Capítulo 47

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Ya era un adulto, sabía perfectamente que su hermano jamás haría nada intencionalmente para dañarlo pero aún así, cada vez que Namjoon se molestaba, él se asustaba. Una mezcla de respeto con miedo por su reacción o medida a tomar lo embargaba cada vez y en esos momentos no era diferente. No obstante, lucía inquietamente apacible mientras los miraba y pese a su temor, intentó parecer igual de tranquilo que su hermano.

A diferencia de su infancia, no temía por el castigo que le pudiese dar, o si le decía algo en lo absoluto. Instintivamente toda su preocupación se centraba en Jackson. Este podría sentirse herido porque a veces su hermano no tenía conocimiento de la crueldad con la que se expresaba en ocasiones. No quería que sus hyungs tuviesen problemas a causa de lo que ocurría.

Al regresar del baño tomó lugar al lado de Wang, mientras que su hermano volvió a su lugar, quedando frente a frente. La ansiedad que lo recorría a la espera de que dijera algo lo estaba consumiendo y por la manera en la su acompañante movía sus pies y humectaba sus labios constantemente le demostraba que no estaba solo en eso.

— Déjanos a solas unos minutos, Soobin. — Rompió finalmente el silencio tomándolo por sorpresa.

Su humor a raíz de lo sucedido con Jimin fue un desastre en las últimas semanas y esta nueva situación era propensa a desencadenar una nueva molestia en su hermano, aún así, no podía simplemente no decir nada, sobre todo por Jackson.

— Hyung, comprendo que todo esto pueda resultarte inquietante e incluso inesperado pero no quiero que reacciones exageradamente sin antes haberme escuchado.

— Esto no es momento de decirme las cosas. No se espera a que la persona descubra todo por su cuenta para luego decir simplemente vamos hablar. Ya se sabe todo, ¿para qué aclarar algo? Si era necesario decirlo o aclararlo, me lo hubieras dicho antes. Ahora mis, solamente me interesa hablar con quien está sentado a tu lado, ya tú y yo hablaremos después.

El menor mordió sus labios empuñando sus manos, sabía que no solamente lo decía por él, el asunto con Jimin también invadía su cabeza, podía sentirlo, verlo en su mirar. Su expresión cambió, se volvió más fría y oscura.

— Entiendo, no obstante si se trata de nosotros yo tengo tanto derecho como él a estar presente. — Intentó protestar con fundamentos pero el mayor enarcó una ceja y lo miró seriamente descendiendo su copa.

Mierda...

Fue lo único que pensó. Estaba molesto y no podía ocultarlo.

— Tienes razón, lo que sea que tengan es algo que les compete a ambos pero justo en este instante, yo no voy hablar contigo sino con Wang. No creas que no te estoy respetando, ya eres un hombre y debes saber lo que haces, no soy quién para dirigir tu vida pero antes de hablar de ese tema con los dos, mi amigo, asistente y yo nos debemos una platica en la que no tienes cabida. — Los dedos índice y medio de su mano derecha se posaron en la base de la copa y la agitó, sin apartar su mirada del menor. — ¿Debo volver a decirte que nos dejes solos?

Miró al pelinegro sentado a su lado mordiéndose los labios, apretó su manos para tácitamente decirle que no se preocupara y que todo saldría bien para recibir una sonrisa en respuesta. Asintió, retirándose finalmente de la mesa.

— ¿Desde cuándo ustedes dos han estado relacionándose íntimamente?

Pregunta clara y directa, centrando su mirar ahora en Jackson, quien bebió de su copa sintiéndose incapaz de sostenerla, toda la fuerza había abandonado su cuerpo. Su cerebro y sistema nervioso le estaban jugando una mala pasada.

— Siete meses. Desde hace siete meses que Soobin y yo hemos estado acercándonos íntimamente. — Respondió con sinceridad. Pensó tantas formas posibles para decirle, e incluso no decirle creyendo que todo sería algo pasajero que ahora saberse descubierto lo hacía sentir fatal.

Dr. Control - NamMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora