Capítulo 32: De campamento

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Capítulo 32: De campamento

Unos toques incesantes los interrumpieron poco antes de compartir un beso. Seth bajó la cabeza y aclaró su garganta.

-¡Vengo por mi hija! -rugió una voz masculina desde el exterior.

Ella peló los ojos al reconocer la voz de Frank.

Emily se apartó de inmediato y se dirigió a la puerta. Al abrirla, un gesto molesto en el rostro de su padre la recibió.

-¿Qué haces aquí? -fue lo único que pudo decir.

Escondió la bolsa rosada con su regalo en el interior detrás de sus piernas.

Frank alargó la mano y jaló a su hija consigo.

-¡Ey!

-Vámonos, sube al auto -ordenó mientras la arrastraba al coche negro.

Emily se deshizo del agarre bruscamente.

-¿De qué hablas? ¿A dónde vamos?

-Tú mamá me dijo que no te encontraba por ningún lado. Parece que no puedo dejar de vigilarte un solo día.

-No, todo está bien.

Volteó hacia el pórtico donde estaba Seth, expectante. Escondió su regalo con más esmero.

-Apenas hoy iba a salir de campamento con... mi familia -explicó Frank de pie sobre la acera y con las llaves en su mano.

-¿Te refieres a que arruiné tu viaje?

Él permaneció callado. Emily tragó saliva.

-Si, eso creí. No fue mi intención -dijo, pero su tono no llevaba ni un ápice de disculpa.

-Emily, quería que vinieras con nosotros.

Esta vez fue ella quien permaneció callada.

-No, tu esposa me odia.

-Te aseguro que no es así. Por favor, acompáñanos.

Emily torció la cabeza hacia su novio, todavía en su mismo lugar, al tiempo que su cabeza imaginaba las posibilidades.

-¿Puede venir Seth?

Frank arrugó el entrecejo de inmediato y soltó un suspiro pensativo. Ella lo presionó con la mirada.

-No lo se... ¿tú mamá no se enoja?

-No, para nada; al contrario.

-Como quieras.

Emily sonrió instantáneamente y corrió hacia Seth para darle la noticia.

-¿Todo bien? -preguntó él.

-Si. Papá me invitó a ir a acampar... ¿quieres venir?

Él abrió la boca pero ninguna palabra salió de ella.

-No puedo dejar a Chris sola. También tengo que ir a visitar a mamá.

-Entiendo, no te preocupes.

Seth contempló el rostro apagado de su novia. Claro que quería acompañarla, se moría por ir con ella. Pero su familia exigía atención.

Entonces tuvo una idea.

-¿Sabes qué? Voy a llamar a Robert, me debe un favor.

Emily alzó las comisuras a lo ancho y largo.

~*~

Tuvieron que preparar maletas a la hora de la hora. Empacar ropa, objetos de higiene personal y el imperdonable repelente para los molestos mosquitos.

Doble PersonalidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora