Capítulo 47

84 4 0
                                    

Nos volvimos a mirar de nuevo, después de la última palabra que dije, y nos levantamos para yo irme a mi casa. Pero él me detuvo y me pegó de nuevo a ese árbol, que ha sido testigo de toda nuestra conversación que hemos tenido hace unos minutos.

— Vente a mi casa.. — Me propone.

Tengo ganas de estar con él toda la noche pero sabemos perfectamente, que no vamos solo a dormir.

— No sé.. no creo que sea buena idea después de lo que he visto en la fiesta. — Digo apoyando mi cabeza en aquel árbol.

— Lo siento... me dejé llevar, por completo había tomado unas copas de más.

— ¡Ahm..! — Exclame— Entonces estás aquí por unas copas demás también.

— No por que contigo tengo las cosas claras. Y además te has ido de la fiesta por que estaba celosa — me burlo de ella robándole un beso un poco largo. —

— No lo estaba — miento siguiéndole el rollo —

— No te creo fíjate.

— Pues no me creas. — Dije apartándome de él quedándose con las ganas de besarme — pone cara de sorprendido. Y acabo por riéndome.

— Que mala eres... — Dije riéndome.

— Sabes que no lo soy. — le miro y pone cara de «No se yo»

—¡Oye! — Dije riéndome.

— Me pasaría toda noche aquí pero... pasa gente y después nos hacen fotos y es mejor que nos vayamos a mi casa.

— Está bien...

— No te veo muy segura.

— Si lo estoy solo que quiero ir despacio, y contigo aún más.

— No voy hacer nada de lo que tú no quieras cariño.

Nos íbamos a ir pero le cojo de la mano haciendo que vuelva donde estábamos antes, dándole un último beso pasando mis manos por su cuello, acabando su mano en su pelo. Él apoya su manos en aquel árbol pegándose muchísimo más que antes, eso me pone un poco más nerviosa de lo que más me pone.

— Joder.. — susurra cuando nos despegamos de aquel beso. — Me río al oírlo y le doy un último beso en la mejilla.

— ¿Nos vamos? — pregunto. —

— Si pero te vienes en mi coche.

— No puedo dejar el mío aquí.

— Te lo llevarán a mi casa.

— Vale.

Nos fuimos hacia el coche y él me abraza por detrás dándome un beso en mi cabeza. Le miro y nos dimos varios besos mientras nos dirigimos hacia el coche. Sus manos no pasa de mi cintura, y le doy un último beso antes de entrar al coche.

Estuvimos todo el camino hablando hasta que llegamos a su casa, y me bajé con su ayuda.

— Que caballeroso.

—Siempre lo soy cariño.

— ¿Entramos? — Dije nerviosa.

— Claro vamos.

Entramos los dos juntos y me quedé algo sorprendido de lo grande que era esta casa por dentro.

— ¿Quieres una copa?

— Creo que he bebido mucho por esta noche — Dije sincera — y tú también — Dije quitándole la copa de las manos.

Mi historia comienza aquí.. ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora