Futuro

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Es San Valentín, bueno, era, San Valentín, ya no alcancé a publicar este capítulo como "regalo" del amor y la amistad para ustedes a altas horas de la noche, siquesi ¡Espero les guste! ¿Cómo la habrán pasado? Espero que no mal y recuerden, que el amor propio es el más importante de los amores y hay que trabajar en él cada día de nuestras vidas. 💕

Gaizka Couffaine era un hombre respetado por la gente, era una persona amable que le agradaba a medio mundo, la tranquilidad y sabiduría que emanaba era envidiable para muchos. Era algo admirable, y también que se había casado con la extravagante guitarrista Anarka Flament, antigua guitarrista de Jagged Stone y una de las mejores guitarristas de París. Gaizka a pesar de que su mejor amiga era su guitarra sabía tocar el violín, el piano, la batería, la marimba y otros instrumentos más. Le gustaba aprender lo mayor posible de música.

Ese era un día tranquilo en el Liberty, su casa barco ya que a Anarka no le gustaba mucho las casas convencionales, eran demasiado "adecuadas al sistema" y eso no le gustaba mucho a su esposa. Era divertida su relación, él era muy calmado y zen, ella era muy extravagante y explosiva. Era algo extraño pero se complementaban. En ese momento estaban en su sala, viendo algo de televisión satelital, algún programa basura al que no le prestaban atención pero a Anarka le gustaba el ruido. Gaizka tocaba su guitarra mientras su esposa andaba de un lado a otro, a muchos les parecería extraño ese comportamiento de alguien pero a Gaizka no, no de su esposa, extraño es que se mantuviera quieta, aunque de un momento a otro apagó el televisor, cosa que extrañó al joven hombre. Miró a su esposa que se sentó y se quedó escuchando la melodía que salía de su guitarra, no sabía porque pero había soñado con ella y ahora la estaba tratando de replicar, un cuaderno con partituras suyas estaba a su lado y listo para cuándo ya tuviera la melodía lista, iba notando acordes de vez en cuando, justo cuando le daba a la nota perfecta.

-Gai.- lo llamó por su apodo cariñoso a su persona. Él la volteó a ver con una sonrisa. Ella suspiró sonriendo y tomando la mejilla de su marido.

-¿Qué pasa, Anarka? Tu corazón suena agitado.- le dijo, el hombre tenía un oído agudo, a veces le molestaba pero ya había podido controlarlo después de un tiempo viviendo con ello. Escuchaba el latir de su corazón golpeando su pecho rápidamente.

-Es sólo que...- dijo ella rascándose la mejilla, un gesto que hacía cuando estaba nerviosa. En ese momento Gaizka se espantó y se acomodó bien en el asiento mirando preocupado a su esposa.

-¿Pasa algo, Narki?- preguntó él, ella volteó a ver a la guitarra y soltó un suspiro.- Dime si algo anda mal, lo podemos arreglar...

-No es eso, Gai.- le dijo apenada.-Yo solamente... Ugh, maldita sea.

Él la miró preocupado, no era como si ella nunca maldiciera, era bastante común, y más a los guardias municipales que venían de vez en cuando a ver si sus papeles para vivir en su bote estaban en orden.

-Bien.- dijo ella mirándolo a los ojos, tomando el rostro de su marido en sus manos. - Gaizka, escuchame bien, porque es difícil para mí, pero es importante decirlo porque nos involucra a ambos.- Él asintió mirándola extrañado, en sus cinco años de matrimonio ella nunca se había puesto así de nerviosa e inquieta. Ni siquiera en los otros tres de noviazgo.- Estoy embarazada, Gai.

Por un momento, él parecía estar en un trance ¿Un bebé? ¿Su esposa estaba embarazada? Él sonrió mientras miraba el rostro preocupado de su esposa.

-¿En serio, Narki?- Ella asintió, él se echó a reír y abrazó a su esposa que estaba sorprendida por la reacción, le dió un beso rápido en su cuello y le susurró un "te amo" que ella correspondió. Se separó un poco de ella para mirarla a los ojos.- Eres la mejor, mi amada.

La Melodía en mi cabezaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora