Mi historia comienza aquí.. ®

Capítulo 75

Después de un mes de mi operación sol se quedó conmigo para ayudarme a vestirme, había quedado con Albert y su chofer le vendría a buscar en pocos minutos, pasaré la noche con el y todas las que pueda.

— Vaya cara traigo madre mía.

Dije mirándome al espejo.

— No digas tontería que estás guapísima a cara lavada.

Estábamos hablando cuando tocan el timbre.

— Sol por fa cógeme mi bolso con mi ropa está en el sofá.

Salí de mi casa bajando con cuidado las escaleras, hasta que llegue al coche por fin y me ayudaron a montarme, Sol cerro todas las puertas de mi casa y sé montón conmigo en el coche después de ayudarme.

..

Llegue a casa de Albert bajándome de nuevo con ayuda, del chofer.

— Hola amor.

Me da un beso en los labios, pero necesitaba más y seguí con el beso sin pararlo hasta que nos quedamos sin aire.

— ¿Como te ha ido el día?

Una vez que ya estábamos adentro de su casa.

— Se podría decir que bien pero ha sido un día agotador.

—Y bueno..¿Qué tal si entramos y te prepongo una cosa?

No dicen nada y entra a la casa cuando Malú entra a la casa se lo encuentra todo con rosas y velas, hoy es catorce de Febrero día de los enamorados.

— Amoor... que bonito...

Me doy la vuelta para besarle, paso mis manos por su cuello.

— Gracias por todo esto...

Le digo parando el beso juntando su frente con la mía.

— Que tal si nos vamos a darnos un baño relajante.

Asiento enseguida pero me coge en brazo para llegar antes a la habitación. 

— Te vas hacer daño en las espaldas cariño

— No pesas nada canija.

Nos reímos los dos y le doy un pico en los labios. Al llegar a la habitación me deja en la puerta para que después yo la abra y vea todo lo que hay en el cuarto un camino de rosas y de velas, en la cama también hay pétalos con un mensaje escrito «Quiero pasar una vida junto a ti»  me pongo las manos en la boca sorprendida, me doy la vuelta y lo beso sin parar.

— ¿Pero cuando has hecho esto? — pregunto sonriente y emocionada.

— Digamos que he tenido un poco de ayuda.

Le doy varios besos pero paro enseguida.

— Ve metiéndote en la bañera ahora voy.

— Está bien no tardes.

Me giña el ojo y enseguida me empiezo a preparar me pongo ese trajecito sexy que tenía desde hace unas pocas semanas, Sol me convenció de comprármelo aunque a mi estas cosas me da mucha vergüenza. Una vez puesto me maquillo un poco, y cojo como puedo dos copas de champán, para llevársela y brindar por nosotros. En cuanto me ve entrar por la puerta se queda embobado mirándome, no me quito nada y le doy la copa que tenía en mano antes de meterme para pocos segundo después meterme en la bañera, y acercarme a él para besarlo intensamente.

— Que guapa estás.
Digo mirándole con una mirada provocativo.

— ¿Te gusta? Quería verme sexy para ti.

— Siempre vas a estar Sexy para mi.

Es su última palabra cuando sin esperármelo me besa ansiadamente y mis manos pasan por sus torso hasta llegar a su intimidad.