Todo olía a limpió como debía ser. Miró mi pequeña habitación en perfecto estado y no es que me gustará la perfección pero si podemos hacer algo bien a tal punto de llamarlo así ¿Porque no? después de todo no está mal. Tomo mi mochila llena de cuadernos, libros nuevos, sacapunta y un borrador que sabía perdería a mitad de año. Siempre era así y eso me llevaba a preguntarme ¿A dónde irán todos esos borradores extraviados? Nunca recuerdo haber acabado alguno. ¿Habia mencionado que era retraída? Ja, bueno esa es mi especialidad.
Después de regañarme echo un último vistazo al espejo para mirar mi reflejo, sonrió porque me agrada lo que veo, mis mejillas rosadas están ahí como siempre, «A dónde se supone que se tenían que ir Lili por Dios » ruedo mis ojos, mi pequeña yo siempre tan amable, en fin continuo, me gusta mi atuendo, simple, consiste en una suéter holgada color rosa, pantalón alto negro y mis Vans negras, llevo mi rubio cabello suelto con pequeñas ondas en el. En cuanto al maquillaje un poco de corrector para esas pequeñas bolsas color púrpuras que se forma debajo de mis ojos, máscara de pestañas y ya simple, yo lo soy. Escucho un grito de mamá y se que ya vamos tarde por mi culpa.
Bajo del auto después de darle un beso en la mejilla a la mujer que me dió la vida y también uno al regordete de Tommy mi hermano de veintidós meses de nacido, un año y diez meses para ser exactos. Al tomar mi camino al instituto veo las mismas caras de siempre a excepción de una que otras nuevas, camino por todo el estacionamiento mirando como muchos se saludas, otros sonríe por algún buen chiste y otras se están poniendo al tanto de los chismes del verano, yo solo camino con dirección a mi casillero necesito vaciar mi mochila o caeré al piso, no soporto el peso.
- ¡Reinhart detente ahí! - esa voz me hace sonreír - Eres una desgraciada mujer - y ese es el recibimiento de Bárbara Palvin, no podía esperar menos de ella, supongo.
- Camina rápido esta mochila pesa demasiado - digo mientras camino lo más rápido hasta adentrarme al lugar donde llevo estudiando cuatro años.
- Se me olvidaba que eras el cerebro del grupo y traes todo lo necesario desde el primer día, Reinhart es la primera semana, nada bueno nos darán - ruedo los ojos, puedo darme el lujo de decir que mi mejor amiga se va a graduar gracias a mi, el estudiar no es lo de ella.
- No, yo no soy el cerebro del grupo tú eres la holgazána - ambas reímos.
Bárbara es la chica de las pasarelas, la bonita, la qué tiene a medio instituto babeando, pero sus notas no son las mejores, supongo que no podía ser perfecta en todo, aunque estoy segura que si pusiera un poco de su parte no le fuera mal, pero es todo un caso, les cuento algo pero es un secreto « está loca» Ella es muy extrovertida, alegre y mi mejor amiga, la que me defendió en primero de bachillerato cuando todos me llamaban la nerds. Su capacidad de amar me dejó en un letargo en ese momento, siendo la niña bonita no tenía porque defenderme, tenía la posibilidad de andar con chicas igual que ella pero aún así me escogió a mí y decidió ser mi mejor amiga, aunque años después me confesó que yo fui su pasaporte para las buenas notas, eso nos hizo reír por horas, sabía que era mentira pero ella y sus ocurrencias me hacían feliz.
- Te olvidaste de mí en todas las vacaciones eres una mala amiga, si no te llamo tú no la haces - y no podían faltar sus sermones.
- Bárbara tu estabas de viaje en paris y yo estaba trabajando en el café, no quería interrumpir una de tus secciones - niega aún indignada.
- No me parece - se queja pero un apuesto Evans llega a su lado, si no fuera mi mejor amigo hombre juro que me casaría con él, es tan.. «interceptó suspiro aquí» guapo, bonito y ocupa nada más y nada menos que el segundo lugar en la lista de mejores promedios. El puesto número tres es el mío, lastimosamente Evans me lleva ventaja.
- Sabían que el ombligo huele casi que a escremento - Y eso lo hace ser mi mejor amigo, Evans y su particularidad. Bárbara lo ve con cara de asco y yo solo niego mientras sonrió. - ¡¿Que?! - le dice a mi amiga - huele el tuyo para que veas. Oh por Dios huele tan mal - cerré mis labios para evitar soltar una carcajada.
- Eso es porque no lo limpias, que asqueroso eres Evans, largo de aquí - se queja la castaña y yo solo puedo decir que los extrañé, en este veranos apenas y nos vimos.
- Que hicieron aparte de tu ir a paris y tú a las Vegas - solo diré que mis amigos son de una muy buena posición, pertenecen a la clase alta del este pequeño condado, siempre me he preguntado cómo pare a este grupo.
- Conocí a alguien - dijeron los dos al unisonido, se miraron y rieron después de eso, Yo rei también siempre tuve la ilusión de que ellos dos quedarán juntos pero después de.. mejor están así supongo.
- Se llama Zoe - dijo Evans.
- Se llama Peter - bárbara sonreía pero una pizca de desilusión iluminó sus ojos al ver a Evans tan emocionado. No lo había superado aún.
- Me alegro supongo - intente esbozar una sonrisa. Yo era un fiasco en cuanto a los sentimientos de trataba.
- Hay vienen los Sprouse - murmuró la castaña y yo solo fijé la vista en la entrada de largo pasillo.
Si ahí estaban ellos haciendo su gran entrada triunfal. Los gemelos Sprouse eran como dos gotas de agua a simple vista, bárbara y Evans se empeñaban en decir que eran idénticos pero yo difería, no solo por el hecho de que Cole había teñido su cabello de un color negro no pudiendo evitar que algunos mechones de su antiguo cabello castaño rubio salían aún a flote y eso lo hacía lucir más blanco, sin duda Dylan era unos centímetros más pequeño y no tenía tanto lunares en su rostro, en cuanto a sus pecas parecían haber sido esparcidas en la misma cantidad en ambos rostros. Tenían una sonrisa cautivadora, cuerpo atlético nada extravagante, eran sin duda hermosos y tenía a más de la mitad del instituto babeando.
Pero los Sprouse no eran solo esa cara bonita que podías ver a simple vista, ellos eran sinónimo de arrogancia, prepotencia, eran engreídos, egoístas, sin una pizca de humildad. Tenían su propio círculo social uno donde nadie parecía poder entrar, era estúpido y pretencioso el no relacionarse con nadie que no perteneciera a su círculo. Jum pero claro en la fiestas si compartía cama con una que otra chica para luego mirarla como si fueran la suela de su zapato. Repugnante. Y mucho más saber que se encontraban orgullosas de ello. «Mujeres hay que tener dignidad» por más hermosos que parecían ser por fuera por dentro estaban podridos. Una que otras veces los he observado en su entorno, sonreir, bromear como cualquier otro alumno, los vez haciendo muecas rodeados de esos amigos que son iguales o peores que ellos, chicos de equipos de fútbol con su gran ego y esas chicas que denotan por su voz chillona, cuerpo hermoso al igual que sus rostros cubierto de grandes capaz de maquillaje creo que un poco menos las haría lucir mejor.
- No puede ser - pronunció Evans sacándome de mis cavilaciones, arrugue el ceño sin entender - Es Cole míralo está con Amanda, se supone que hace una semana termino con Ellis su mejor amiga. - todo un desgraciado y ella no se queda atrás.
- Es todo un patán - dije decidiendo no darle importancia. No a él.
Holaaaaa🙋 un gustazo que estés aquí 🙆😂 bueno es mi segúnda historia te invito a que si te gusta comentes y le des like 😉 gracias por leerme 💋💋
En mi perfil está mi otra historias, me encanta escribir y creo que no lo hago tan mal 😂 así que si quieres date una vuelta por allá y sumérgete en lo que vive Raichel estando Al borde del abismo 😘
Aquí mis redes
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Enamorada Del Patán [TERMINADA]
RomanceUna vida tranquila, sí tranquila es la palabra perfecta para definir mi vida, mi mejor amiga Bárbara siempre ha dicho que Lili Reinhart es sinónimo de timidez, orden, sutileza y bueno debo de admitir que soy algo retraída. Por otro lado Evans piensa...