Parte 7, "Regalos, preguntas y sentimientos"

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De todos los curiosos que estuvieron de espectadores viendo mis primeras batallas pokemon con Zorua y de lo que hice para protegerla cuando ella ya había perdido el encuentro, el golpear a esa Mega-Mawile en la cara con un puñetazo extremadamente fuerte que la dejé inconsciente por un momento, pero no sin un pequeño sacrifico de fracturarme 2 dedos en el suceso.

Eran Cintia la campeona mundial pokemon y el señor Dracks elite 8 de la Torre de Batalla. No les miento que me sentí bastante diminuto cuando los tuve en frente de mí. Cintia una hermosa mujer de largo pelo rubio de unos 35 años o un poco menos, bastante alta también con unos ojos azules un poco opacos y el señor dracks, un caballero de pelo encrespado, alto también con una especie de sombrero negro y túnica negra, aparentando unos 40 o 45 años ,daba algo de intriga y miedo su aspecto.

- Ven joven Pedro, te llevaremos al hospital para que te curen las heridas de tus manos y te traten las 2 fracturas, descuida lo pagaré todo yo y después quisiera conversar contigo. Dijo Cintia.

- Sí, vamos muchacho, después que te atiendan quisiera mostrarte algo y de igual forma darte algo.

Yo accedí, aunque mi pequeña Zorua los miraba con algo de miedo y estaba un poco nerviosa.

En ese momento Dracks sacó una de sus pokeball, la arrojó y de ella salió un grande e increíble Hydreigon.

- Bien Grandulon, te necesito pedir un pequeño favor, me reuniré contigo en un rato, necesito que lleves a este joven muchacho al hospital más cercano.

El Hydreigon asintió de manera respetuosa a su entrenador y se puso en posición para que me subiera a su lomo que era bastante amplio.

- Vengan súbanse, dijo amablemente Dracks. Él no les hará nada 😉.

Me subí en el lomo de ese Hydreigon y este despego, vaya que lo hizo rápido que me agarré como pude que hasta se me olvidó que tenía 2 dedos fracturados en la mano de derecha y que me dolió bastante. Estábamos volando en el lomo del Hydreigon, aunque pude distinguir que Zorua estaba hablando con él en el lenguaje pokemon.

- Es muy agradable Hydreigon Maestro, además de ser muy educado ^^ dijo mi Zorua.

Eso me calmo bastante y me puse a contemplar la ciudad desde bastante altura además de la bella Luna que yacía en el cielo.

- Mira linda que hermosa vista ^^. Le dije a mi pokemon.

- Sííí, Maestro es bellísimo 😊

Cuando se podía visualizar el hospital Hydreigon empezó a descender hasta que llegamos a la entrada, y vaya sorpresa... Estaban el señor Dracks y la Campeona Cintia esperándonos en la puerta. Vaya que me dio miedo y algo de risa.

- ¿Y cómo la pasaron contemplando la hermosa vista? Preguntó Dracks.

- Es la segunda cosa más bella que he visto 😉 le respondí.

- ¿Segunda? Respondió él con intriga arqueando una ceja.

- Sí, segunda, porque la primera es a esta Pelusa que tengo a mi lado 😉

En el momento que dije eso, juré haber visto a mi pokemon salirle humo de la cabeza u orejas, además de estar como un tomate.

- JAJAJAJA vaya que eres interesante joven Pedro. Pequeña Zorua al parecer alguien merece ser castigado en el sentido figurado, cuando seas una Zoroark 😉. Creo que te van a comer Pedro... Decía Dracks.

- Ehh? Le respondí con algo de duda.

- No, nada muchacho, lo entenderás cuando tu pokemon evolucione o tal vez ni eso, tal vez ocurra antes, jaja. Decía Dracks.

Zoroark: Mi Dama SiniestraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora