Yo ballet y tú hip hop

Capítulo 12

—¡Atención todos! —Todo el instituto presta atención a lo que quiere decir Iván, incluida yo. Está subido encima de un banco justo donde se sienta siempre, a su lado se encuentran sus amigos y Shaina.

Abel me mira esperando a que reaccione pero lo único que emito es un sonido ahogado, ¡¿qué hace?! Lore se levanta para curiosear, al momento Iván prosigue hablando sin apartar su mirada de la mía.

—Escuchadme atentamente. Aquella chica de allí. —Me señala, por lo que todos se giran a verme. —Me ha robado el alma, no ahora, desde hace años que estoy enamorado de ella.

No dudo en levantarme, Lore se acerca a mí y enreda nuestras manos para apretarlas. ¿Se puede saber que hace? Los cuatro nos vamos acercando poco a poco hacia donde está el corrillo. Iván mira a todos los que se encuentran mirándole para luego fijar otra vez la mirada en mí.

—Ya sé que la he cagado infinitas veces y sé que no soy perfecto, Deni pero quiero que me ayudes a cambiar, lo haré por ti y sobre todo por mí, porque no puedo seguir tratando a la persona que más amo en este mundo como una mierda. Eres el amor de mi vida Denise Bennet y quiero pasar todo el tiempo que vivamos juntos. —La gente empieza a murmurar mientras nos miran, parece un partido de tenis. —Cariño, no quiero perderme ni un solo día más tu sonrisa, tu tic en el ojo cuando mientes, ni cuando te muerdes las uñas porque sabes que algo malo va a pasar o tus enfados porque te han suspendido un examen. Deni, quiero ser el primero en verte despertar y el último en verte dormir. Te amo.

Las lágrimas salen, una detrás de otra pero silenciosas. Todos se giran a verme, incluidos mis amigos. Han hecho un camino entre ellos que me dirigen directamente a Iván que sigue ahí mirándome sin pestañear con lágrimas en los ojos esperando una respuesta. Dios, lo quiero muchísimo pero no puedo pensar con claridad con toda estas personas mirándome.

Decido dar un paso hacia delante pero no puedo, no en este momento. Salgo corriendo hacia la salida mientras la gente emite un "Uh". Tengo que llegar rápido a la salida del instituto o no me dejaran salir una vez la campana suene. Noto que alguien me sigue y me grita.

—¡Deni espérame! —Paro en seco al escuchar que es Abel. Se abalanza hacia mi envolviéndome con sus enormes brazos, apoyo mi cabeza en su pecho dejando caer las lágrimas que me quedan. —Vayámonos, tengo el coche aparcado fuera.

Coge mi mano para arrastrarme hacia fuera. Nos subimos al coche y arranca para alejarnos de este maldito sitio.

Nos detenemos en un semáforo y pone su mano en mi pierna, la aprieta como símbolo de fuerza. Lo miro con las lágrimas aun cayendo, no duda en limpiarlas con sus finos dedos, seguidamente pasa su mano por mi cara para acariciarla. Se separa de mí para volver a arrancar el coche. Me paso todo el trayecto a no sé donde mirando por la ventana, entramos a una urbanización super elegante, podría decirse que estas casas solo pueden ser de ricos famosos.

Una vez que entra en un porche y aparca me mira con media sonrisa, yo le respondo con una mirada dudosa.

—Bueno señorita, bienvenida a mi casa. —Me muevo intranquila. —No hay nadie tranquila. —Asiento con la cabeza.

Salgo del coche sin dejar de mirar la enorme casa que hay delante de mis ojos, ¿quién coño es mi amigo? Entramos por la puerta negra doble dejando ver lo que viene siendo el salón, espero que este sea el único salón que haya porque madre mía, es enorme. Me dirige hacia el piso de arriba, supongo que para ir a su habitación.

Efectivamente, abre la puerta también de color negro para luego introducirnos en el interior. Abro la boca al ver que su habitación es más grande que mi casa. Deja sus cosas encima de una silla para luego tumbarse en la cama.

—Venga, cierra la boca y túmbate aquí conmigo. —Eso hago. Camino hacia la cama para dejarme caer encima. Me acurruco en su pecho dejando caer las lágrimas que gritaban salir de nuevo. —Tranquila Deni, todo se arreglará, ya verás.

Narra Iván

Y se va corriendo, lo único que hace es correr lejos, lejos de mí sin darme ni siquiera una respuesta. La gente se gira para verme de nuevo a mi pero no tengo tiempo de escuchar a estos estúpidos murmurar. Me bajo del banco y salgo corriendo detrás de ella, no la puedo dejar escapar, no de nuevo.

El tonto de Abel se interpone en mi camino deteniéndome con una mano. Al final se llevará una hostia como siga así.

—Ni se te ocurra volver a acercarte a ella, confiaba en ti y tú, siempre la cagas. Ahora déjame a mí. —Sale corriendo detrás de ella como yo hace unos segundos.

Mi cabeza empieza a dar vueltas, mi cara se torna roja de rabia y mis manos se mueven formando un puño.

—¡Qué coño miráis! —La gente empiezan a dividirse para hacer lo que hace unos minutos hacían. Escucho mi nombre a lo lejos. Lore, su amiga viene hacia mí. Lo que me faltaba ahora.

—¿Se puede saber que has hecho ya? —Se cruza de brazos esperando una respuesta. Paso mi mano por mi cara para luego tirar de mi cabello.

—Lo que mejor se me da, cagarla. —Me siento en el banco más cercano, necesito respirar.

—Te lo digo yo por ella, eres un completo gilipollas. —Tiene toda la razón. —Lo único que haces es estropearlo todo para volver al principio.

—Solo quería que supiera que la quiero y que haría cualquier cosa por ella. —Se sienta a mi lado girándome la cara para que la mire.

—¿Por qué te acostaste con su prima? —Las lágrimas salen de mis ojos disparadas, las intento limpiar con las manos.

—Yo, yo, no tengo excusa. La vi llorando, tan vulnerable, nunca antes la había visto así. Me hizo el lio. Solo quería acercarme a ella para consolarla y se tiró encima de mí besándome. —Tiro de mi cabello. —Toda la culpa es mía, si hubiera parado a Shaina, ahora Deni y yo estaríamos juntos.

—No esperes que te dé una palmada en la espalda y te diga ves a por ella, porque no es así. Has perdido totalmente mi confianza, la de Tomás, la de Abel y sobre todo la de Deni. —La interrumpo. No quiero que siga diciendo lo que sé que va a decir.

—Lore, la quiero, nunca he querido a nadie como a ella en mi vida. Necesito que me perdone. —Susurro entre dientes esto último.

—Basta, deja decir todo esto que no te lleva a ningún lado. Ahora por su bien, no te acerques a ella y déjala ser feliz con quien realmente se lo curra cada día como es Abel. —Se levanta para irse, pero hace un gesto con la mano y vuelve a mirarme. —Por cierto, antes de que me arrepienta, si no eres como Hugo como dices ser, no te comportes como él. Sé más valiente e intenta pensar antes de soltar esas asquerosas palabras que le dices a Deni, si la amas como dices, haz que vuelva a confiar en ti. —Dicho esto, se gira para irse hacia donde está Tomás.

Eso quiere decir, que quiere que luche por ella. ¡Se ha contradicho! Sabe que Denise está enamorada de mi y que me quiere, por eso lo ha dicho. Tal vez no haya dicho eso del todo, pero voy a ir a por ella, antes de que sea realmente tarde.

Salgo corriendo hacia la puerta trasera, ya que lo más seguro es que esté el segurata en la entrada. Subo en mi coche y hago lo que me ha aconsejado Lore, pensar, dónde puede estar. Esta ciudad es muy grande, hay miles de rincones donde podría estar con el tonto ese de Abel. Cojo el móvil y llamo a su casa, buzón de voz, eso quiere decir que no está allí. Su móvil lo tiene apagado, genial. Tal vez esté en el banco aquel del mirador. Arranco el coche para poner rumbo hacia el sitio.

Ignoro los semáforos pasando a toda velocidad, como me pille la policía mis padres me matan. Al llegar al sitio, veo desde el interior del coche que no hay nadie, vacío. Aparco el coche en doble fila, bajo y me siento en el banco donde ella se suele sentar. La verdad es que las vistas son increíbles. Barcelona es una ciudad preciosa en la que quiero pasar el resto de mi vida pero con ella, con Deni. Tapo mi cara con las manos, estoy desesperado. Las lágrimas vuelven a salir, esta vez no las limpio, dejo que caigan libremente.

Esto es una mierda, está situación es una mierda, yo soy un mierdas. Es la única chica de la cual me enamorado, es tan perfecta, tan diferente, me vuelve loco y este sentimiento duele, duele muchísimo cuando las cosas no funcionan y eres rechazado.

La historia de como me enamoré de la novia de mi mejor amigo. Hace un par de años, más o menos, le lancé un globo de agua en su cara y lo único que hizo fue ignorarme, dios como dolió eso. Que me ignoren es una cosa que no soporto, ahí empezó todo. Pasó de ser invisible para mi a ser mi objetivo, solo quería dejar de ser invisible para ella. Encima su prima, no dejaba de hablar a todas horas de ella. Da igual donde estuviéramos que constantemente la mencionaba, siempre he pensado que le tiene envidia, porque ella sabe que hacer con su vida y Shaina solo se limita a existir.

Un día me dio por seguirla, quería hacerle una jugarreta para que me insultara o hiciera algo. La seguí hasta el campo de baloncesto que hay en nuestra escuela y ahí estaba, rodeada por los brazos de mi mejor amigo, Hugo. Se comían a besos mientras reían por algo, se veían felices. En ese momento, mi cabeza hizo clic pero el corazón hizo lo contrario, este cada día bobeaba más fuerte al verla mientras mi cabeza me decía que la olvidara.

Se unió a nuestro grupo, aunque no venía con nosotros muy a menudo. Siempre que se acercaba a mi para darme dos besos dejaba su aroma en mi nariz pero luego se alejaba como si no me conociera. Cuando podía, le hacía cualquier jugarreta por tal de estar con ella más tiempo, Deni solo seguía ignorándome hasta que un día, se dignó a hablarme y a preguntarme cosas sobre mi, quería que formara parte de su vida.

Me estaba enamorando de ella y sabía que era prohibida al ser la novia de Hugo, pero creo que eso es lo que más me incitaba a ir tras ella, Hugo nunca se la ha merecido. Deni desconoce tantas cosas de él, secretos que es mejor que nunca salgan a la luz, por ella y por mi. Hugo es un hijo de puta, que no tardó ni dos segundos en engañarla y en amenazarla. Lo último que me dijo antes de irse fue que algún día volvería y la mataría.

Por eso he hecho todo lo que hecho, solo estaba con Shaina por ella, únicamente para protegerla pero se enteró de todo y me amenazó en contarlo si no seguía con ella. Ahora eso da igual, quiero a Deni, llevo media vida queriendo estar con ella y cuando tengo una oportunidad, la cago. Me arrepiento de todo, de todo lo que he podido causarle.

Encima, dentro de una semana es mi cumpleaños y quería invitar a Deni a cenar por ahí pero ya no sé si eso será posible.

Editado el 22/04/2020