Capítulo 18

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- Daniel, mi vida es una vida llena de alegrías en comparación a la tuya, y te pudo disculpas... por obligarte a contarme...

- No te preocupes- se limpió una lágrima, para después esbozar una leve sonrisa- me sirvió desahogarme oralmente, siempre lo hago por medio de la escritura...

- ¿Sabes qué? Yo había sospechado que tú escribías- el rió- ¿de que te ríes? De verdad, se nota en tu forma de hablar, Daniel, te juzgue mal. Pensé que te gustaba eso de ser superior y menospreciar a las personas que tienen menos que tú, cuando ahora me doy cuenta de que...- suspiré- no eres como pensé.

- Sí, nunca soy como la gente me ve.

- Bueno, gracias por confiar en mi, por contarme, y por... por ser mi amigo- ¿Lo era? No lo sabía, pero me gustaría serlo...creo.

- Sí te estas preguntando si somos amigos, si lo somos Callie- posó su mano encima de la mía y la sujetó con fuerza, y ,mis nervios se pusieron de punta y mi pulso se aceleró. Dios que me estaba sucediendo...

- Gracias Daniel, voy a... A hacer mi tarea... - me solté de su mano y le di una sonrisa.

Cuando salí, fui a mi recámara, y me quedé pensando en todo. En que odiaba rotundamente a los padres de Daniel por haberle arruinado la vida de él y la de Deph, en que rayos me estaba sucediendo con Daniel... En Thomas.

¿Dónde estaba en estos momentos? ¿Pensando en mi?

Porque lo tuve que perder, porque se tuvo que alejar de mi, te extraño Thomas, donde sea que te encuentres. Entonces tuve una idea... una carta.

Querido Thomas: no, no así no empieza una carta de disculpas... Ya sé...

Thomas:

Te extraño no sabes cuanto. Tu y tus cálidos abrazos, tu y tus chistes divertidos. Tú. ¿Porqué te alejaste de mi? No tiene sentido, ¿es porqué no te amo? Déjame decirte que si te amo. Eres mi mejor amigo, mi hermano, si amándote te vuelves a acercar a mi, me vuelves a abrazar y me vuelves a ver con esos ojos miel tuyos, te amo. No te vayas y me dejes aquí, estoy sola en este mundo, solo te tengo a ti, a ti y solamente a ti. No quiero que me dejes, Thomas, no. Regresa, regresa, Thomas. Eres la persona mas maravillosa y hipster que he conocido, y así te quiero. He llorado litros de lágrimas, he estado sola en los descansos con Deph, te extrañamos. No eres una piedra en mi camino, y si te consideras una piedra, eres una piedra que con gusto cargo conmigo y me la llevo al más allá. Siempre me has cuidado, defendido y protegido. Quiero que lo sigas haciendo. Tú eres la persona que más me importa en el mundo, tu me entiendes y me apoyas, te extraño como no sabes cuanto. No quiero perderte, aunque lo repita un millón de veces, no quiero. Ya sé que soy una estúpida, por no aceptar que tu me amas, pero es que no te merezco, eres el mejor Thomas. Extraño tus apodos, todo de ti, Thomas regresa a mi lado, regresa conmigo, hay que hablar de tu nuevo iPhone o de tus nuevos lentes o de lo que a ti te importe. Siempre te he aturdido con mis problemas y jamás he escuchado los tuyos, es hora de que lo haga. ¿Qué si me molesta tu beso con Jasmine? Sí, pero no porque tu la hayas besado, sino porque esa tipa no te merece, yo no te merezco. Thomas eres perfecto, deberías buscarte alguien igual a ti. Esa persona no soy yo. Perdón. Si aceptas mis disculpas reúnete conmigo en la plaza. Espero tu respuesta. Besos y abrazos, Callie.

Se la pensaba entregar mañana en clases, le había dicho a Daniel que iba a hacer tarea cuando en realidad no tengo. Así que decidí dormirme, a las 8:00, demasiado temprano para mi gusto. Pensando en Thomas, y en Daniel.

***

Se la dejé en el casillero, tenía miedo de que no la recibiera personalmente. Cuando iba de regreso me topé con Daniel, seguía cabizbajo, así que le susurré al oído:

- Pienso que eres demasiado fuerte, para seguir vivo después de tu situación- me volteó a ver y sonrió, yo le di una sonrisa de vuelta. Después a la salida me dirigí rápidamente a la plaza, esperando a Thomas, ¿llegaría? Eso espero.

Espere por una media hora, ¿la habrá leído? Y si en realidad ya no me quiere hablar, se me hizo un nudo en la garganta, ¿porqué tenía que ser tan sensible? Me senté en una banca, y esperé y esperé. Y no había llegado aún. Estaba llorando, me levanté y me di la media vuelta, no quería llorar ahí había muchas personas.

Entonces alguien me tomo del brazo, y ahí estaba Thomas, hermoso, maravilloso. Y entonces solté un mar de lágrimas y lo besé. Lo besé de nuevo, odiaba mis impulsos, los odiaba.

***

Es muy corto ,lo sé, pero tengo que hacer tarea y esas cosas u.u

Y prefiero actualizar porque entre semana lo más seguro es que no actualicé :(

Gracias por leer, votar y comentar :D

Besos y abrazos ❤️

Prohibido enamorarme {Partes 1, 2 y 3}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora