Vivo por ti. (Goku y Kefla)

Volverás a casa.

Algunos de sus amigos se encontraban en la casa de Caulifla. Ella recorría sus pasillos angustiada, porque nadie le contestaba su celular, ni Goku ni Kefla. Goku por una llamada corta le habría contado todo pero no dio más detalle. Caulifla se harta y tira aún lado su celular. Su respiración era rápida. Vegeta fue a ayudarla a sentarse y que se relaje pero no fue posible. Vegeta intenta hablar pero fue interrumpido por ella que sollozaba, estaba muy preocupada por su amiga y su amigo. Vegeta, aunque no lo demuestre, él igual está sufriendo por eso. En eso alguien entra a la casa y era Broly y Kyabe quienes fueron a buscar a los demás por otros lados pero no los encontraron.

Vegeta: Nada, ¿verdad?

Broly: Lamentablemente no. Ni un rastro.

Kyabe: Fuimos a al departamento de Goku y... no vimos nada fuera de lo normal. Estaba como siempre.

Vegeta: Entonces no desaparecieron allí, fue en otro lado. 《se levanta de su asiento》 Entraré al Instituto.

Broly: Pero, está cerrado.

Vegeta: No me importa si está cerrado, iré igual. Mis amigos están en desaparecidos y no me detendrán unos policías.

Llega a la puerta pero una voz le hace parar. Voltea y se trataba de Caulifla, con su expresión de serenidad dice.

Caulifla: Necesitas de alguien que te cuide la espalda.

Los demás igual se ponen de pie. Vegeta sonríe y dice.

Vegeta: Prepárense que nos iremos ahora.

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Se enciende una luz, iluminaba la gran parte de la habitación. Ella no con sus ojos abiertos completamente miraba los alrededores, miro sus brazos y tenían rasguños. Miro nuevamente al frente y la puerta que allí había se abrió, entró Black con su típica sonrisa, Kefla odiaba, lo encontraba asqueroso. Él se le acercó demasiado y le acaricio su cabello, hasta que llegó a su mejilla y llegó a su boca. Al notarlo muerde la mano de él y este la quita de allí. Sin ningún motivo alguno Black comienza a reír, sin parar. Kefla pensaba, ¿se volvió loco? Pero se distrajo cuando escuchó hablar.

Black: Jejeje. Me encantas, linda. Me vuelves loco.

Kefla: Eh... ¿Qué?...

Black: ¡Me encantas! Tienes un cuerpazo, linda. No sabes como me vuelves loco, estoy loco por ti.

Kefla: 《incómoda》 ... ¿?

Black: Yo sé quién te gusta... lo dijiste cuando alguien llamo y su nombre es Son Goku, ¿no? Bueno, eso se puede cambiar, te lo aseguro. Pero por ahora eres mía.

Kefla: Oye, para. Mierda, estas obsesionado. Déjate de mierdas y sacame de aquí. Yo NO soy tuya, escuchalo bien.

Black: No por ahora pero... cuando Goku muera... serás mía.

Kefla: Goku te podría vencer fácilmente. Hasta yo podría derrotarte y luego de derrotarte diré: ¿quién es el siguiente? ¡No eres más que un maldito enfermo!

Black: No soy un enfermo... soy un dios. Soy tu dios.

Después de decir eso, ríe y sale de la habitación, cerró la puerta pero aún así su risa aún se escuchaba. Kefla trata de liberarse pero no le era posible, hasta que se detiene y baja su cabeza. Piensa en todo lo que vivió y por unos momentos pensó que ya era el final pero se negó, nego que era el final. Miro el techo y pensó que quizás la buscaban, quizas...
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Las calles estaba solitarias, no había ninguna alma en las calles. La noche se volvió fría, pero eso no impidió que Goku siguiera con su búsqueda, iba a luchar contra viento y marea por encontrar a su mejor amiga o a su único amor real. En eso le llaman al celular, este miro de quien se trataba y era su antiguo amigo Gohan.