39. El reencuentro.

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Dormir en la habitación de Tommy no era lo más agradable pero mi mamá no permitió que me quedara en otro lugar, mi habitación había sido remodelada por colores blanco y juguetes por todos lados y ni hablar de la cuna, ahora era la habitación de Julia, la verdad no me había importado y le habia dado el visto bueno a mamá cuando me preguntó, Tommy estaba durmiendo con sus padres, deseaba conseguir un lugar donde me pudiera mudar lo más pronto posible.

— Tu hermana fue el mejor promedio siempre, se graduó en la universidad con honores, Tom mírame — el pequeño rubio mantenía su cabeza agachada,

— Soy un bruto mamá — mi madre negó.

— Claro que no, solo tienes que poner un poco de tu parte mi amor — sonreí por la dulce escena, mire a mi lado y la pequeña Julia estaba muy tranquila comiendo su cereal, ella era muy parecida a James, solo que su cabello castaño era igual al de mamá, tenía unos lindos ojos grises y de seguro sería una rompe corazones.

— ¿Está bueno el cereal? — le pregunto a la pequeña y está me sonrie mostrando sus pequeños dientes.

— Mucho, a mamá no le usta que comamo celial, peo cuando papá se quea con nosotros siemple nos da y pizza también — río porque habla como un lorito y por el hecho de que James siempre será así, no cambiará.

Mi teléfono vibra y es un mensaje de Bárbara, me está esperando abajo, así que me levanto y me despido de todos para ir con mi amiga cómo en los viejos tiempos. Subo a su bonito auto, está me saluda y se siente todo tan extraño, es imposible no sentirme como hace cinco años atrás. El teléfono de mi amiga suena y como siempre lo pone en alta voz porque va manejando y no es su costumbre mirar quien la llama.

— Barbara Palvin ¿Dónde estás? Se supone que quedamos en que me ayudarías con la campaña de la empresa — la voz de Cole solo hace que mi corazón se paralice por un instante para retomar su marcha de manera desbocada, mi corazón está ahí queriendose salir e unirse al dueño de esa voz, mi amiga me mira y quita el alta voz de inmediato y se lleva el teléfono al oído.

— Te mandé a decir con Dylan que no podía, estoy de vacaciones no lo olvides — ella guarda silencio — Si en la noche con gusto de ayudo cuñadito — puedo escuchar un poco su voz y mis manos sudan, las limpio con mi pantalón, no se supone que debería sentir esto, como puede provocar aún cosas en mi — deja de decir eso — ella ríe y me doy cuenta de la bonita amistad que ha crecido entre esos dos — Eres un asqueroso, no te ayudaré, déjala, ella tiene derecho a hacer con su vida lo quiera, si se equivoca nosotros estaremos para consolarla — mi amiga niega a pesar de que el no puede verla — Ana no es tu hija Cole — sonrió por lo celoso que es — dile a Dylan que deje de meter cosas en tu cabeza — mi amiga vuelve a reír — ¿En serio te lo pintaras de negro atra vez? — demasiada información sobre él para el poco tiempo que llevo aquí, pensé que sería más fácil pero no parece serlo — No se parecen, tu tienes más lunares en la cara Dylan solo tiene uno cerca del labio y.. no, no se parecen, debo colgar estoy ocupada — ríe — ¡calla ya! Que patán eres — mi amiga cuelga aún divertida y al verme su rostro cambia — lo siento.

— No es tu culpa — digo perdiendo la vista por la ventana, duele tanto, duele como en aquellos días.

— Él está solo Lili — mi corazón sufre una descarga y la ilusión esta hay abriéndose paso — Ha cambiado, ya no es un imbécil — sonríe — o bueno si un poco, no te ha olvidado, no ha estado con nadie — la miró y mis ojos se empañan — lo sé porque he estado ahí y me duele ver lo mucho que se quieren aún, se que lo tuyo con Kj no funcionó por él — Niego mordiendo mi labio.

