-¡¿Que si escuchaste?!- dijo jalando mi cabello hacia atrás para que lo viera.
El estaba tan cerca de mi rostro que no se como tomé fuerza y le di una bofetada. Sin embargo el no me soltó y recibí un fuerte puñetazo en mi mejilla que me hizo caer sobre la cama.
-Dale gracias a Dios de que estás embarazada porque sino te pondría la golpiza de tu vida por lo que acabas de hacer- dijo parado frente a mi, apuntandome con su dedo.
Sobe mi mejilla y comencé a llorar de impotencia. Me puse de pie lo más alejada de él que pude.
-¡Largate ahora mismo de mi casa!- grite furiosa -En tu vida me vuelves a tocar si quiera un pelo Christopher-
El sonrio y rio de mi, se burlaba de mi en mi cara.
-¡Quita esa asquerosa sonrisa y lárgate!- grite.
-Debiste haber dejado que tu abogado terminara de leer nuestro acuerdo antes haber firmado- dijo sonriendo.
-¿De qué hablas?- dije confundida pero aún a la defensiva.
-Yo me iré de esta casa el día que yo quiera y tu serás mi mujer hasta que yo quiera- dijo acercándose lentamente a mi.
-No pienso seguir contigo Chris. Jamás pensé que fueras capaz de hacerme algo así- dije llorando. -Quiero que te vallas- dije apuntando hacia la puerta.
El bajo la cabeza y volvió a levantarla mientras lloraba.
-¿Ves por que pedí que hicieran esa cláusula? Quieres divorciarte de mi cuando apenas y llevamos un día de casados- parecía molesto y lloraba a mares.
-Acabas de golpearme Chris. ¿Que esperabas? ¿Que lo dejara pasar así como si nada?- dije molesta.
-Se que me pase. Pero es que entiendeme- dijo sentándose en la cama -Me pone como loco el pensar que me engañas con ese imbecil- dijo furioso.
-Ya te dije que entre el y yo no hay nada, Chris- dije llorando.
-Pero yo sé que el quiere volver contigo,deberías ver como te mira- dijo mientras apretaba su cabello.
-Estas loco...- susurre. -Lo mejor será que te vallas de mi casa- dije caminando hacia la puerta.
El corrio tras de mi y se arrodilló frente a mi abrazando mis piernas.
-No, Adele. Por favor. Perdoname- dijo llorando -Te juro que esto jamás volverá a pasar pero no me dejes, hazlo por nuestra hija- dijo viéndome a los ojos.
No sabía que hacer, estaba furiosa y solo quería que se fuera pero el verlo así me rompía el corazón.
-Si esto vuelve a pasar Chris, no solo te echaré de mi casa, llamaré a la policía ¿entendiste?- dije devolviendole su gesto de apuntarme con el dedo.
-Si, gracias- me abrazo fuerte y me dio un beso en los labios que no correspondí.
-Aun estoy molesta contigo- dije separándome de él y caminando a la cama. -Quiero que te vallas a dormir a otra habitación, por ahora no quiero verte- dije recostandome.
-Bien- dijo agachado la cabeza. Se acercó a mi y beso mi frente -Que descansen- acaricio mi vientre y salió de la habitación sin más.
Y entonces explote. Comence a llorar. No se si hago lo correcto. No quiero verme como una de esas mujeres que perdonan a sus maridos pensando que van a cambiar de la noche a la mañana. Amo a Chris, por ahora confiare en él, solo por nuestra hija, pero si esto vuelve a pasar definitivamente lo dejaré, no estoy dispuesta a ser una sumisa que pase todo por alto. De tanto pensar me quede dormida.