Eres el amante que cae con la noche a mi alcoba, vistiéndote de rocío, ese que se siente pero no se ve, que me trae la calma de cada segundo y la inquietud a mi alma por horas, el secreto que se esconde tras la divina magia del impúdico brebaje que me atraganta en casa sorbo de tu recuerdo, el mismo que me lleva a navegar en la inmensidad de una noche de la que no quiero que acabe, pero lo hace, acaba, la magia se extingue, el sol sale, y desapareces entre la neblina que se disipa ante la luz que te esconde de mi.
Las Letras de mi alma