— Te equivocas yo si puede estar con él, paso el día de la graduación — mi amiga abre su boca un poco sorprendida ante mis palabras.

— Mientes — bufo y estrujó mis ojos — tu no eres así, no lo harías sin sentir amor.

— Pues lo hice.

— y te sientes bien ¿Lo olvidaste? — el rostro de Barbara luce decepcionado — él te ha esperado por años.

— Él destruyo mi vida Barbara, destruyo lo que eramos, no puede culparme de nada, él decidió por los dos, no me dió otra opción, él me alejo.

— Te desconozco — la miró y ella pierde la vista en la carretera — Mi amiga no se hubiera acostado con nadie sin sentir amor. — guardo silencio sus palabras me duelen.

— Tienes razón, tal vez ya no soy tu amiga — Bárbara me mira y niega.

— Oye no, que está pasando contigo, no lo entiendo.

— No quiero saber de él y tú.. tú estás tan ligada a él que no me ayudas Barbie — ella empieza a derramar lágrimas, detiene el auto en una calle.

— De verdad quieres que me alejé — asiento — Guao, quisiera decirte que me alejaré de él por ti pero no puedo, es mi cuñado, es parte de mi familia ahora, pensé que.. te llevaré devuelta a tu casa, lo lamento tanto, tú eres mi hermana Reinhart — sorbo por la nariz, esto es un mal comienzo.

— No me acosté con Kj, con nadie, nunca pude — ella asiente y vuelve a poner en marcha el auto — perdóname sí, lo lamento pero el escucharlo después de tantos años me está matando, yo ya estaba bien.

— Nunca has estado bien Lili, nunca desde que él se fue de tu vida — guardo silencio — hace una semana vi en venta unos apartamentos cerca de aquí, se veían bellísimos — agradecí el cambio de tema y el no acabar con un amistad de tantos años. No dejaría que Cole acabará con eso también.



— ¿Estás segura? No sé.. no lo quieres pensar un poco más — niego.

— Me gusta mucho, es perfecto — mi amiga asiente.

— Entonces mañana podemos firmar el contrato — prengunta el accesor de ventas.

— Si, mañana a primera hora por favor, necesito mudarme lo más rápido posible — el hombre asiente.

— De acuerdo.

— Ahora tú y yo vamos a almorzar y después vamos a comprar los muebles para que mañana en la tarde ya estén aqui.

— Bien, Lili Reinhart llego como un huracán ¡Avisen a todos! — le tapó la boca a la escandalosa de mi amiga y río.



— Pongamos reglas — miró a mi amiga sin entender sus palabras — No nombrare más a.. Voldemort — sonrio — aunque debes de saber que algún día van a coincidir, esto es Brooklyn cariño y algún día irás a mi boda o el bautismo de mis hijos — volco los ojos — en fin, Ana quiere verte, lo había olvidado, fue a hablar con Dylan y le hable de tu regreso y queria venir pero tenía clases en la universidad.

— ¿Que estudia?

— Estudia algo relacionado con la fotografía o algo así — sorbo de mi bebida es increíble estar en este McDonald's.

— Este lugar luce igual que siempre los años no pasaron aquí — digo observado todo, miró a mi amiga y veo que su rostro luce pálido — ¿Pasa algo?

— Solo diré en mi defensa que fue tu idea venir a este lugar — ¿Que?

— Pero de que... — volteo mi rostro a la entrada para entender su asombro y mis palabras se ven interrumpida por esos azules, el chico está entrando al local con su gemelo y Marcus, luce mucho más guapo que antes, mucho más guapo que en todas esas fotografías, su cabello ahora es castaño rubio y aunque lo hace lucir más como Dylan seguía siendo Cole, sin duda es él, su sonrisa se borra y sus ojos me escanean.

Siento que esto era lo último que faltaba, para que mi corazón y mi cuerpo sufrieran un colapso.

Enamorada Del Patán [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora