Cuarenta y Cinco

204 41 27
                                    


La cena fue agradable,hablaron un poco de cosas irrelevantes. Mary estaba de buen humor por algún motivo que se reservo y Bills no indagó. Se fue a dormir apenas terminó y el dios no quiso retenerla en esa oportunidad. Le bastó con compartir esa comida con ella.

La chica se durmió rápidamente,
pero tuvo un sueño espantoso. No era la primera vez que su mente le traía las visiones de aquel momento en que Vento le dió la golpiza. Veia  ese tubo de metal subir y bajar sobre ella, que estaba inmune al dolor. Veia los  zapatos de ese sujeto sucios con su sangre y sentía en su interior aquella energía peliar por aferrarse a la vida que le estaban quitando. Se despertó como solía hacerlo después de esa pesadilla, bañada en sudor,jadeante y con los ojos llenos de lágrimas,apretando su vientre con sus manos. Se mordía la rabia y la pena cada vez que eso pasaba.Le costaba volver a conciliar el sueño después de eso y solía ir al baño a lavarse la cara o a la cocina para prepararse algo ligero,
quedándose allí un rato.

Esa rutina era conocida por Bills.La oía ir venir por la casa como una sombra penitente. Él no era el tipo de persona que saldría a darle algo de calma, primero porque no sabía cómo. La dejo llorar en su hombro aquella vez y eso era todo lo que podia llegar a hacer y segundo porque si ella no buscaba hablar con alguien de lo que la atormentaba,era porque quería lidiar con aquello ella sola. Pero esa noche un sonido violento, desde la cocina,lo hizo ir a ver qué había pasado. Resultó que sólo se le había caído al piso un tiesto de loza y los fragmentos estaban regados por todo el lugar.

-¿Estás bien?-le preguntó Bills al verla allí tan pálida y quieta.

La llamó varias veces antes de que ella lo mirara.

-Estoy bien-le dijo al fin-Lamento si te desperté.

-Da igual.No tenía sueño-dijo y se fue al sofá para encender la televisión.

-¿Tú no tienes sueño?-le cuestionó la muchacha.

-¿Por qué lo dices en ese tono?

-Bueno es que...

-Mejor no digas nada-le dijo Bills adivinando que estaba pensando la muchacha.

Mary limpió el desastre que había dejado y la verdad todo el sueño se le había espantado. Así que tomó una manzana y se fue al sillón para ver la televisión con Bills. Era un documental que hablaba de fauna silvestre.

-¿Te gustan este tipo de programas?-le preguntó la muchacha.

-No hay nada mejor que ver.Las películas románticas son aburridas,los noticieros desagradables,las caricaturas estúpidas,los partidos de futbol no los entiendo,la música es bulliciosa y...¿Qué haces?-le preguntó cuando la vio estirar el brazo por encima de su regazo.

-Quiero el control.

-Sólo pídelo-le gritó y se lo pasó.

Después de cambiar unas veinte veces de canal, Mary,se detuvo en uno que Bills miró con curiosidad.

-¿Esto de que se trata?-le preguntó.

-Es una película de terror. Con fantasmas,monstruos y asesinatos-le dijo ella.

-Suena aburrido.

-Yo quiero verla.

Bills no replicó y sin mucho ánimo se quedó viendo el programa que,al principio, mostraba un grupo de jóvenes en una cabaña. Luego uno de ellos desapareció y lo encontraron muerto en la ribera de un río cercano,después de eso los jóvenes iban desapareciendo uno a uno. Una trama de lo más trillada,pero que a los ojos de Bills fue cautivante y comenzó a hablarles advirtiéndoles del peligro como si lo escucharan. Aquello resultó divertido para Mary,quien pronto terminó dormida y su cuerpo se fue hacia un lado quedando en una buena posición para descansar,pero recargada contra él. 

En la TierraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora