35. ¿Como lo voy a disimular?

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- Ouuuu que bonito. - dice Flor.

- Si, fue la primera vez que me decía que me quería y yo no supe reaccionar. Solo sabía que no quería salir de ahí y me convenció de disfrutar del momento.

- Eso es bueno.

- Lo fue, ya te digo que si lo fue. - digo riendo y recordando el momento.

- Vamos que volvisteis a hacerlo - dice Jaz y yo me avergüenzo. Trato de evitar el tema.

Una hora después Ana se presentó directamente en el hotel y picaba a la puerta. Nosotras seguíamos metidas en la cama y enrolladas en las sabanas y ni siquiera habíamos tocado el desayuno que había pedido al servicio de habitaciones. Yo me levanté y me puse unas braguitas y una camiseta sin sujetador ni nada. Valentina salió disparada al baño. Fui a abrir la puerta.

- Buenos días - dice Ana entrando como un torbellino en la habitación - ¿Se os han pegado las sabanas? Aun tenéis el servicio de habitaciones en la puerta. - entonces mira con atención la habitación en busca de Valentina y lo entiende todo - Vaya, creo que lo único que no se han pegado han sido las sabanas - dice riendo.

- Shhh - digo señalando al baño para que no levantara tanto la voz y supiera que Valentina estaba dentro.

- Esa mirada es nueva amiga... tienes los ojos más grandes e iluminados. Madre mía Juliana, pero ¡mírate! - dice acercándose y cogiendo mis hombros - si no puedes dejar de sonreír. - decía riendo ilusionada por mí.

- Lo sé - digo muerta de vergüenza - no sé cómo lo voy a disimular...

- Disimular ¿el que? - dice sin entender - ¿Que eres feliz? - yo asiento - ¿Y a la gente que le tiene que importar? Tu eres feliz y punto, el motivo puede ser solo tuyo.

- Si, pero...

- Pero nada Juls. Entonces ¿fue bien? - pregunta intrigada.

- Fue muy bien Ana.

- Todos los miedos, inseguridades, dudas...

- En vano. Fue cómodo y fluyó todo muy fácil y rápido. Me trató muy bien.

- Ves tonta... y tu preocupada.

- Lo sé - y justo en ese momento la puerta del baño se abre.

- Anaa - dice Val al salir - ¿Ya estas por aquí?

- Venía a ver si habíais desayunada, pero he comprobado que se os han pegado las sabanas - dice haciendo ver que no se había enterado de nada.

- Sí bueno - dice Valentina justo antes de ponerse roja - quizá un poco. -y las tres reímos. Ana por tratar de seguir la broma de Valentina, aunque en realidad se ríe por todo lo que sabe, Valentina por incomodidad y yo por lo raro de la situación.

- ¿Os vais después de desayunar o de comer?

- Pues - miro a Valentina para confirmar si ella tiene alguna preferencia y me dice que no con la cabeza - la verdad nos da igual, aun no tenemos billetes. Supongo que aprovecharemos el día aquí ¿No?

- A mí me parece bien.

- ¡Genial! - dice Ana ilusionada.

Pasamos la mañana desayunando en la cafetería de cuando éramos pequeñas y dimos un paseo por el parque.

- ¿Qué idea tenéis para el verano? - pregunta Ana, yo me la quedo mirando sin saber que contestar y levanto los hombros.

- Na...

Cuando te vuelva a verDonde viven las historias. Descúbrelo ahora