Después del desayuno visite la mansión Spence donde hable con Alex de la situación, teniendo en cuenta que su vida corría peligro debía informarle.
-Entonces el sujeto de la organización Angels es un asesino en serié... Me alegro no haber aceptado, pero ¿como es que sabes todo esto?
-Scotland Yard, nos informo Joven Alex debido a la amistad que tiene con mi ama.
Como ya habrán supuesto, Alex no sabe de mi trabajo como El Perro Guardián Del Rey, ni siquiera sabe que su padre es uno de los informantes de la familia.
-Ya veo, entonces...
-Sebastian baja el equipaje - hizo una reverencia y se retiró - Sebastian y yo nos quedaremos a protegerte, tal vez te resulte molesto pero a partir de ahora iré a donde vallas... - los ojos se le iluminaron - hasta que se resuelva el casó, después de eso volveremos a la normalidad.
-De acuerdo... Ashelia, ayuda al señor Sebastian y guía lo hacia sus respectivas habitaciones.
-Entendido Señorito - Se retiró.
- ¿Y tus padres?
-Oh...están fuera de la ciudad.
-Bien ¿cual es tu itinerario?
-Esgrima, Montura, Literatura y piano, antes del almuerzo...
Durante los siguientes minutos, continuamos hablando de estos temas, al parecer mañana debe ir a la compañía de su familia para una junta de propuestas, después de un rato lo acompañe al salón donde tomaría su clase de esgrima, pero...
-Joven... ¿cuantas veces le he dicho la forma correcta de la posición?
-Lo lamento Señor Charles...
A pesar de su edad, parece un niño chico, suspire frustrada, no recuerdo que yo me tardará tanto en aprenderla.
"Eso fue debido a que ha sido una alumna excepcional"
"Gracias... Tal vez tu método sea agresivo pero es eficaz"
Al mirarlo estaba sonriendo, hice lo mismo.
-Joven permita que mi ama le de una demostración.
-Sebastian... Yo no...bueno...
-Vamos Angelica, necesito un poco de ayuda.
-Un poco, yo diría que mucha ayuda joven Spence, como sea terminamos la clase por hoy.
Se fue molesto y frustrado, no lo culpo de tan solo ver a Alex, yo me frustre.
- La clase termino Alex, tienes que ir a la siguiente.
-Vale... Sera para la próxima.
Continuamos con el itinerario... confirmó que nada es lo que parecé, es como un niño curioso, es tierno de cierta forma, pero desesperante.
-Señorita que le gustaría para el almuerzo - Ashelia.
- Nada en especial, si gustas Sebastian puede ayudarte.
-Deacuerdo, Señor Sebastian por favor sigame.
-Con su permiso my lady.
Realizó una reverencia y se retiró junto a Ashelia, me acerqué a Alex y a su maestro de piano, era mejor en el piano que en todo lo demás.
- Es maravilloso joven Alex.
-Le agradezco condesa es lo único en lo que soy realmente bueno.
- De acuerdo, la lección a terminado, hasta la próxima joven Spence, fue un gusto conocerla Condesa Phantomhive.
-El gusto fue mio Señor Will.
Se retiró y me senté junto a Alex, observe el piano con melancolía... Solía tocar con mi padre en su tiempo libre.
-Se que eres buena con los instrumentos... ¿Cual sería tu favorito?
-Bueno es difícil decidir adoro el piano y amo el violín.
-¿Porque?
-El piano es por mi padre...es el instrumento donde mas tiene habilidad, además de que solíamos tocar juntos y el violín... Es por Sebastian.
-¿Por el señor Sebastian?
-asentí- cuando era pequeña solía tocar para mi y fue el primer instrumento que aprendí a tocar... Aprendí por él, quería ser yo quien tocara para él... Se lo que estas pensando, es ridículo que alguien de mi posición quiera hacer algo por sus sirvientes.
-No es ridículo, los humanos hacemos cosas por las personas a quienes amamos. Claro esta que existen diferentes tipos de amor.
Lo mire extrañada, ¿amor?, ni siquiera se si ese sentimiento existe en mi, ¿tipos?, bueno soy ajena al tema.
-Señorita, Joven Alex, el almuerzo esta listo.
-Entendido ahora vamos Sebastian.
Asintió y se retiró, estaba por irme detrás de él pero Alex me detuvo.
-Perdón si lo que te voy a preguntar te es molesto pero... ¿Te has enamorado antes?
-mmm... No, aun no he experimentado ese sentimiento humano.
-¿Segura?, tal vez si lo has hecho y no lo has identificado.
Me quede pensando por un momento.
- Es posible, vallamos al comedor se enfriara la comida.
Continuamos acompañándolo en el resto de sus actividades hasta asegurarme de que estuviera dormido, para continuar con mi trabajo.
-Así que no encontraste rastro alguno y esa noche solo estaba el cuerpo.
-El cuerpo y esto señorita- me mostró una pluma blanca.
-Una pluma... -Cheque los informes de las demás víctimas- al parecer en todas las escenas se encontró una.
- ¿Que haremos ahora Señorita?
-Trataré que Alex me de la descripción del sujeto y si no lo encontramos antes de la siguiente reunión tendremos que acompañar a Alex en todo momento.
-Entendido, entonces... -me quito los papeles.
-¡Sebastian!...
-Lo siento Señorita pero debe descansar.
-Pero...
-Por favor duerma.
Levanto la cobija para que me metiera en la cama, simplemente suspire para hacer lo que me pidió y después me arropó.
-Descansé My lady.
-Gracias... Buenas noches.
Cerré mis ojos poco después, creó, sentí una caricia y un beso en mi mejilla, después de esto mi sueño se volvió profundo.
-Eres débil...
-¿quien es?... ¿donde estoy?
El lugar era un vacío en blanco, estaba sola pero esa voz resonaba por todo el lugar.
-Pronto no tendrás a tu demonio para protegerte.
-¿A que te refieres?
-Me deshare de él y estarás sola.
La escena de como destrozaban a Sebastian paso frente a mis ojos pero esta vez logre visualizar al oponente de mi mayordomo, era un hombre vestido de blanco alado...era un ángel y portaba una lanza.
Me levante de golpe con lágrimas en los ojos salí de la habitación, fui a la de Sebastian, estaba sentado en la cama leyendo los papeles, me miro y corrí hacia él para abrazarlo.
-Señorita...¿esta bien?... Esta temblando.
No conteste simplemente me aferré más, sentí como me subió sobre su regazo y me abrazo mientras acariciaba mi cabeza, para cuando me di cuenta ya estaba dormida.
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SOLO ES UN MAYORDOMO
FanficSecuela: SOLO ES UN DEMONIO Mi padre Ciel y mi madre Elizabeth, conozco la historia de mi padre con nuestro mayordomo Sebastian, mi padre por "amor" convirtió a mi madre también en demonio eso debido a que yo la estaba matando antes del parto, mi n...