Cómo es posible que todo me pase a mi. Hugo se encuentra medio escondido entre las personas que se van a graduar como yo y sus familiares pero eso sí, no me quita el ojo de encima. Cada paso que doy ahí está él a lo lejos observando, esto es acoso señores. Si ha vuelto es por alguna razón, ese chico no esconde nada bueno.
Mientras nos sentamos en nuestros respectivos asientos, observo el lugar. Han dejado precioso el patio. Con guirnaldas de luces, plantas, un pequeño escenario y montones de sillas. Al ser las ocho de la noche, las luces hacen el ambiente mucho más cálido. Este será un día para recordar.
La directora se posiciona enfrente del micrófono para empezar a relatar su discurso. Los demás profesores se sientan en sillas justo detrás de ella haciendo honor al instituto. Lore está sentada a mi lado y Tomás justo al suyo. Iván a mi otro lado y ahora que me fijo, la silla de Abel está vacía. ¡Su madre! Saco mi móvil para enviarle un mensaje, espero que me conteste pronto.
—Es por eso, que en este gran día, anunciaremos a los graduados, que deberán pasar por este escenario para recoger el diploma. —Y con estas palabras acaba el discurso la directora. Saca una lista enorme y empieza a nombrar a los estudiantes.
Van subiendo de uno en uno, creo que van por orden de clases. De nosotros, la primera en subir es Lore. Ella preciosa con su vestido rojo mate, se levanta con elegancia y se dirige al escenario a recoger su diploma. Los aplausos de la gente que ni conocemos se hacen aún más fuertes.
—Denise Bennet. —Madre mía, ¡me toca! Seguro que me tropiezo con este vestido.
Iván me aprieta la mano antes de entrar en la pasarela para a continuación subir al escenario. La directora tiende su mano como gesto de saludo y pasa a entregarme el diploma. Pongo mi mejor cara y sonrío a los demás estudiantes para que aplaudan y otro profesor mientras se dedica a sacar fotos del momento. Por último en graduarse son los chicos. Iván, Tomás y Abel, pero al no estar, Lore y yo subimos a por él en su honor. Estoy muy feliz, esto ya se ha acabado.
Poco a poco nos vamos levantando todos de nuestros asientos, algunos para saludar a sus familiares y otros, yo que sé, a fumar supongo. Iremos todos a cenar, los tres grupos a un restaurante. Sí, llamamos con dos meses de antelación para reservar el lugar.
De un momento a otro, Lore viene corriendo hacia mi con cara de preocupación.
—Deni, ¿has visto quién hay aquí? —Asiento con la cabeza. —¡Cómo se puede ser tan capullo!
—Lo vi antes de la ceremonia. No deja de observarme y seguirme.
—¿Lo sabe Iván?
—No, y espero que no se entere, no quiero que se vuelva a liar. —Momento justo, aparecen los chicos.
—Notición. Nos vamos a Italia. —Dice Tomás, a lo que yo me sorprendo. —Tranquila que iremos después de vuestro viaje a Londres.
—Menos mal que ya estaba a punto de arrancarte las bolas que te cuelgan ahí. —Nos reímos todos. Mientras estos dos hablan sin parar de su próximo viaje Iván aprovecha el momento para darme el beso que tanto estaba esperando.
—Estás preciosa, no me cansaré de decírtelo. —Sonrío como una tonta.
—Ya, para. Que al final me pondré como un tomate y no me gusta. —Justo cuando nuestros labios estaban a punto de rozarse se separa de mi y tira de mi mano para que lo siga. —Iván, ¿dónde vamos? —Sin contestarme, sigue tirando de mi. —¡Iván!
—He visto a Hugo, tenemos que irnos.
—Ya le vi antes, solo que no quería decirte nada. —Su cara cambia a un gesto más enfadado.
—Sube al coche. —Pasa una mano por su cabello, está nervioso. —¡Deni sube al puto coche!
Corriendo subo al coche y él hace lo mismo. Pero es demasiado tarde, Hugo pica en mi ventanilla. Miro a Iván con nerviosismo, pero este ya se estaba bajando del coche. Hugo se tira para atrás para quedar cara a cara con él, así que yo aprovecho para salir.
—Hombre la parejita. ¿Cómo están los recién graduados? —Poco a poco, Iván empieza a tener más venas hinchadas en su cara.
—¡Te voy a matar hijo de puta! —Se le echa encima para darle puñetazos en la cara. Hugo no hace nada, no se intenta defender. Esto no pinta nada bien.
—¡Iván para! ¡Lo vas a matar! —Intento tocarle, pero su brazo cada vez está más duro y la cara de Hugo más ensangrentada. Me estoy empezando a marear, esto no va a acabar bien. Hugo está riendo como puede pero empieza a atacar.
—Eso es lo que quiero. ¡Matarlo por violarte! —Me tapo la boca. Lo ha dicho, delante de todos. Un círculo enorme rodea la pelea desde que han empezado a pegarse y no ha debido darse cuenta.
La gente me mira con la boca abierta, eso hace que las lágrimas empiecen a caer. No me creo que esté pasando esto. Quiero desaparecer de aquí ya. Miro a mi alrededor pero no encuentro a nadie familiar. Me tapo la cara y al rato unos brazos me rodean. Es Joe, el primo de Iván. Me abraza y yo escondo mi cara en su pecho.
Joe intenta hacerse hueco entre la gente para que podamos pasar y dejar así a esos dos que no paran de pegarse.
—Vayámonos de aquí Deni. Mi hermano los parará. —Asiento con la cabeza y me seco las lágrimas. Andamos todo recto sin parar, giramos unas calles y paramos en un parque para descansar.
—¿En serio te violó? —Lloro más fuerte. Me abraza como el hermano mayor que nunca he tenido. —Perdón, no quería entrometerme.
—Me hizo mucho daño y, ¡no puedo más! He intentado ser fuerte todo este tiempo pero ahora estoy harta, no puedo más. Desde que apareció todo ha ido a mal.
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Yo ballet y tú hip hop
Teen FictionElla una profesional del ballet. Él un aficionado al hip hop. Ballet y hip hop, dos tipos de bailes muy diferentes pero a la vez muy iguales. ¿Qué pasaría si su prima estuviera metida en el asunto? ¿Qué pasaría si su ex volviese con ganas de acabar...