Tercera parte. Capítulo 14.

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¡Hermosos lectores! He vuelto, he vuelto, he vuelto. Estoy feliz de poder anunciarles que hasta terminar esta novela (30 capítulos) actualizaré un capítulo por semana (o trataré) porque se que se desesperan y no debo ser incumplida u_u Esto se pondrá mejor y mejor así que sigan leyendo, ¿okay? Huu... Eso es todo. Los amo mucho y mil gracias por comentar cosas bonitas y votar, gracias a esos comentarios me dan ganas de seguir la novela y quien sabe, hacer que terminen felices todos👀 Love yaaa❤️
-Lily

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-Lo siento.-Dije girando sobre mis talones. Enseguida sentí sus brazos rodearme por detrás. Un escalofrío recorrió mi cuerpo entero. Después de todo, Daniel era el único que podía hacer que me sintiera así.

-No lo sientas. Me aferraré a ti, Callie. No importa si es en España, en México, o en Estados Unidos, te perseguiré y me seguiré aferrando a ti porque simplemente odio la idea de mi vida sin ti.

Las lágrimas cayeron y cubrieron ambas mejillas mientras me desataba del abrazo de Daniel.

-¿Cómo piensas hacer eso? ¿Dejando tu país? ¿Renunciar a tu empresa? ¿Apartando a Dylan? ¿Mudándote a otro continente?

-Sí, sí, sí y sí. Todo eso. De hecho,-Sacó su celular y lo miré fijamente, tecleó un número y lo puso en su oreja.-Sandra, dile a mi padre que me quedaré en Chicago un tiempo, si me quiere desheredar que lo haga, pero que no toque a Deph. Ah, ¿me puedes depositar dinero antes de decirle todo eso? Necesito rentar un apartamento y esas cosas.

-¿Qué demonios crees que haces? Te esforzaste todos estos años en complacer a tu padre para que Deph estuviese bien y ahora, ¿lo tiras todo a la basura?

-Soy capaz de eso y más por ti.-Dijo sonriéndome.-Así es como me aferro a ti, Callie. No me importa si tu psicótico novio me quiere matar, me aferraré a ti.

Y, por un momento lo miré fijamente y el a mí. Y todo fue perfecto. Y estábamos en preparatoria de nuevo y el me tomaba de la mano y me llevaba a citas. Y éramos felices. Y enviábamos cartas cursis y fotos empalagosas. Y éramos una pareja feliz. Y luego alguien me tomó de la mano y presionó sus labios junto a los míos.

¿Daniel?

No. Daniel estaba frente a nosotros con los ojos muy abiertos, era Dylan. No le devolví el beso. El se separó confundido y miró a Daniel.

-Ya no persigas a mi novia. No se que pueda ser capaz de hacer si lo sigues haciendo.

Me tomó de la mano y me llevó fuera del lugar. Giré mi cabeza y pude ver a Daniel con una expresión llena de enojo y frustración.

Y, apenas había comenzado.

•••

-Dylan,-Dije frente al espejo.-Ya no me trates mal, decidí seguir con la relación porque solías hacerme bien, pero ahora solo me lastimas, terminaré rompiendo contigo también. Ugh. No, no, no. Eso es muy directo, ¿qué tal algo cómo... "Dylan, estás muy distante, ¿porqué?" ¡No! Debe ser algo...

Alguien tocó la puerta y di un pequeño salto, mi madre estaba dormida y Cecillia había salido con unas amigas, ¿se le habría olvidado algo? Recogí mi cabello para atender. Era un pequeño sobré con una caligrafía imposible de no reconocer que decía "Callie". No pude evitar sonreír y tomarlo.

Lo abrí con delicadeza porque era tan pequeño y perfecto que tenía miedo de romperlo.

«No creas que lo que sucedió hoy me debilitó, de hecho me dio fuerzas. Te amé y te amo más, y conforme pasan los días mi amor crece y siempre te amaré, nunca lo olvides, nunca.»

Mis sentimientos estaban confundidos, se supone que no lo había escogido a él porque me lastimaba, pero Dylan me está lastimando en estos últimos días. Y ahora, Daniel es todo amor, rosas, miradas y cartas. Y Dylan es pura sombra, besos robados, agresiones y enojo. ¿Qué se supone que hago? ¿Qué es mejor? ¿Una persona que me salvó la vida pero ahora me está ahogando, o una persona que me ahogó pero ahora me está rescatando?

Prohibido enamorarme {Partes 1, 2 y 3}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora