Un amor de campamento.

El sofá está ocupado esta noche.

El coronel Grayson estaba sentado en su mesa frente a mí y ambos estábamos en silencio.

Se acababa de enterar de la pelea aunque lo había bautizado como 'ataque de la soldado Dawson hacia las soldados Froid y Lint'.

-¿Algo en su defensa, soldado Dawson?-preguntó.

Lo miré a los ojos amargamente. Tenía muchas cosas para defenderme pero no podía decir ninguna. Todo era horrible.

-Muchas, pero prefiero sufrir un castigo.

-¿Qué le han dicho para que se pusiera tan agresiva, señorita Dawson? Por favor-dijo antes de que contestara-Sea completamente sincera.

-¿Quiere sinceridad, coronel?-pregunté-Pretendían agredirme como la vez anterior pero esta vez las ataqué cuando se les ocurrió mencionar que me tiraba al sargento Mason.

Por un momento el coronel se quedó pensativo.

-No puedo ir atacando a todos los que dicen cosas sobre tí, Samantha-dijo suavemente.

-No es propio de mí pero ya tenía encendida la mecha y ellas la hicieron explotar-expliqué.

-¿Con qué estaba cabreada?-curioseó.

-Con el sargento Mason, por supuesto.

-¿Puedo preguntar que hizo?

-Me mintió, coronel. Está de baja y ayer me dijo que estaba trabajando-dije acabando en un susurro.

-Samantha-atrajo mi atención el coronel-Blake puede ser...no sé como decirlo para no ofenderle.

-Capullo, idiota, imbécil, gilipollas, mentiroso...¿Quiere que siga?-numeré los insultos.

-Sé que entre vosotros hay algo parecido a una relación, Samantha.

Me quedé pálida al escuchar esas palabras salir de su boca.

¿Desde cuándo lo sabía? Se supone que no están permitidas las relaciones entre alumnos e intructores y que me cambiarían si el coronel se enteraba.

-No te alarmes-me calmó.

-¿Cómo lo sabe?-pregunté culpable.

-No es difícil ver como mi hijo deja atrás su antigua vida de mujeriego para querer a una sola persona, Samantha.

Ante esto me había quedado sin palabras. ¿Su hijo? ¿Había dicho que Blake era su hijo?

-¿Estás bien?-preguntó preocupado.

-Eh...si, si. Solo...no sé.

-¿Blake no te había dicho nada?

-Coronel, Blake está mintiéndome, y mucho menos me va a contar algo.

-Lo siento mucho, Samantha. ¿Hay algo que pueda hacer?

-¿Sabe usted dónde estaba Blake ayer por la tarde?-solté sin darme cuenta de lo que decía.

-Claro que sí-se rió-Vino aquí hecho

un toro gritándome algo así como: '¿cómo has podido darle el codigo a Samantha? Ella es aún muy inexperta para utilizarlo'.

-Siento eso, pero Savannah me dijo que tenía que informarlos-me disculpé.

-Te disculpas demasiado ante mí, Samantha.

La conversación había tomado un giro pasando a ser divertida y no enfadada.

Una voz un poco robótica interrumpió avisando al coronel Grayson de que Blake estaba esperando fuera.