An Angel In The Dark

Capitulo 27: Maldito Rick Grimes.

Hola hermosas lectoras!! Hoy jueves, dia de actualizar!! Subo este capitulo temprano porque en unas horas debo llevar a mi hijo al pediatra, a su chequeo, y no queria dejarlas esperando hasta la noche, por eso aqui les dejo un nuevo capitulo!!

Gracias a todas por leer, votar y comentar. Gracias a las chicas que siempre comentan y me quitan una sonrisa con sus hermosos comentarios.

Un abrazo gigante!!

(Narra Daryl)

Me gire en la cama, me senté y un fuerte dolor de cabeza me hizo tumbarme de nuevo. Respire hondo, mire a mi alrededor, estaba en la celda de Tanya, recuerdo haber venido para hablar con ella pero al parecer me había vencido el sueño.

Salí de la celda y pase por la mía, estaba vacía. Comencé a bajar las escaleras, me preguntaba en donde mierda Tanya estaba durmiendo?

Muchos ya se estaban despertando, fui al comedor donde Beth me sirvió una taza de café.

-Como te encuentras?- Maggie se acerco a mi.

-Bien, solo con dolor de cabeza.- conteste mientras bebía el humeante café.

-Es lógico con todo lo que bebiste ayer, recuerdas algo de anoche?- su pregunta me descoloco, sabia que me había mandado una gran cagada.

-Si, pero fue una confusión, se que sonara estupido, pero realmente creí que era ella. Maggie en la oscuridad y con el alcohol que llevaba encima creí que era Tanya a quien besaba. Ella se me acerco, tapo mis ojos y me beso, creí que era ella, fui un idiota lo se.- ella me miro, en sus ojos pude ver que me comprendía.

-Se que serias incapaz de lastimarla, pero recuerda que tu te enfureciste cuando viste que Michael la estaba besando. Ella estará furiosa, solo entiéndela y déjala procesar todo esto.-asentí y me levante para ir por ella.

-Tienes idea donde esta durmiendo? Yo dormí en su cama pero ella no apareció.- me miro extrañada.

-No lo se, quizás este en otra celda o en el otro bloque.- asentí y me dirigí al bloque D, a ver si la encontraba allí.

Busque por todo el maldito bloque, no había señal de Tanya, iría a buscarla afuera, quizás durmió en alguno de los vehículos.

-Buscas a tu chica?- me gire y estaba el estupido de Michael apoyado contra la pared. Me acerque, deseaba golpearlo.

-Que demonios te importa, es mi problema.- me gire para irme, pero el idiota tenia ganas de molestar.

-Y si te dijera que se en donde esta la dulce Tanya?- volví hacia él y lo acorrale a la pared dispuesto a romper su maldita cara.

-Deja de molestar, mas vale que te mantengas alejado de ella porque no me importara romperte todos los huesos, mantén tus sucias manos lejos de Tanya, me oíste?- apretaba el cuello de su camisa con fuerza, esperaba que me dijera cualquier idiotez para golpearlo.

-Cálmate amigo, no es de mi de quien deberías preocuparte.- fruncí el ceño, que demonios estaba diciendo?- Ya revisaste la celda de Rick? He visto a Tanya pasar demasiado tiempo con él, no crees que es raro.- no lo pensé mas, le propine un puñetazo en la cara, quería seguir golpeándolo pero si seguía no me detendría.

Salí a zancadas hacia la celda de Rick, debía saber si lo que decía el imbecil de Michael era cierto. Glenn estaba en las escaleras sentado, cuando me vio un tanto alterado se acerco por detrás hasta llegar a la celda, abrí la cortina y la vi. Estaba en la cama de arriba, durmiendo con un brazo colgando hacia abajo, y en la otra cama dormía Rick.

Sin decir nada camine al patio, sentía una furia recorrerme el cuerpo, quería patear el trasero de Rick. Pude escuchar a Glenn seguirme a grandes pasos.

-Daryl que te sucede? No me digas que estas furioso por eso!- me gire a mirarlo, él no tenia nada que ver en todo esto, pero no quería que nadie viniera a sermonearme.

-Ella esta durmiendo en la celda de Rick, tenía otras celdas vacías para dormir y eligió dormir en la celda con el maldito policía.- comencé a caminar de un lado a otro.

-Quizás decidió dormir allí porque sabia que no la buscarías ahí, después de lo de anoche lo mas probable es que quiera evitarte Daryl.- lo mire, en parte tenia razón, pero me enfurecía el saber que estaba durmiendo cerca de otro hombre que no fuera yo.

-Necesito pensar.- tome mi ballesta y me dirigí hacia el otro lado de la prisión.

Pase toda la mañana y parte de la tarde sentado en una de las murallas que daba a un pequeño patio de la prisión, no era un lugar muy concurrido, así que me ayudaría a aclarar mis ideas y a calmar mis ánimos.

Fumaba un cigarrillo cuando veo a Ty corriendo para cruzar el patio.

-Ehy Ty que sucede?- le pregunte mientras bajaba de la muralla.

-Oh Daryl, al fin te encuentro. Debes venir, Tanya estuvo buscándote por todos lados…- lo interrumpí, no deseaba hablar con ella, aun estaba enojado.

-Deja que siga buscando y no le digas donde estoy.- me gire para volver a mi lugar cuando me tomo del brazo, impidiéndome seguir.

-Tú no entiendes, te busco por toda la prisión y Michael le dijo que te habías ido al bosque, ella salio por ti hace horas y aun no regresa.- un frío corrió por mi espalda, temía de que algo le hubiera ocurrido.

-Iré por ella. Y Ty agarra a Michael y enciérralo, en cuanto regrese arreglaré cuentas con él.-asintió y yo corrí hacia la salida.

En la puerta Michonne estaba haciendo la guardia, en cuanto me vio correr hacia allí no pregunto nada, solo abrió las puertas dándome paso al exterior.

Pude saber por donde había entrado al bosque por el rastro de algunos caminantes muertos, todos tenían en el cráneo un agujero y eran de flechas, por lo que ella los había matado y luego retirado la flecha.

Su rastro era visible, podía ver sus huellas por el lodo. Pero aquellas huellas eran de aproximadamente cuatro horas, podía estar muy lejos, pero no iba a dejarla sola, iba a encontrarla.

Camine por unas horas, llegue al lago donde varias veces paraba para descansar cuando cazaba. Me incline sobre un arbusto al ver un ciervo tomando agua en la orilla, prepare mi ballesta, apunte esperando el momento preciso para disparar. Cuando estaba por hacerlo una flecha atravesó su cabeza.

Me quede en mi posición, no estaba seguro si esa flecha pertenecía a Tanya y no quería cruzarme con alguien desconocido y tener problemas.

Escuche el crujir de unas hojas, alguien se aproximaba para llevarse al ciervo, seguí apuntando con la ballesta.

Mi corazón volvió a latir cuando vi que quien se acercaba era Tanya…mi Tanya. Un gran alivio me corrió por el cuerpo al ver que estaba bien, que nada malo le había ocurrido.

Iba a acercarme para ayudarla con aquel ciervo, pero la escuche hablar, parecía que estaba pidiéndole perdón al ciervo por haberlo matado. Me quede mirándola un rato, pero mi atención se vio interrumpida cuando veo que desde las rocas que bordeaban el lago aparece un animal, era un perro salvaje, su pelaje era negro y con una mancha blanca en su pecho. Apunte con mi ballesta, si el animal intentaba algo le dispararía, pero todo lo que sucedió luego me sorprendió. Nunca había visto algo como eso…