Darren
El cuarto se ve normal ¿Cuál es la trampa? No puedo dormir aquí, debo desconfiar de hasta mi sombra.
—Mariposa —Seyn me llama y me giro a verlo parado en la puerta.
—Vete a tu habitación —lo reprendo —si no seguimos el juego de las voces, será para peor.
—Quiero hablar de... —Pone la mano en su nuca, suspira y la baja —el beso.
—No porque te haya besado significa que vayamos a volver —le aclaro —. Los problemas no se arreglan con cariñitos —Pongo las manos en mis caderas femeninas.
—No sé qué hacer, dímelo —Levanta ambos brazos por un instante.
—Si lo supiera no estaríamos en este problema —Señalo el lugar —. Te recuerdo que las voces aprovecharon tu inseguridad para que termináramos y así distraerme mientras creaban todo esto.
—Si estás triste porque nuestra relación acabó, ¿por qué no volver?
—Porque no arreglo nada regresando contigo, ya que el problema sigue estando latente en esa relación, esto no se trata de la buena física que tenemos en la cama, esto habla de nuestra mala comunicación.
—Mariposa... —Camina hasta mí y me agarra de las manos —sonará cliché, pero puedo cambiar.
Bufo, luego retrocedo para apartarme de su cercanía.
—Escúchame, las personas no cambian de un día para el otro, y tú tienes un serio problema de confianza, así que eso que dices puede llegar a ser muy vacío en realidad.
—No hay nada vacío si no me dejas ni intentarlo —insiste.
Pero tiene un buen punto.
—Eres inteligente —opino pensativo poniendo una mano en mi barbilla.
Sonríe.
—Gracias, lo sé —dice altanero.
Me río.
—Ese ego.
—¿Y ahora qué? —pregunta luego de formarse un silencio incómodo.
Bostezo.
—Ahora me voy a dormir.
—Pero no puedes, tú mismo dijiste que...
—Sé lo que dije, pero tú también me aclaraste que vigilarías —Alzo una ceja —¿Sigue en pie la sugerencia?
Se sobresalta.
—¡Sí! —dice emocionado.
—Bien, tomemos turnos —Sonrío.
—No hace falta, yo no...
—¿No confías en mí? —Lo pongo a prueba y entrecierro los ojos.
—¡Yo no dije nada! —expresa nervioso.
—Bien, dormiré un rato —Me acerco hasta la cama y me recuesto allí —. Por cierto, que esto sea una tregua, no significa que habrá física —le aclaro —, no podremos avanzar nada si te pones de calentón —le advierto.
Rueda los ojos y se cruza de brazos, para luego sonreír.
—Mira quién habla —se burla.
Ahora él me pone a prueba, pero no importa, porque yo soy Darren Wein, La Perfección, yo siempre ganó y si se trata de contenerse, también voy a triunfar. Lo estuve haciendo mientras lo rechazaba, no puede ser tan difícil ahora que tenemos una tregua. Esto tiene que funcionar, no puedo fallar.
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Corazón Oscuro #9
ParanormalSe bienvenido al reino de las voces. Saga Restauración #9 Por Viviana Valeria V.