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Louis estaba más que furioso.

Es más esa descripción quedaba corta para lo que sentía en ese momento. Mientras atravesaba el abarrotado club y las luces de neón acariciaban a los cuerpos que bailaban al ritmo de la música estridente, lo único en que podía pensar era en atrapar a ese omega revoltoso que se había quitado la camisa y bailaba provocativo en medio de dos alfas que lo sujetaban de la cintura, mientras el sudor resbalaba por su pecho desnudo y su cabello castaño se pegaba a su rostro. La expresión seductora del omega volvía locos a los alfas.

Y su aroma a océano, era una deliciosa tentación para cualquiera.

En cuanto llegó a su lado lo arrebató de las manos de los alfas y cubrió la piel expuesta del cachorro con su chaqueta.

-¿Ah... pero que rayos...?-Harry se giró y al reconocerlo, sonrió con coquetería.-¡Lou! ¿Qué estás haciendo aquí?

-Lo mismo te pregunto yo a ti.-Lo regaño el alfa.-¿Sabes lo preocupado que está Shawn?

-¡No es para tanto!

-Vamos, es hora de irnos.

Harry lo empujó.

-¡No quiero!-Por sus pasos tambaleantes y su mirada perdida el alfa pudo notar que estaba borracho.-¡Quiero seguir bailando! ¡Vamos, chicos!

Los alfas que lo acompañaban extendieron sus brazos, ansiosos de tomar al pequeño omega, pero el gruñido amenazante de Louis los detuvo.

- No se atrevan a tocarlo.

Uno de los alfas levantó sus manos en señal de paz y le hizo gestos a su compañero para que se fueran.

-¡No queremos pelea, amigo! Ya nos vamos, el omega es tuyo.

Harry le dio golpes en el pecho cuando sus dos parejas de baile se fueron.

-¡Eres un idiota! ¡Los espantaste! -El omega hizo un puchero.-¡Y hoy me tocaba trío!

-¿Tienes alguna idea de lo irresponsable que eres, Harry? ¡Esos tipos solo están en busca de omegas ingenuos como tú de los cuales aprovecharse!

-¡Y a ti que más te da! ¿¡Y qué si yo quería que se aprovecharan de mi!? -El alcohol había hecho estragos en la mente del pequeño omega.-¡No serían los primeros!

Louis se quedó mudo. Harry era el mediano de los hermanos Malik y el más rebelde, no tenía más de diecisiete años y aunque tras presentarse como omega su belleza había incrementado, seguía siendo un cachorro, al menos para el alfa. Por eso escucharlo hablar de aquella manera tan descarada seguía provocando que sus tímpanos sangraran. Harry era un bebé.

¿Cuando empezó a ser este hermoso demonio pecador?

-Harry, te llevaré a casa.

-¡Déjame solo!-Le grito Harry -¡Todos quieren controlar mi vida! ¡Papá y Shawn no me dejan respirar! ¡Solo aquí me siento libre y no quiero que lo arruines!

-Tu no entiendes el peligro que al que te expones al salir sin escoltas. ¿Tienes idea de lo preocupado que estará Shawn si te pasa algo? ¿Y qué pasa si te secuestran?

-¡Pues espero que sean alfas guapos y sea como una de esas películas porno que vi anoche!

-¡Ni siquiera sabes las tonterías que dices! ¿Cuántas veces te has escapado así?

Por un momento Harry lucía culpable.

-Ya perdí la cuenta.

-Anda, nos vamos. Y es mi última palabra.

Hermoso, Coqueto y Vanidoso (Larry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora