Creo que cuando me ataca la nostalgia, es porque aun tu nombre esta latiendo, trato de que no me duela o que duela cada vez un poco menos, pero en realidad nunca se sabe cuanto duele hasta que abrimos el cajón del pecho y revisamos lo que encerramos para darle paso a lo que seguía, al nuevo capítulo, según yo para poner el punto final, aunque en realidad por fuera del la caja escribi no abrir hasta que ya no duela, pero con puntos suspensivos, y al abrirlo cuando uno supuestamente esta bien, encontramos mariposas muertas y sonrisas a medias, algunos cuantos poemas que huelen a tu perfume, y suspiros almacenados entre muchos detalles que marcaron momentos, siempre lo dije éramos perfectos para no ser la pareja mas perfecta del mundo, y aunque eso suene mal, en nuestra imperfección teníamos una perfecta combinación, tu pintaste de alguna manera el cuarto oscuro en donde me había escondido por mucho tiempo, y me abriste las ventanas con tu mirada, para que viera entrar el sol y tocara mi piel con sus suaves caricias no éramos malos para estar el uno con el otro, pero simplemente no éramos suficiente para estarlo, y yo tenia un concepto claro para el. nosotros y tu tenias el tuyo y encima en otro idioma, y ahí no acabo, Por que yo era y citándote Lo que tu necesitabas, aunque era raro porque lo que daba era de lo que te quejabas, entonces no entendía, supongo que querías una versión de mi hecha a tu medida, y eso era muy difícil, por que las personas somos como somos, no le puedes decir a la lluvia como caer y en qué dirección, ella solo cae según las condiciones que tenga, y yo era tormentas con rayos y truenos, y tu te mojabas con cada chubasco que te ofrecía, mientras yo me precipitaba tu simplemente te escondías, y hacías que nuestro amor se inundara de todo menos lo que queríamos, así que el mal tiempo envolvió lo que sentíamos y luego de la lluvia un frío siempre iba cubriendo poro a poro las ganas de estar juntos hasta que decidiste abandonar mi zona geográfica y disfrutar del verano en otra región, pero siempre visitándome por mensajes que no contesto y en llamadas que nunca mas volví a recibir, pues no tiene caso, por que si te vuelves a mudar, al principio traerías contigo ese verano, entre tus manos, pero con el tiempo volverías a resfriarte entre mis aguas, porque somos ajenos al cambio, pues creo fielmente que uno no cambia, y nosotros aprendimos que sacamos lo peor de nosotros juntos, y jamas pudimos enfrentar el rio que se desbordaba en nuestros rostros, así que mucho amor había pero no sirvió para sostenernos en ese apacible lago de miradas, en el que no pudimos bañarnos, pues somos fenómenos de naturalezas opuestas y sin lugar a dudas, siempre lo seremos.
Las letras de mi alma
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