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Para celebrar el éxito de la exposición Zayn quiso preparar una cena especial. Al escuchar que tenía las intenciones de cocinar, todos sintieron miedo.

—¡Se supone que debes premiarme por mis logros, no envenenarme, Zayn! —Harry había chillado, espantado. —Una vez cerca de la muerte, me basta. Gracias. ¡Auch! ¡Shawnie! ¡No soy un cachorro para que jales la orejita así!

Su hermano no estaba para nada divertido con lo que había dicho.

—Nunca más vuelvas a bromear con lo que te pasó. ¿Entendido? —Estaba a un paso de usar la voz de alfa por lo molesto que se sentía.—Tal vez tú puedas bromear ahora pero yo nunca olvidaré lo que se sintió estar a punto de perderte.

Harry se trago las lágrimas y forzó una sonrisa.

—No lo volveré a hacer. —Le dio un beso en la mejilla a su hermano y le hizo ojitos.

Harry no quería que su familia guardara silencio respecto a su intento de suicidio, ignorar las cosas y fingir que no pasaban era lo peor que podían hacer. Con Zayn, por ejemplo. Luego de que perdiera a su cachorro, nunca más se tocó el tema. Harry sabía que su hermanito guardaba mucho dolor aún pero no decía nada porque todos en la familia parecían caminar sobre una delgada capa de hielo, y nadie, quería ser el responsable de que esta se rompiera. La filosofía de Harry era simple, el ya no era el mismo omega que sentía que se derrumbaba, ahora estaba lo suficientemente bien como para tomar con un poco de humor su pasado. Pero comprendió que para su familia el dolor aún era una herida abierta. En especial para Shawn, que vio a su madre morir de esa manera.—Fue inapropiado, perdona, Shawn.

Niall sonrió al ver a los dos hermanos y sintió alivio al percatarse de que Harry, efectivamente, estaba mucho mejor.

—Harry tiene razón en algo. —El ambiente se apago un poco y quiso reanimarlo. —Esto es una celebración. ¿Por qué quieres envenenarnos a todos, Zayn? ¿Acaso no fue suficiente con Liam?

Zayn rodó los ojos mientras se ponía un delantal.

—No fue para tanto. —El omega moreno batalló para hacer el nudo del delantal. —Solo le dieron un antiácido. ¿Verdad, Li?

Niall soltó una carcajada.

—¿Y desde cuando los antiácidos se administran vía intravenosa? ¡Lo tuvieron en observación durante ocho horas!

Shawn frunció el ceño hacia su hermanito más pequeño.

—Santo Dios, ¿Que fue lo que cocinaste?

—No fue directamente algo que yo haya cocinado, ¿ok? —Se defendió Zayn. —Prepare una solución de limón para limpiar el horno, como mamá Payne me enseñó, pero Liam lo confundió con limonada.

—He probado las limonada de Zayn. —Niall tuvo escalofríos.—Entiendo porque Liam se confundió.

—Es suficiente. —Liam les llamó la atención, molesto porque le estuvieran tomando el pelo a su omega. Abrazo a Zayn por la cintura y le dio un beso en la frente. —Ha mejorado desde entonces, estoy seguro de la cena de hoy será prueba de ello.

Harry soltó una risa burlona.

—No eres muy confiable que digamos. Te dejaste intoxicar porque no querías decirle que su comida era un peligro. ¿Cómo se supone que estemos tranquilos?

Zayn se cruzó de brazos y les dio una mirada aburrida.

—Liam me va a ayudar.

El alivio fue colectivo.

No era un secreto para nadie que la Señora Payne era una excelente cocinera, como Zayn y Liam viajaban mucho a la cabaña, en el pueblo, a menudo volvían con platillos caseros y kimchi que todos llegaron a probar. Afortunadamente, la omega Payne le enseñó a sus hijos a cocinar y Liam era muy bueno en ello. Incluso Josh, había aprendido una u otra cosa gracias a sus hermanos.

Hermoso, Coqueto y Vanidoso (Larry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora