Y es así que llegamos
Nos confundimos, que nos sentimos
Y es así que llegamos
Que nos miramos, que nos perdimos
Fue un beso pasando
De boca en boca y ahora me toca
Y es así que llegaste
Y es así que dejamos
Todos los miedos en el camino
Y es así que nos damos
Nos damos todo y nada te pidoCuauhtémoc López, como ya se dijo, siempre fue muy entregado a la causa.
Francisco López le enseñó a dar antes que recibir y en eso encontraba la alegría de vivir.Nunca tuvo que ponerse a pensar en si amaba a alguien de manera romántica o no, porque ese tipo de amor no era prioridad en su vida. Y se notaba por la forma tan ruda en la que al principio trataba a Aristóteles; por más que se esforzaba en pensar que estaban casados y enamorados, no lograba proyectarlo realmente.
Pero algo cambió cuando comenzaron a interactuar más, cuando empezó a conocer a Aristóteles y darse cuenta de la forma en que sus rizos caían graciosamente por su frente, o como tocaba el piano tan prodigiosamente que era difícil de creer si no lo veías por ti mismo, o la manera en que se perdía en sus sueños, tan delicado que parecía un angelito y hasta daba pena despertar... Yo creo que no era falta de amor, sino que Cuauhtémoc López tenía miedo de amar.
Es cierto que las personas que conocemos a lo largo de nuestra vida tienen impacto en ella, y esta vez, la abuela, aunque fuera de mentira su lazo, lo había ayudado con algunas cosas.
Así que, con todo y sus miedos, decidió escucharla y correr detrás del amor, no sin antes darle un tierno beso a la señora Balboa.Corrió lo más rápido que puede hasta llegar a su habitación.
Se sorprende porque encuentra a Aristóteles ya haciendo los baúles, pero no importa, porque es importante decirle.-Al amanecer, cuando abres la ventana o cuando miras al fuego; cuando llego o cuando me voy, tus ojos... 12 noches te he sentido dormir junto a mí y me gustaba sentir tu respiración bajo el mismo techo. Necesitaba sentirte cerca de mi. Te necesito para que haya un mañana en mi vida. Yo tenía un sentido y tú me lo robaste para poder abrir mi corazón...
Aris sonríe y en ese punto, las palabras ya sobran, así que los dos se acercan con rapidez, pero al estar lo suficientemente cerca van despacio, quieren disfrutar ese momento, quieren congelar el tiempo para siempre, quieren ser ellos y nada ni nadie más.
Aris agarra su mejilla, mientras Temo enreda sus manos en aquellos suaves rizos y de a poco se acerca a sus labios para besarlo, esta vez de verdad, con auténtico cariño, amor, devoción, entrega...Hasta que son interrumpidos, ni más ni menos que por 0702.
Ambos se sorprenden, pues de todas las personas que podían ver, él era quien menos creían posible que se encontrara ahí.-¿¡Cómo entraste!?- pregunta Temo entre apenado, asustado y confundido.
-Magia, señor. -le contesta, haciendo un gesto con las manos.
-¿Enserio? -pregunta con evidente sarcasmo -¡¿Por qué estás aquí?!
-Bueno, yo lamento interrumpir, pero... tenemos un problema, pero ya lo solucionamos les voy a explicar el nuevo plan. - y así lo hace, sólo que ya no había mucho tiempo.
↬•↫
Los abuelos están en su cuarto, nerviosos preparándose para una última cena.
La tristeza recorre a la abuela y el remordimiento al abuelo; pero ya no había más que hacer, su tiempo había acabado y con suerte, el final saldría bien...Suerte... Justo lo que no tenían en ese momento.
Isabel toca la puerta y al indicarle que podía pasar, da la noticia de que había alguien en la sala, preguntando y esperando urgente por el señor Balboa.
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Playlist Aristemo
FanfictionOne shots e historias cortas AU Aristemo inspirados en canciones. 'Dejemos que el destino sea el principal cómplice que nos haga coincidir una y otra vez en cualquier vida, en cualquier galaxia y bajo toda circunstancia.' *Todos los personajes perte...