Capítulo 9

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Entonces, sorprendentemente, Marcco habló, aunque fue solo para afirmar lo que yo ya había pensado. Calló enseguida y Míriam continuó hablando.

-Estos poderes se pasan de padres a hijos salvo algunas excepciones , por lo que sí, tenéis poderes. Mary y Baby Jack son magos de luz y Jane y Tony son magos oscuridad.

No dijo nada de mí, y yo pensé que era una de esas excepciones de las que había hablado. Me entristecí. Habría sido bonito ser como mi padre, por que siempre le había admirado. 

La voz de Marcco me sacó de mis pensamientos:

-Es hora de que conozcáis a las Supremas.

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Caminamos por un pasillo estrecho con la única iluminación de unas antorchas colgadas en las paredes hasta llegar a una sala enorme con dos tronos en los que se sentaban dos mujeres muy mayores.

Cuando llegamos, Míriam y Marcco inclinaron la cabeza en señal de respeto y una de las dos mujeres, que tenía el pelo blanco y los ojos verdes, se levantó y empezó a hablar:

-Bienvenidas a la fortaleza, el lugar dónde todos los magos se entrenan. Un lugar seguro, dónde estaréis a salvo de Paola y os entrenaréis para sacar el máximo partido a vuestros poderes. Yo soy Soraya, maga de luz suprema, y ella es Miranda, maga de oscuridad suprema. Estamos encantadas de poder contar con los hijos de Jack, que fue uno de nuestros mejores magos.

Cuando Soraya terminó de hablar, Miranda, una mujer con los ojos grises y el pelo muy negro, se levantó al igual que su compañera.

-Mary, Jane, Tony, Jack, es un gran honor teneros aquí, pero aún queda una cuestión que solucionar.-Me señaló con el dedo muy teatralmente.-¿Quién es ella?.

Mis hermanxs y yo nos miramos sorprendidos. ¿A qué se refería? Cuando Míriam contestó, me sorprendí aún más.

-No lo sabemos.-Dijo ella.-Estaba con ellos y afirman que es su hermana.

Es nuestra hermana!- Me defendió Mary. 

-Sin embargo, no se tiene conciencia de que Jack tuviera otra hija...-Murmuró pensativa Soraya.-¿No podría ser hija de otro hombre?

Me enfurecí.

-¡OIGA, USTED NO TIENE DERECHO A HABLARNOS ASÍ NI A MÍ NI A MI FAMILIA!-Grité.

Miranda se rió por lo bajo.

-No hay duda de que tiene el genio de Jack.-Murmuró la suprema de luz.

-Y ahora, ¿que hacemos?

Nadie respondió a la pregunta de Marcco.

Oscuridad luminosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora