Dr. Control - NamMin

Capítulo 7

Una semana en la que no había podido respirar correctamente un solo segundo. La pequeña crisis que estaban afrontando en ese momento le estaba costando un gran capital a la empresa, a su nombre, a sus ya escasas horas de sueño. Siempre mantenía la cabeza fría para contar con la racionalidad suficiente para solventar los problemas de forma eficaz, mas esto no significaba que no se preocupara.

Había logrado en pocos años lo que quizás a otros tantos pudiera llevarle décadas, no fue un camino fácil de transitar. Nada en su vida lo fue, pero eso, pese a llenarlo de orgullo o satisfacción también lo mantenía en constante presión. No podía dejar que todos sus esfuerzos se fueran por el caño después de todo lo que había tenido que pasar, esa era su vida, su alma.

Su empresa comenzó siendo como la mayoría, una pequeña oficina en uno de los edificios del centro de la ciudad con él como único empleado. Pocos meses después, tras muchos pedidos, aceptó a su antiguo compañero de universidad como su asistente ya que este no quiso ser su socio. Todavía no entendía la razón por la que Jackson Wang con todos los activo que le generaba su empresa y la herencia que recibió tras la muerte de sus padres, escogía trabajar para él como un simple asistente.

La tecnología requería dinero y eso era algo con lo que Kim no contaba. Su padre había sido un gran empresario que cayó en desgracia y pasó a mejor vida dejándolo sin nada. Su madre volvió a contraer nupcias con otra importante hombre de negocios, el señor Jeon, haciéndolo formar parte de esa maldita familia. Por muchos años pensó que solamente los tenía a ellos, eso fue hasta que sus abuelos paternos supieron de su existencia y fueron en su búsqueda. Tuvo mucho recelo en un comienzo pero el amor desinteresado que recibió de ellos fue sanador.

Si le preguntaba, a quienes él consideraba familia, su respuesta era rápida, sus abuelo y hermano menor. Ellos eran los únicos que podían llegar más a su persona, quienes podían hacer flaquear un poco a iceberg de Kim Namjoon.

Fueron los señores Kim quienes le dieron el capital necesario para abrirse paso y hacer crecer nacionalmente su empresa, colocándola gracias a su intelecto rápidamente en la mira de muchos. Cuando comenzó a recibir las ganancias de su arduo trabajo, fue devolviéndoles ese dinero con fuertes intereses. No quería recostarse al hecho de que ellos eran su familia, quería que se reconociera su trabajo sus ideas.

Deseaba darle una galleta sin manos a todos aquellos que no creyeron en su talento o se dejaron influenciar por su padrastro. Que todas esas puertas que tocó de forma desesperada buscando que le dieran una oportunidad a sus ideas y proyectos, se abrieran en su pesquisas. Con él tendrían que contar todos y así fue, así estaba siendo. Lo que parecían aplicaciones bobas, sistemas defectuosos de un niño recién graduado se convirtieron en algo que casi cada ciudadano de Europa y parte del mundo tenía con ellos en la actualidad.

Así fue como poco a poco fue creciendo, aliándose con empresas electrónicas que le permitieron incluir sus creaciones hasta llegar a donde estaba en ese momento. Ya contaba con su propia marca de equipos electrónicos, "KNJ". Esta cubría desde altavoces y móviles inteligentes hasta, televisores y equipos para automóviles. Era claro que eso para él aún seguía siendo parte del comienzo por su meta aún era mayor. Quería que todo el mundo conociera sus productos y que realmente fueran usados de buena manera. Quería hacer un mejor mundo donde la tecnología fuera usada de mejor forma. No sería fácil de lograr pero si alguien podía hacerlo, era él. Namjoon estaba seguro de eso.

Sin embargo, ahora su mente estaba centrada en la inmensa producción que tenía que detener. El nuevo modelo de teléfonos celulares que había lanzado estaban teniendo problemas de sobrecalentamiento del cual los usuarios se estaban quejando. No habían sucedido accidentes graves pero esto era un tema serio que podía afectarlos de manera negativa. Aún no eran una marca demasiado popular y un error les costaba la pérdida de confianza de sus clientes, bajas en el mercado, en las acciones, en todo.