Capítulo cinco
Trato de capturar con la mirada todas las calles que recorremos, tengo que empezar a familiarizarme con mi nueva ciudad. De la radio sale música de los años 80', si es que mis conocimientos musicales no me fallan. Oigo como Roxana tararea alegre mientras conduce, moviendo la cabeza con el ritmo. No logró evitar reírme ante la naturalidad con la que disfrutas cosas tan simples como cantar una canción que te gusta. No recuerdo la última vez que había hecho algo así.
- ¿Qué?¿Tengo algo en la cara? -sus ojos me analizan de soslayo.
- No, solo te veía cantar.
- Esa canción es genial, no sabes apreciar la buena música -usa sus dedos índices como palos de una batería imaginaria.
-Me gusta la canción, pero creo que no tengo la confianza para cantarla ante una desconocida.
-Si te detienes a pensar en lo que dirán no vas a vivir nunca.
- Me gusta mantener el misterio con los extraños.Ella se inclina de hombros antes de volver a su canción. A mi me invade la ansiedad, quiero hacerle mil preguntas que me devoran por dentro, pero no tengo las suficientes agallas. Roxana hace una mueca, parece meditar en algo.
- Ahora que lo mencionas, todavía no me dices tu nombre -excelente detalle que olvidé por completo.
- Casandra, pero puedes decirme Cass.
- Me gusta tu nombre, es bastante extravagante.El auto empieza a desacelerar dejando paso a los demás mientras se pone en paralelo a los que están estacionados. Paramos frente a un edificio de departamentos, pequeño en comparación al resto que hemos pasado. Cuando el motor deja de sonar toma del asiento de atrás mi bolso y me hace una seña para que la siga.
Observo con más atención la fachada, tiene en total cuatro pisos, si tengo en cuenta la entrada. Es moderno y elegante, podría también a simple vista pasar un hotel mediano. Pero mi familia me había enseñado a mirar hasta el último detalle, por lo que sé reconocer rápidamente la diferencia con solo verlo.- Nosotras vamos a vivir en el último piso -lo señala para que levante la vista- ¡Vamos! Te vas a congelar aquí afuera.
La obedezco, porque es verdad, si sigo aquí parada me congelaré. Esta campera es muy fina para el clima húmedo que hay.
- En la planta baja todas son habitaciones -me guía por el vestíbulo, veo las diversas puertas que hay alrededor- Creo que son 10 en total. Todas lindas y espaciosas.
Cuando llegamos al ascensor hace una pequeña inclinación de cabeza para saludar al hombre que atiende en el lobby. Ella llama para que venga a nuestro piso, mientras esperamos prestó atención a la puerta de al lado con el cartel de "escaleras". Apenas llega nos metemos en silencio, también se suben con nosotras una pareja mayor de edad. Sé que están tratando de disimular su curiosidad, pero veo sus miradas de soslayo hacia mi. Ambos bajan un piso antes que nosotras.
El ascensor vuelve a parar marcando el número de nuestro piso ¡Guau! Dije nuestro. Me estoy haciendo idea de esta nueva vida. Roxana toma la delantera, dando grandes pasos para llegar ante la única puerta que hay en ese piso. El lugar es un amplio pasillo que tiene dos salidas de emergencia. La puerta del departamento se encuentra del lado derecho.
Me acerco a ella, veo como suprime una sonrisa de placer. Creo que tiene ganas de ponerse a dar saltitos de la alegría. Saca sus llaves del bolsillo, la veo temblar intentado abrir la cerradura.
- ¡BIENVENIDA! -exclama estirando los brazos con orgullo.
- Es bonito -no me muevo del marco de la puerta, siento mis pies pegados al piso.
- Ven conmigo, voy a mostrarte tu cuarto -me toma de la muñeca para atraerme hacia adentro.
- ¿Voy a tener un cuarto propio? -ella asiente a modo de respuesta.
- Lo amarás.-se voltea para guiñarme un ojo.
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La escasa luz que compartimos
Romance· ͙ * ̩̩͙˚̩̥̩̥ * ̩̩̥͙ ✩ * ̩̩̥͙˚̩̥̩̥ * ̩̩͙‧͙ .ꜱɪɴᴏᴘꜱɪꜱ. · ͙ * ̩̩͙˚̩̥̩̥ * ̩̩̥͙ ✩ * ̩̩̥͙˚̩̥̩̥ * ̩̩͙‧͙. 🅴︎🆂︎ 🅻︎🅰︎ 🅷︎🅸︎🆂︎🆃︎🅾︎🆁︎🅸︎🅰︎ 🅳︎🅴︎ 🆄︎🅽︎🅰︎ 🅷︎🆄︎🅸︎🅳︎🅰︎, 🆄︎🅽︎ 🆀︎🆄︎🅸︎🅴︎🅱︎🆁︎🅴︎, 🆄︎🅽︎🅰︎ 🅰︎🅼︎🅸︎🆂︎🆃︎🅰︎🅳︎ 🆈︎ 🆄︎🅽︎ 🅰...