La tristeza se convirtió en coraje y rápidamente meti mi celular a mi bolso.
-¿Pasa algo hija?- dijo mi mamá viéndome con extrañeza.
-Pasa que me han visto la cara de idiota otra vez- dije poniéndome de pie y quitándole a Laura a mi hija.
-¿Qué sucede Delly?- dijo ella poniéndose de pie.
-Ya se enterarán como lo hiso todo el mundo. Disculpen pero me tengo que ir- deje dinero suficiente para cubrir la cuenta y salí del lugar.
Conduci echa una furia a mi casa. Escuche a Laurie llorar en el asiento trasero y disminuí la velocidad. No podía llevarla a casa. Tenia que hablar con Chris y aabia que no seria nada fácil.
Antes de ir a mi casa llegue a casa de Jen. Como siempre el guardia me dejó pasar. Espere un momento en su recibidor hasta que ella apareció.
-¡Adele!- dijo casi corriendo -A cabo de ver la noticia. ¿Ya terminaste con el? ¿Como estás?- dijo ella rápidamente.
-Aun no hablo con el por eso estoy aquí. Quiero que cuides a Laurie para hablar con él. Es hora de su siesta y no quiero que despierte con nuestra pelea, porque se que pelearemos- dije furiosa.
-No te preocupes, yo la cuidaré- tomo a Laurie entre su brazos y me despedí de ella.
Cuando llegue a casa me percaté de que Chris aún no había llegado, lo cual era perfecto para mí. Entre a nuestra habitación y busqué una de sus enormes maletas. Comence a meter en ella todas las pertenencias de Chris sin ningún cuidado. Llene un par de maletas más y cuando termine las coloque todas junto a la puerta. Me senté en el borde de la cama para esperarlo y sin más, me solté a llorar. Había contenido el llamado todo el día y ya no podía más. Amaba a Chris y me sentía como una completa idiota por haber confiado en el. Me había estado viendo la cara todo este tiempo y yo ni siquiera lo sospechaba.
Escuche un auto estacionarse afuera de la casa y supuse que era el. Tan solo unos minutos después el entro a la habitación. Traia la ropa desarreglada y apestaba a alcohol y a perfume de mujer.
Pego un pequeño salto cuando me vio sentada en la cama.
-¿Que haces ahí?- dijo serio. Vio sus maletas y se sorprendió -¿Que hacen mis maletas aquí?- dijo sin dejar de verlas.
-Te estaban esperando para que te las llevarás- dije levantandome.
-¿Qué? ¿De qué hablas?- dijo viéndome confundido.
-Lo que escuchaste... quiero que te largues de mi casa ahora mismo- dije en un tano bastante alto.
-A ver, a a ver. En primer lugar, no me levantes la voz- dijo apuntandome. -¿Que te pasa? ¿Por qué quieres que me valla?- dijo serio.
-No bueno. Debiste haberla pasado muy bien anoche, tanto que ni si quiera te diste cuenta de que te estaban viendo- dije buscando en mi celular las fotos.
-No estoy entendiendo nada Adele. ¿De qué hablas?- dijo acercándose a mi.
Encontré la foto y rápidamente se la mostré.
-¡Hablo de esto!- dije al borde de las lágrimas. -¿Desde cuando Chris? ¿Desde cuándo me has estado viendo la cara de idiota? ¿Quien es esa mujer?- dije llena de coraje.
-¿De donde sacaste eso?- dijo tomando mi celular.
-Esta en todo internet, Chris. Todo el mundo lo ha visto. Soy el hazme reír de todos- dije furiosa.
-Adele, esto no es nada, no significa nada mi amor- dijo tomando mis manos.
-Sueltame, no quiero que me vuelvas a tocar- dije safandome de su agarre.