— Te dije que estaba bien, no tenías que traerme aquí. ¡Ay, doctor!— Protestó un adolorido Jungkook mientras lo curaban. — La sangre es muy escandalosa pero estoy, bien, no es la prime-
— ¿No es la primera vez que... — Calló al notar como le hacía señas para no mencionara a la persona que le hizo todo eso. — ... que te sucede algo así? Ya quédate quieto para que puedan terminar.
— Wir sollten ihm ein paar röntgen machen. Wir müssen innere Schäden ausschließen. Er scheint nur leichte blaue Flecken zu haben, aber lasst uns sicher gehen. — Habló el doctor interrumpiendo su pequeña conversación.
— Yo no necesito esas radiografías, con un par de analgésicos y horas de reposo quedo como nuevo. — Se quejó nuevamente. —Ich danke Ihnen für Ihre Hilfe, Herr Doktor. Ich denke jedoch nicht, dass alles notwendig ist, ich bin perfekt.
— Nein, er ist nicht perfekt.— Lo miró seriamente y el pelinegro simplemente evitó su mirada. — Lass mal den Arzt seine Arbeit machen Jungkook. Wir werde einfach hier bleiben, vielen dank.
El doctor salió por la puerta, dándole paso a la enfermera que le inyectaría algunos calmantes. Taehyung no entendía por qué un adulto como Jeon se comportaría como un niño chiquito en el hospital. Su corazón aún estaba angustiado por él y el contrario simplemente le restaba importancia a todo. Aparentemente esta no era la primera vez que ocurría pero ni siquiera en sus consultas este le reveló nada parecido.
Mentiría si dijera que no quería saber lo que le ocurría, conocer el motivo que despertó semejante salvajismo pero no era el momento de preguntar. Conociendo al menor, sabía perfectamente que no le diría nada en ese instante. Palmeó el móvil con angustia y se encaminó a la puerta.
— ¿Te vas? — Preguntó rápidamente Jungkook. — Ay, me... me duele. — Se quejó y el castaño se apresuró para ayudarlo a sentarse, sintiendo la vista fija sobre él sin poder evitar sentirse incómodo.
— No me iré a ningún lado, solamente llamaré a mi esposo para decirle que pasaré la noche cuidándote, no quiero que se preocupe.
— ¿Llamarás a tu esposo para decirle que te quedarás conmigo? — Cuestionó elevando sus cejas con cierto cinismo, resoplando con frustración. — No me lo puedo creer.
— ¿Qué no te puedes creer? ¿Por qué no le diría a mi esposo que estoy cuidando al hermano de mi mejor amigo luego de sufrir un accidente? — Pudo ver al pelinegro luchar contra el dolor y la rabia, sus tensadas mandíbulas y empuñadas manos así se lo hacían ver. — Él no se molestaría por algo así, además, no tengo nada que ocultarle.
— ¿Nada que ocultarle? ¿Sabe él acaso lo que ocurrió entre nosotros?
— Sí lo sabe, se lo conté todo días después pero yo no tengo por qué darte a ti explicaciones respecto a mi vida privada. Le iré a llamar y ahora vuelvo.
— ¡No hace falta que regrese! — Exclamó alzando el volumen de su voz luego de batallar algunos segundos contra sus impulsos. — No necesitas llamarlo para explicarle nada, tampoco quedarte conmigo. Como ves ya estoy bien y luego de las radiografías seguramente me podré ir. Gracias por ayudarme pero no debes preocuparte, ve a casa.
— Ya regreso. — Dijo ignorando todas las palabras dichas por el paciente. No porque no quisiera hacerle caso y largarse de allí, sino porque simplemente no podía hacerlo.
Estuvo largos minutos intentando hablar con su esposo, llamándolo uno y otra vez sin respuesta alguna. Hoseok tenía la costumbre de apagar su teléfono cuando se iba a dormir pero no pensó que lo fuese hacer tan temprano. Le escribió un rápido mensaje explicándole la situación e incluso se tomó una foto como si tuviera la necesidad de confirmar que estaba en el hospital cuando eso era absolutamente innecesario y regresó a la habitación.
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Dr. Control - NamMin
FanfictionKim Namjoon es un joven empresario coreano , desconfiado, apuesto y exitoso internacionalmente que radica en Munich, Alemania. Es un hombre que le gusta tener el control sobre todo y aunque nadie lo menciona en su presencia, ha sido apodado por sus...