ese baresucho te volvió loco. No regresarás ahí. En fin, alístate, tienes cinco horas, ni un minuto más.

-¿Baresucho? ¡El 33 es como una segunda casa para mi! Es más, las personas que trabajan ahí son más mi familia de lo que tú y yo alguna vez llegaremos a ser. Y ni tú ni nadie podrá decirme qué hacer, mucho menos 'prohibirme' ir al 33.

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