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Holi holi, aquí el primer cap. Recordad que si queréis leer el libro completo (y ojo, que es largo, más de 400 páginas) ya podéis obtenerlo por menos de 5 dólares en amazon, seáis del país que seáis. También, si queréis tenerlo en físico y apoyarme un poquito más, está en el mismo sitio y por 25 dólares la versión impresa <3

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Dicho esto ¡A leer!


—De acuerdo, entramos en acción en cinco minutos ¿Te sabes el plan? —susurra Norman con su ceño fruncido y agachándose para hablar con su bajito compañero.

La expresión preocupada de Norman endurece cuando el chico solo le resta importancia con un gesto de manos y rueda los ojos en ese gesto adolescente de hastío que le sale casi automáticamente cuando recibe una orden.

—Vamos con las pistolas apuntando hacia él, yo por la izquierda, tú por la derecha. Yo lo mato rápido, de un tiro en el pecho y tú tapas la salida por si no lo consigo e intenta huir. —recita con voz mecánica y cansada, después mira al otro desde el borde de sus ojos y levantando su labio superior con asco pregunta —¿Contento, papá?

—No me comporto como un padre, idiota, soy tu jefe. Y no debería tratarte como a un niño mezquino si siguieses las órdenes al pie de la letra. —refuta, con una vena empezando a marcársele en la sien derecha y los dientes atrapando el labio para no acabar chillándole al menor y mandando todo el plan a la mierda.

Oh, Norman no puede cagarla ahora, para nada. Llevan persiguiendo a esta organización de vampiros que trafica con humanos demasiado tiempo y ahora que el líder está en acción y en su punto de mira, va a dispararse en las bolas como algo salga mal. El pequeño pelinegro, por otro lado, no parece demasiado tenso, tiene una postura encorvada, hombros relajados, se está mirando las uñas, comprobando que la pintura negra esté en su sitio, y prácticamente está actuando como si matar a un chupasangres mafioso fuese tan sencillo como hacer la colada.

El pequeño vira sobre sus talones, poniéndose frente a su compañero, y empieza a hablar gesticulando con las manos, en específico con la izquierda, donde tiene el arma cargada.

—Escúchame, mandón. —dice, refiriéndose a él y dejándolo bien claro al apuntarlo con el dedo y, por consiguiente, con el cañón de la pistola.

Norman chasquea su lengua, el chiquillo es un inconsciente, la lengua de él también se mueve en su boca, transportando una masa rosa ¿Está mascando chicle en una misión tan importante? Dios, Norman espera que se lo trague y se ahogue ¡Pero el Karma tiene ojos ciegos para el maldito pelinegro!

—Si siguiese las órdenes de viejos rancios como tú no sería unos de los cazadores más prometedores de toda la organización ¿No crees? —pregunta con saña, sonriendo al ver que el otro se muerde la lengua, no pudiendo objetar nada.

Y es que, para desgracia de Norman, es así, ese niñato de dieciocho años recién cumplidos es una joven promesa de la organización, un maldito enano psicópata que entró a los seis años y a los siete le tiraba cuchillos arrojadizos a sus niñeras si no le daban los cereales de colores tan azucarados que a él le gustaban pero a su pediatra no. El niño dice que es su destino, que prácticamente ha nacido para ello o que, más bien, la sed de venganza le ha hecho el elegido para acabar con esa raza. Norman piensa que son solo sandeces, pero a veces y solo a veces tiene una sensación en el pecho que le perturba, una corazonada de que el chico es más sincero de lo que cree.

—Manos a la obra, me desplazo hacia la derecha. Espérate siete segundos exactos antes de actuar, si no, no me dará tiempo a llegar a mi posición.

Uno.

Inmor(t)al [En Amazon] (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora