Enamorada Del Patán [TERMINADA]

19. la manzana.

Cole estacionó frente al edificio donde él ya sabía que vivía, un silencio aplastante se había adueñado del lugar, era por demás de incómodo, me sentía culpable por todo lo que estaba generando el estar con él, sus amigos me miraban como si no perteneciera a su círculo, como si juzgarán el que estuviera con él y por más que él intento sonreír desde el incómodo momento con Marcus sabía que le afectaba, sabía que estaba dolido, quería saber que estaba pensando, quería ver más allá, ver a través de él, poder ser su consuelo, su apoyo. Suspire agotada, no había hablado en todo el camino y me pregunta si se estaba cuestionando si era buena idea estar conmigo, enfrentarse a sus amigos de años por mi.

— Yo, yo lo siento — susurré y ahora fue su turno de resoplar.

— No tienes porque, no es tu culpa que Marcus sea un imbécil — su tono era neutral, sin sentimientos aparente y eso causaba un sabor amargo en mi.

— Sabes que no es solo Marcus — necesitaba aclarar todo de una vez.

— Si bueno — lo mire pero el no lo hacía, tenía su mirada perdida en un punto afuera del auto.

— Cole es importante, son tus amigos, me miraban con prejuicios, no solo por lo de Marcus o Amanda, los demás también lo hacían, solo Cooper parecía feliz por ti — mi voz se estaba rompiendo y él no me miraba.

— Esto no se trata de nuestros amigos y si es así Evans y tus otros dos amigos tampoco están muy contentos — el desazón en su voz solo causó que ese nudo ya común se instalará en mi garganta.

— Mírame — no lo hace y una sensación de zozobra me invade — No me quieres tanto en tu vida después de todo — baje del auto dando un portazo sintiendo las lágrimas acumularse en mi ojos, pero me reprimo, no debo llorar.

Esta relación no iba a funcionar después de todo, intento convencerme de que es lo mejor, de que he sufrido mucho para el poco tiempo de felicidad que viví a su lado, que casi fue nula porque solo compartimos algunas horas, mejor que sea ahora a que sea después, el dolor sera mucho peor más adelante.

...

Pensé que sería como en las películas que Cole Sprouse se bajaría del auto y correría hacia mí para hacer el intento de convencerme de que su amor es real, de que podíamos con eso y con todo lo que se interpusiera en nuestro camino. Error no fue así, por esa razón estoy sentada en el sofá de mi casa con cuatro litros de helado, las palomitas de maíz y la pizza fue cortesía de Barbara Palvin, ver películas románticas con el corazón roto debe ser algo prohibido, deberían dar cadena perpetua a todas aquellas estúpidas como yo que lo hacen, el masoquismo debería ser ilegal.

— Los Sprouse son un veneno. Debemos verlo como la manzana del Edén, no debemos caer en pecado, no quiero probar esa manzana, no, no — si digamos que barbara está algo celosa de que Dylan haya pasado toda la noche con la tal Susan.

— Pero que deliciosas manzanas.

— ¡Lili! — hago un puchero ante su reprimida — No ayudas, no pienses en él.

— Es que.. ¿Será que todo acabo? O sea porque no terminamos, aunque nunca empezamos porque nunca me pidió que fuera su novia, pero si me presento como si lo fuera ante sus amigos y ¡Agh! — bufo apunto de un colapso emocional — no me ha escrito y siempre lo hace o por lo menos las últimas semanas.

— Relaja la pelvis amiga — asiento y un James entra a la casa lleno de un montón de bolsas — Porque tu padrastro está tan bueno — susurra para que solo yo la escuché, la fulminó con la más mirada.

— Ni una sola palabra más — ella sonríe divertida.

— ¿Lo vas a negar? — sacudo mi cabeza en negativa, bárbara se a vuelto loca.

— Es como mi papá por Dios — me quejo.

— Pero no el mío — volteo los ojos. — es broma, si eres agua fiestas, es obvio que ama a tu madre y me encanta que sea feliz con el, además soy una niña para el, deja el drama — bárbara siempre hace comentarios acerca de James y la verdad si es guapo pero no se, siento que cometo un insecto al pensarlo de otra manera, es mi papá y ya.

— ¿Cómo están niñas? — sonrió por la mención de James y babara bufa — ¿Pasa algo?

— No nada — dice mi amiga mientras yo le regaló una sonrisa de suficiencia — Lili está un poco triste por su novio es todo — mis ojos se abren como platos al punto de creer que se saldrán, miró a la castaña y está sonríe con malicia.

— ¡Oh! ¿Tienes novio? — abro la boca y la cierro, porque no lo sé y después de lo de ayer no lo creo — Ok — James sonríe y se va aún con bolsas en sus manos.

— ¡Te has vuelto loca! — chillo y mi amiga suelta una carcajada.

— Siempre lo he estado Reinhart — trato de respirar, estoy muy molesta ahora mismo, barbara a veces hace demasiadas estupideces — relajante te dará un infarto y no queremos eso — ella le da play a la película que había puesto en pausa — No le dirá a tu mamá así que puedes estar tranquila.

— No, no puedo estar tranquila, si Lilian se entera me mata y todo será por tu culpa.

— No seas dramática, el estar mucho tiempo con Evans te está afectando — le quitó mi bote de helado y cuando intenta protestar, la fulminó con la mira — Ok, esta bien, no quería helado igual, engorda mucho, además ese no es dietético, prefiero el de leche de almendras.

— ¿Entonces le cantarán cumpleaños hoy? — asiento — no es tarde, ya ha pasado un mes.

— No hoy vendrán mis abuelos y los padres de James, es perfecto, mamá y James habían estado tan ocupados que aplazaron la reunión para hoy.

— El pequeña Tommy ya tiene dos años, quien lo diría, el tiempo pasa súper rápido si creo que fue ayer que tu mamá nos dio la noticia — sonrío nostálgica, recordando cuando mamá me dio la noticia, bárbara estaba pasando el fin de semana con nosotros y empezamos a brincar y saltar de felicidad. Barbara paso su dedo discretamente por la crema del pastel y se lo llevó a la boca.

— ¡Oye! — le doy un pellizco a su plano abdomen y ella se queja del dolor — no te lo comas lo notarán.

— Solo fue un poquito — dice frotándose la zona afectada — Eres muy cruel Lili.

— Y tú una glotona. — ella infla sus cachetes como una niña malcriada, quiero reír pero no lo hago — pareces una niña malcriada, de esas que son un grano en el trasero.

— Oh sí — sonríe y pasa su dedo nuevamente dejando un notorio hueco, mis ojos se abren y ahora sí la mató.

Mamá llega antes de que pueda hacer algo y al ver el hueco en la torta sus ojos se agrandan y nos mira deseando saber quién es la culpable, esto me hace recordar nuestras travesuras de pequeñas.

— Fue Lili señora Lilian, le dije que no pero ella pensó que no se notaría — y debía saber que esto terminaría así, bárbara siempre se salia con la suya, siempre fue la más traviesas.

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Aquí está, ya deseo llegar a un capítulo dónde los haré llorar 🤣🤣🤣 no mentira 0 spoiler aquí 😂😂
Feliz Domingo ❤️