Desperada pt. 2

471 64 18
                                    

Adrien era su amigo, de vez en cuando lo visitaba antes de llegar a su casa, hablaban de cosas sin sentido y con sentido, a Adrien le encantaba escuchar la música e historias de Luka, ya que al ser un chico que se la vivía encerrado era interesante escuchar a un chico que vivía en libertad y dos años mayor que él, a Luka le causaba ternura y gracia el rubio de ojos esmeralda. No tenía nada contra él, de hecho era de las personas que más le agradaban.

Su único defecto era no notar lo maravillosa que era Marinette y hacerla sufrir por ello.

Pero es que en el amor no se manda y eso lo sabía bien gracias a que él la quería y la muchacha no le correspondía.

Pero volviendo a la realidad, a él se le ocurrió un plan para que Desperada no los atrapara y los convirtiera en estampillas decorativas en su estuche. Amarró a su fiel compañera a una estatua con ayuda del rubio.

Miró a su guitarra y se sintió un poco mal al dejarla ahí, pero era para hacer tiempo en lo que se ocultaban para poder huir de la villana más peligrosa que habían tenido hasta el momento ¿Dónde estaba Ladybug? Se preguntaba el morocho mientras con el rubio de cabellos como el sol bajaban por la alcantarilla.

Olía mal, no estaba más de decirlo, el agua verde realmente le daba un toque más asqueroso y lugubre al ambiente, no dijeron mucho en el trayecto, primero porque olía mal y si abrían la boca todo se volvía más asqueroso y segundo porque ambos estaban pensando en sus cosas, no sabía lo que pensaba Adrien, pero empezó a analizarlo un poco más, prestando atención a su melodía.

Era muy bonita, un tanto triste pero no podía decir que la vida del modelo era la soñada, sí, tenía dinero, fama, educación ¿Pero eso realmente lo hacía feliz? No realmente, se la vive encerrado, no porque él quiera, si no porque no le dejan ser libre, siempre bajo los ojos de su padre con el temor de que algo le pase ¿Pero porqué dejarlo aquí en París donde todos los días hay un ataque de akuma? Eso no importaba, aún con todas las cosas que tenía encima para tener 14 años, es maduro para su edad, amable, siempre estaba preocupado por sus amigos, escuchó con más atención su melodía y se dió cuenta de un acorde que notaba solamente en personas enamoras ¿Acaso...?

Rayos.

Adrien estaba enamorado, pero no sabía a ciencia cierta de quién lo estaba, era difícil y de saber y tampoco es que quisiera saberlo del todo. Ya su corazón le pesaba demasiado como para pensar en eso.

Encontraron un armario de limpieza y se metieron en él, a Adrien se le ocurrió una idea, por separado ya que sería muy incómodo juntos, para una mayor seguridad si es que a Desperada llegaba a bajar a las alcantarilla de París, su mayor seguridad era meterse en el casillero, cabían perfectamente hasta para moverse un poquito, siempre y cuando fuesen separados, cosa que fue así y lo tranquilizó un poco.

Al principio fue sofocante, lo hizo recordar todos esos años de maltrato en la escuela media, y de todos los chicos que se burlaban de él por ser extraño, siempre llevaba audífonos que suprimian el sonido para no tener que escuchar las melodías que se arremolinaban, las que eran más fuertes siempre eran las más malignas y que les gustaban molestar a las personas, esas le perturbaban en demasía, le pegaban, empujaban, pateaban, le metían el pie para que se cayera y sus audífonos solían caerse, puesto que era la década de los 2000 y los audífonos Bluetooth no existían, siempre llevaba unos enormes que se notaban en seguida, cuando estos caían, las melodías empezaban a entrar por sus oídos y calaban en lo más profundo de su ser y no le dejaban en paz, él empezaba a llorar y a cubrirse los oídos, sus compañeros se burlaban, otros se asustaban, unos iban a decirle a un maestros (estos eran los más compasivos) y si no llegaba un maestro a tiempo era encerrado en un locker, donde lloraba y se cubría los oídos, pensando en como deshacerse de esas melodías, de como dejar de escucharlas, de como hacer que su sufrimiento parara.

La Melodía en mi cabezaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora