Capitulo 17

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Me quedé absorta en mis pensamientos TODAS las clases. En como Daniel me había defendido, en como apenas ayer lo corrí de mi habitación por una estupidez, en como me estaba empezando a... ¿Atraer? no, no, y más e infinitos nos. Él no me puede atraer por el simple hecho de que es Daniel Lascurain y de que yo soy Callie Bush. No me puede atraer, nunca me va a atraer, nunca... espero.

Para cuando acordé estaba en mi casa, acostada en mi cama, con los ojos cerrados, acurrucada en mi cama como un ovillo. Alguien tocó la puerta...

- ¿Puedo pasar?- era inevitable reconocer su acento y su voz, eran una melodía perfecta para mis oídos... ¿Qué fue lo que dije? Olvídenlo, no, quería decir... Era Daniel.

- Sí- me pase los dedos por mi cabello suelto y salté de mi cama para acomodarme en el sillón. Él entró.

- Hola...- dijo él.

- Hola Daniel...- de verdad que era el momento más incómodo en mi vida entera- Gracias... Gracias por de- defenderme, de Cameron.

- De nada, yo siempre ayudo a la gente necesitada- y entonces me enfade.

- ¿Yo? ¿Necesitada? Discúlpame... Pero yo no estaba necesitada... Nunca he estado necesitada, y jamás estaré necesitada de nadie.

- Pero claro que si lo estabas, sino te defiendo te hubiera golpeado.

- Tú no sabes si yo necesitaba de tu ayuda, me pude haber salvado SOLA- le grité.

- Sí claro, tu sola eh...- y entonces me levante del sillón, y quedé cara a cara con el... Estábamos demasiado cerca- De hecho, has estado necesitada tido este tiempo... de amor.

- Tú no sabes de mi vida, no lo sabrás nunca, porque tu no sabes- en estos momentos ya estaban brotando lágrimas de mis ojos- tú no sabes TODO lo que he sufrido los últimos meses...

- Sí lo sé, también deberías saber que no eres la única persona que sufre en el mundo, yo también he sufrido, y te aseguró que mucho mas que tú- me gritó- tu has sufrido por decepciones amorosas, pero no sabes que sentimiento mas horrible se siente, cuando vives el remordimiento de que gracias a ti tú hermana ha sufrido miles y millones de golpes... - sus ojos estaban cristalizados, en realidad estaba llorando- De que gracias a ti, tu familia no sea como las demás... Y... Que este destrozada... no sabes lo que en realidad es el sufrimiento Callie... No lo sabes...- me quedé anonadada, no sabía que decir ni que hacer, ni cómo actuar, no sabía nada, solo sabía que Daniel había sufrido mucho mas que yo, gracias a su familia, que por su culpa habían golpeado a su hermana y qué su familia estaba... Destrozada.

Bajamos a cenar todos. No podía despegar la mirada de Daniel, y él me estaba mirando, tenía los ojos hinchados... había estado llorando, cuando termino de cenar, dije que yo también había terminado, aunque no siquiera me había acabado la mitad de el plato, fui a mi recámara, pensé en Daniel, varias lagrimas amenazaron con salir, las retuve, salí de mi habitación y me dirigí a la de él... A la de Daniel, estaba actuando por impulsos, sabía que no iba a resultar bien. Llamé a la puerta, y me abrió un Daniel cabizbajo, le pedí entrar y el solo asintió, entré y me quedé ahí en medio de la habitación, buscando las palabras correctas entre millones y millones que querían salir de mi boca. Las correctas eran: Daniel, quiero que sepas que en mi puedes confiar y contar,e lo que te pasa, te apoyo. Claro, que las que salieron de mi boca, fueron otras completamente diferentes.

- Cuéntame tu historia- que estúpida era- es decir, me puedes contar si quieres desahogarte con alguien- el me miro de reojo, yo le di una leve sonrisa y suspiró, entonces dijo:

- Yo tenía tres años, solo tres años cuando nació Deph, mi hermosa hermana Deph.

« Ella nació con una discapacidad, no podía ver, mis padres la miraron con asco, cuando yo no entendía sus razones, si para mi la bebé era hermosa, con sus ojos verdes y azules, y con su diminuto cuerpo. Deph creció entre las sombras, mis papás la presentaban ante sus compañeros como su hija, pero una familia, una familia le dijo a mi padre: Esta niña no merece ser una Lascurain. Justo cuando Deph tenía cuatro años,ella lloró y lloró, y yo la consolé. Entonces cuando llegamos a la casa, mi padre la empezó a golpear, y ella lloraba del sufrimiento, y yo no sabía que hacer, entonces se me ocurrió atravesarme, y el golpe me llegó a mi. Dejé de defenderla, solo veía como mis padres cometían injusticias con una niña de cuatro años, pero mi padre me amenazó, diciéndome que si me volvía a atravesar me iba correr de la casa, y yo solo tenía siete años, y no podía permitir que me corrieran. Así que crecí como el hijo favorito, el hijo ideal, y así mis padres me enseñaron a comportarme, con estos aires de superioridad, mientras Deph se cohibía, y se quedaba sola en casa, había días malos, había días peores. Un día cuando cumplí dieciséis años y Deph tenía trece, la vi llena de marcas, y me dio tristeza, y me empecé a desahogar escribiendo, escribiendo acerca de mi dolor y mi tristeza. Cuando mi padre llego enfadado, porque alguien se había enterado de Deph, le pegó y yo le detuve y se enojo conmigo, pero como era su único hijo, y el que debería heredar las empresas, se retractó. Y ahora estamos en tregua, el no le pega a Deph y yo tengo que estudiar la carrera que el me elija para heredar todo lo que tiene él, acepté com tal de liberar mis culpas, con tal de que Deph tuviera una vida normal. Pero nuestra familia esta destrozada y así permanecerá por siempre»
***
Me deprimí, así que escribí un capítulo deprimente :(
Pero el siguiente no será tan triste... Bueno no sé, depende de mi estado de ánimo. Gracias por votar, comentar y leer :)
¡Hasta la próxima! ❤️

Prohibido enamorarme {Partes 1, 2 y 3}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora