3. Después del concierto

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Yo tenía muy claros mis sentimientos y nunca le ocultaba nada a Ana así que la mire y le dije.

-          Creo que me he enamorado – dije mientras me tapaba la cara con miedo a su reacción.

-          ¿Qué? ¿De quién? De Taylor, normal – decía ella inocente.

-          No, de Valentina. – me destapaba la cara poco a poco bajando las manos para poder mirar su reacción.

-          ¿Qué? – me giraba para que la mirara. - ¿Enserio Juliana?

-          Si amiga. Me tiembla todo, me encanta. – decía muy seria.

-          Pero... - me agarro de la mano y empezó a correr llevándome a mi detrás. Apartaba a la gente y les daba empujones, forzándonos a pasar por sitios imposibles.

-          ¿Qué haces Ana? – la seguía sin entender nada.

-          ¿Cómo qué hago? Buscar a Valentina – decía como si tal cosa

-          Ni de coña le voy a decir que me gusta – chille asustada.

-          No idiota, le vamos a pedir su teléfono. Como si no vas a seguir en contacto. – se reía. Ana siempre ha sido mas echada para adelante para estas cosas y siempre iba a por todas. Y aunque me aterrorizaba el hecho de tener que afrontar ese sentimiento, no podía negar que me moría de ganas de tener ese teléfono.

-          No sabemos dónde está – estaba asustada y me intentaba escapar de la situación.

-          La buscamos. – seguía corriendo y mirando hacia todos lados. Pero había tanta gente que era muy difícil ver nada ni nadie. Estuvimos corriendo o más bien empujando y peleándonos con la gente un rato hasta que llegamos afuera pero no la vimos.  Dimos una vuelta a todo el recinto a ve si veíamos algo, ni que fueran dos chicas subiéndose a un coche o algo que nos diera una minima pista de que eran ellas, pero nada.

-          Déjalo Ana, se ha ido – dije resignada.

-          Pero... ¿Por qué no le has pedido el teléfono? – mientras me daba un pequeño empujón.

-          No sabía cómo hacerlo- decía mirando al suelo.

-          ¿Cómo qué no? Oye Valentina me das tu teléfono y así podemos intercambiar fotos y videos- decía como si tal cosa.

-          No lo he pensado Ana.

-          ¿Y ahora qué? - decía ella mas apenada que yo.

-          Ahora nos vamos a casa.

-          ¿Así sin más? Jolin Juliana, por fin te gusta alguien y la dejas escapar. – me conocía bien y sabía que para mí era importante ya que nunca había soltado esas palabras de mi boca. Ana era mas enamoradiza que yo y ya había tenida alguna relación. Es cierto que yo aun era muy joven, solo tenía 16 años pero nadie, nunca antes, me había llamado la atención.

-          Las cosas pasan por algo Ana, créeme lo solucionaré. – convencida de ello.

-          Pero a ver que yo me aclare, ¿estas segura de que esa chica te gusta?

-          Si que te tiemblen las piernas, te suden las manos, te palpite el corazón y la vida te pase lenta es un signo de estar enamorada. Sí, estoy segura.

Cuando te vuelva a verDonde viven las historias. Descúbrelo ahora