3. No busques, te encuentran.

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Estavilo

Capítulo 3.

"...No busques, te encuentran..."

Jess


Recuerdo haber soñado con sus ojos, su boca, su pelo y su persona. El simple hecho de escuchar su voz me hacía imaginarme un sin fin de cosas junto a él. Sin embargo, sabía que el estaba enamorado de otra persona y estaba con otra persona. Si tan solo pudiera olvidarme de Tom Ogden o aceptar que me gustaba quizá sería más fácil olvidarlo.

<<No quiero pensar en una respuesta
Por qué se que, estás aquí.
Quizá pueda admitir, que lejos yo estoy
De entender lo que sentí.
Prefiero imaginarme un lugar sin ti
Que sufrir por ti estando en el mismo lugar>>

La letra estaba en mi mente junto con su rostro, pero no salían de mi boca más que una simple melodía en la guitarra. La puerta de mi habitación se abrió y los ojos verdosos de Avril se asomaron por el rabillo de la puerta.

—Bonita canción—dijo ella acercándose a mi—¿Cuando la presentarás?

—Aun no—deje la guitarra a un lado y la mire—No está terminada y me faltan algunos retoques.

—Esta bonita, pero tú no eres de haces canciones cursis ¿Que cambio?

—Nada—me encogí de hombros—Me nació escribir eso, nada más.

Avril me miró ceñuda y movió sus cejas de forma juguetona.

—¿No tendrá que ver con un británico alto y medio timido llamado Tom?

—¡No!—negue de inmediato—Tom y yo solo somos amigos.

—¡Ah!—dijo sin creerme—Vistete por qué tenemos que salir.

—¿A dónde?—pregunte extrañada. Avril subió y bajo las cejas rápidamente de forma picarona.

—Hoy iremos a la disquera de los chicos, el dueto si va.

—¿¡Que?!

—Sera mejor que te vistas—y dejándome con la boca abierta, Avril la guitarrista se fue de mi habitación como brisa marina.

No me tomo mucho tiempo salir de mi shock, ya que Anita comenzó a apurarnos a cada una. No tenía la menor intención de ir, pero no quería seguir complicando las cosas. Tampoco quería que las chicas salieran perjudicadas por mi comportamiento.

De mala gana, tomé una camisa negra, mis jeans rasgados color azul oscuro, zapatillas negras y una chaqueta de mezclilla color roja. Me eche un poco de perfume y salí de la habitación con mal carácter. Baje las escaleras y las chicas ya estaban listas. A las 3:15 la van nos esperaba afuera y partimos a nuestro encuentro con los chicos gringos.

—Dicen que Sam tiene un piano blanco autografiado por Elton Jhon ¿Será cierto?—comento Ramona emocionada.

—Lo más probable es que si ¿Son famosos, no?

—¡Ay que emoción! No lo puedo ocultar.

—Comportate, por qué si no tendremos problemas.

Estavilo (Josh Kiszka)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora