Capítulo 25

5.1K 537 201
                                    

Maratón
1/3


Realmente no sabía que hacer, bendita fue su estilista que lo saco de ese trance.

―Tienes una sesión de fotos, ¿olvidas?―Habló la chica y salió caminando rápidamente.―¡Te esperamos!

―Oh si.―Murmuro viendo a JiMin.―Si me disculpan.―Se dirigió a sus contrarios y estos asintieron confundidos entrando a una amena plática. Se alejo al final del pasillo tomando de la mano de JiMin.

―Wow es Jeon JungKo-

Cortando sus palabras YoonGi lo tomo del rostro y lo beso con fervor. El menor paso sus brazos por sus hombros e introdujo su lengua gozando de la cercanía, lleno de plenitud y cariño.

No se podía decir lo mismo de JungKook que ardía en cólera, detesto lo que sus ojos vieron y salió echando humos del lugar, otro maldito obstáculo... Pero esta vez sabría bien deshacerse de el.

―ZuHo... Maldito bastardo ¡contesta!―Se quejo con el teléfono pegado a la oreja, unos pitidos más y contestaron.―Te estabas tardando... Necesito que investigues a Park JiMin.

¿Qué? ¿El fotógrafo?

―¿Acaso hay otro? ¡Claro que ese! El muy maldito esta involucrado con yoonnie...―Bufo con frustración.―Necesito toda la información que recaudes de él, rápido.―Colgó.

―Te quiero mucho JiMin... Nunca no olvides ¿si?―Susurró sobre sus labios. Ageno a los planes antagónicos de la historia nuestros protagonistas se fundian en su atmósfera.

―¿Mhm? Si, lo sé hyung, yo también lo quiero mucho.―Murmuro sonriente y se alejo.

―Me tengo que ir Minnie.―Ladeo la boca mirando a sus ojos.―Esperame para la cena, te prometo mimos y besitos antes de dormir.

―¡Ansío llegue ese momento!―Soltó con sus ojos inyectados de emoción.―Nos vemos.

Vio a JiMin desaparecer por el pasillo y se recargo en una de las paredes, ¿y ahora?.

[. . .]

YoonGi manejaba hacia casa algo tenso por todo aquéllo que había pasado en el día.

Su primer y actual amor se habían reunido en un mismo lugar, desprendiendo buenos como malos momentos, su pasado amor ardía en colera en las profundidades de su corazón pero seguía como cenizas aquélla sensación que lo evito matar apenas lo vio. Solo esperaba que enterrandose en los brazos de JiMin todo desapareciera y dejara de abrumarlo.

Durante la cena estuvo algo callado o incluso cortante para las respuestas tan mínimas que daba al JiMin que en dado momento se rindió, su mayor no cooperaba. Tomaron un baño y como YoonGi prometió lo beso y mimo por un buen rato pero de alguna forma se sentían como caricias vacías, si emoción alguna.

A la mañana siguiente siguió igual antes de ir a trabajar, solo esperaba JiMin no fuera nada grave.

El plan de YoonGi era rápido, iría a hablar algunas cosas sobre la próxima sesión de fotos y pasaría a cobrar su paga para después llegar a casa y contarle todo a JiMin.

Revolvió con una extraña mezcla de frustración y desespero sus rubias hebras, salió del auto y entro por la puerta del estacionamiento. Sus pasos pesados se hacían resonar sobre el brillante suelo bajo sus botas, su semblante era intimidante para cualquiera pero un rápido movimiento todo fue confuso para él, la obscuridad lo embriago y pronto se vio a si mismo en un cuarto de poca iluminación siendo inmovilizado y besado con devoción. Con todos sus sentidos agudizados impacto con rapidez a la persona contraria hacía el muro provocando un ruido en seco.

Mi Pálido Vampiro | Yoonmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora