¿Amor u Obsesión?

6

Chris apretaba fuerte mi brazo mientras me llevaba casi arrastras a su departamento.

-Chris, me estás lastimando- dije tratando de zafarme.

-Cierra la boca y camina- dijo casi en un grito.

Abrí mi boca en forma de "o" sorprendida de cómo me hablaba. Tan pronto llegamos a su departamento me arrojó sobre un sillón sentada.

-En tu vida vuelvas a retarme frente a las personas- dijo mientras me apuntaba con un dedo. -Odio que me hagan ese tipo de berrinches- dijo sumamente molesto.

-Perdon pero te estás comportando como un completo idiota- dije también molesta.

Volteo a verme molesto para después tomarme fuertemente de la cara con una sola mano.

-Yo no te he insultado así que no tienes porque insultarme tu a mi- sus ojos destellaban rabia.

-Sueltame- dije furiosa.

Soltó mi rostro y dio vueltas frente a mi como un León enjaulado.

-No entiendo porque te molesta tanto, solo es un escote, no voy a andar desnuda por ahí- dije ya más calmada.

-No quiero que te miren, Adele. Me dan celos, ¿no puedes entender eso?- dijo estresado.

-Solo bastaba con decirme eso, no era necesario que te pusieras como loco- dije tranquila. No se si estaba molesta o halagada por sus celos.

-Perdoname. Es que... no me gusta que me hables así- dijo sentándose a mi lado.

-Lo siento, me molesto tu actitud- dije sincera -Habla con el diseñador y dile que disminuya un poco el escote- dije resignada.

-¿De verdad?- dijo ¿emocionado?

-Si- tome su mano -No quiero que te sientas incómodo en un día tan especial para ti- sonreí levemente.

-Gracias hermosa- beso mis labios levemente.

-Bien, ahora llévame a mi casa que Angelo debe estar volviéndose loco con Laura ahí- dije levantándome.

-Esa amiga tuya está un poco loca- dijo riendo.

-Si pero así la amo y creo que tu ya no eres de su agrado- dije mientras me dirigía a la puerta.

-A casi nadie le agradó, solo me importa agradarte a ti y Angelo- dijo abrazándome por detrás.

-Es bueno que tomes en cuenta a mi hijo-dije sonriendo.

-Bueno, el es a quien le tendré que pedir tu mano- dijo relajado.

-¿Qué?- voltee a verlo sorprendida.

-No estoy diciendo que ahora. En un futuro... cercano- dijo como si nada.

-Te recuerdo que tenemos muy poco de conocernos- dije riendo.

-¿Y?, yo ya quisiera estar casado contigo- dijo viéndome a los ojos.

-Todo a su tiempo- dije un tanto nerviosa.

-Bien, vallamos a dejarte- dijo abriendo la puerta.

Durante el trayecto a casa no hacía más que pensar en las palabras de Chris. Quizá el ya quería sentar cabeza y se sentía seguro conmigo pero yo aún no estaba lista para eso, acabo de divorciarme y en lo que menos he pensado es en matrimonio. Además no se si aguante su carácter tanto como para casarme con él.

Al llegar a casa me despedí de él y corrí a mi habitación, me detuve a mitad de escalera al escuchar unas risas escandalosas provenientes de mi sala. Camine hasta allá y vi a mis dos amigas platicando de los más alegres.